11 de mayo de 2024.- Las tensas inundaciones que azotan el sur de Brasil, desde hace una semana, han cobrado la vida de 137 personas, de acuerdo a la última actualización de la Defensa Civil brasileña.
El ente también puntualizó que “casi dos millones de personas” figuran entre el número de damnificados a causa panorama hidrometeorológico que vive el sur de la nación suramericana.
Según EFE, al menos 141 personas se mantienen desaparecidas. Esta cifra se suma a las “más de 400.000” que se han sido evacuadas, de ellas unas 340.000 hacia refugios en casa de amigos o familiares y otras 71.000 hacia espacio de protección creados por las autoridades brasileñas.
La situación más tensa la vive el territorio Rio Grande do Sul, en donde se han reportado “136 muertos y 756 heridos”, mientras que el otro fallecido se confirmó en la zona vecina de Santa Catarina, donde el panorama climático es mucho menos intenso.
En tanto, el Gobierno estatal de Rio Grande ha creado un sitio web donde ha puntualizado datos de interés. Siguiendo estos datos, según el ente, dentro del estado se han visto afectados 441 municipios, 71.409 personas permanecen albergadas, 339.928 han sido evacuadas y se han rescatado a 70.863.
Asimismo, la dirección del estado ha habilitado una cuenta de recaudación para contrarrestar las afectaciones que, de acuerdo a la última actualización que ofrece el sitio ya cuenta con 92.548.000 reales.
Por su parte, el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, dijo este sábado que hasta el pasado jueves ya han enviado “casi 2 mil toneladas de donaciones a Rio Grande do Sul”, lo que constituye “el mayor movimiento de donaciones jamás registrado en la historia” de Brasil.
Este dato el presidente brasileño lo puntualiza en su cuenta de X , luego de que confirmara el propio jueves que enviaría al estado sureño “un paquete de ayuda financiera de 50.000 millones de reales” (9.800 millones de dólares).
A tono con estas acciones, este viernes, el gobernador Eduardo Leite llegóeste viernes al Centro Vida Humanístico, en Porto Alegre, al sureste del estado, donde “habló con los acogidos sobre las condiciones y principales necesidades del lugar”.
Las intensas lluvias habían disminuido para el pasado jueves, no obstante, para este sábado retomaron su intensidad, concentrándose especialmente en el Vale de Taquarí, considerada entre las regiones “más afectadas” en la última semana; así como en Porto Alegre, capital del estado.
