Por este y tantos motivos más el sentimiento de Chávez está en la calle y es por medio de los recuerdos desde sus días de rebelión cuando nos enseñó que nunca debíamos olvidar los días aquellos cuando injustamente fueron acusados.
Los llanos son la inspiración de los luchadores: puros, tenues, humanos, respetuosos, solidarios, pensadores profundos de las verdaderas necesidades de la gente, quienes llegan y traspasan hasta más allá de donde muchos ya se habían detenido.
Estos sueños de patria construidos desde el sentimiento de las sabanas, donde millones de seres humanos aún siguen motivados invirtiendo su tiempo junto a las ideas nacionales de patria y revolución.
Un país volcado con millones que asumen una nueva realidad, igual a las esperanzas con sus arrimes quienes son capaces de levantar gigantescos trancones que anteriormente habían paralizado las luchas de nuestra población.
El Presidente Hugo Chávez ha tenido la maestría en el rescate de nuestra idiosincrasia múltiple y variada compuesta en un territorio inspirado tras los pasos de los sentimientos bolivarianos.
Nuestra seguridad son nuestros recursos pero debemos parecernos mas a un país petrolero antes que a un país rentista como en efecto lo estamos desarrollamos. Esta actividad debe estar concentrada en el interés que dirige la administración pública. Nada de seguir pareciéndonos a un país de republiquitas ministeriales, muy al contrario la concreción del Socialismo del Siglo XXI está en la capacidad de un Estado amplio, trasparente como el de las planicies venezolanas.
Para: aporrea.org
