De que el tipo es bobo es de cajón.
Pero por eso no se crea que al descubrirse bajará su “popularidad”.
Mazuco asesino y todo fue uno de los más votados.
El canalla William Dávila Barrios fue el diputado más votado del Estado Mérida.
Y si en lugar del bandido Lester Rodríguez, se lanza como candidato al violador Nixon Moreno de seguro que éste habría conquistado la Alcaldía de Mérida.
La boba Violeta Chamorro le ganó las elecciones a los sandinistas (aglutinando a 14 partidos, desde partidos Somocistas ¡hasta el Partido Comunista! de Nicaragua,… cáiganse de Q…).
Fue aquella una especie de la MUD que allá se llamó UNO. Un Unidad ordenada, como la de aquí, por el Departamento de Estado norteamericano.
Los bobos no comen “casquillo”.
Hay que tener en cuenta, como decía el poeta Schiller, que contra la estupidez los mismos dioses luchan sin alcanzar la victoria.
Y en Venezuela hay una elevada concentración de la estupidez, de vieja data, cultivada en las rutilantes prendas del capitalismo: la bobería de la moda, el disimulo, el egoísmo, la hipocresía, la envidia y ambiciones miserables; son millones, y no se sabe si esta plaga amenaza con crecer y reproducirse como las alimañas, como la cizaña, como las ratas.
Yo no me fío.
Si alguien dice “me da la gana de ser bobo y amar a los bobos”, qué puede hacer usted.
¿Cómo se podría luchar contra la idiotez tozuda, que se regodea en su propia mierda?
Para eso todavía no se ha descubierto ni creado una fórmula.
Después de trece años de lucha contra el viejo colonialismo, contra los medios asesinos, contra los grandes ladrones y estafadores de Fedecámaras; contra los que asesinaron a mansalva el 11-A, contra los que odian a nuestro país y desean que nos demanden poderosas transnacionales: que nos destruyan en el exterior, que nos condenen organismos internaciones, que derroten a nuestros equipos deportivos, que celebran con sevicia la enfermedad del Presidente; contra los enfermos que ahora se regodean en el cáncer que padece Chávez…
Después de tantos años hablando, discutiendo, sirviendo en tantas áreas a los más necesitados en salud, vivienda, deporte y educación, aún hay millones que adoran y votarían por el Bobo de la Escoria.
Los bobos jamás quieren rectificar bueno, ni le interesa nada bueno.
Nada ama más un bobo que su bobera.
Ni Cristo pudo contra ellos en su tiempo.
Tampoco Bolívar.
Menos Allende.
Incapaces de perdonar o rectificar el bobo se crece cuando lo enfrentan.
Yo recuerdo que el mismísimo lunes 15 de abril de 2002, a pocas horas de que Chávez regresara a su presidencia, se desató de nuevo en los medios el odio retinto y más intenso contra el chavismo.
De entrada saltó el obispo Porras a decir que era mentira lo del Golpe y que Chávez iba a continuar con el enfrentamiento social y político.
La guerra desde Globovisión, RCTV, Venevisión y Televen lo que hizo fue recrudecerse.
Y los bobos siguieron obedeciendo a los mandatos de la CIA, como si aquí nada hubiera pasado.
Les importó un pito los francotiradores que mataron al DISIP en Miraflores y a todos los militantes del MVR que cayeron acribillados por la metralla de policías de la PM o de las alcaldías al servicio de los patiquines de Primero Justicia, ese partido fascista, el primero en meter un ministro en el gabinete de don Pedro Carmona.
Si hubo más muertos del lado de los chavistas que de la marcha de la oposición y si la ésta como se dice iba enteramente desarmada, cabe hacerse la siguiente pregunta:
¿SERÁ ENTONCES QUE LOS CHAVISTAS SE SUICIDARON?
A los bobos de la escoria no les interesa pensar ni analizar nada. Ellos sólo se guían por rumores.
jsantroz@gmail.com