¿Recuerdan cuando Chávez, cristiano confeso, empezó a hablar de Nietzsche al comienzo de su enfermedad? Bueno, a continuación algunas palabras de NUESTRO propio "filósofo del Zulia", dichas por entonces:
“Entendida de manera convencional, la religión oculta con mandamientos, cúpulas, imágenes al Cristo humano, que es un hombre histórico. Eso lo pone Nietzsche en evidencia. Su visión está muy ligada al sentido esencial de la religión cristiana, que es religión de la vida.”
Y agrega:
"El filósofo alemán lo que buscaba era desmontar la visión institucionalizada de Cristo, que lo separa de la condición humana."
La deshonestidad intelectual a la que puede llegar un filósofo, por "comprometido", es flagrante. Decididamente, la filosofía, al igual que el periodismo, no puede estar al servicio incondicional de un partido. No pueden éstos, por definición, ser oficios militantes.
¿Estará tan seguro nuestro comprometido intelectual de lo que allí afirma, o quisiera siquiera estarlo? La crítica de Nietzsche al cristianismo, como es bien sabido, apunta directo a la moral cristiana tal y como ésta se presenta en las palabras –tomadas de los evangelios– del propio Jesús (histórico o no). Los comentarios de Nietzsche son pues "literales" y nos refieren al dogma implícito en las enseñanzas del nazareno, no a la institución posterior (y probablemente apócrifa) llamada iglesia. Nietzsche es muy preciso y claro, su cuestionamiento al cristianismo alude a las parábolas atribuidas al propio Jesús. Poner la otra mejilla (palabras de Jesús) es para Nietzsche una de las "perlas" más despreciables de la moral cristiana.
En tanto que filósofo (o egresado de estudios académicos de filosofía, según tengo entendido), Pirela debería evitar hacer el ridículo con semejantes declaraciones sobre Nietzsche. Bien haría en leerlo de nuevo –si es que lo hizo alguna vez–. Nunca le bastará, en todo caso, el ejercicio de una ética militante y fiel para conseguir respetar (suponiendo que ello le importase) aquello que con tanto sacrificio y sobre todo talento el inmenso autor del Anticristo dejó escrito. Hay momentos en que la "razón política" NO lo admite todo, contrariamente a lo que suponía Machiavelli. El vitalismo de Nietzsche no es declinable de manera tan alegre. No se trata de un filósofo fácil, y hacerle eso a quien declarase La Muerte de Dios (sin aludir –además– a la iglesia como tal), equivale a una... desvergüenza deontológica.
Por cierto, a menos que como todos los cristianos se sienta culpable y pecador de nacimiento, Chávez debería estar "aferrado", en su lucha por la vida, a Nietzsche, el de la voluntad de poder, en vez de "a Cristo", el del perdón... Por supuesto, es sólo mi opinión –libre– respecto a una información encontrada en un Comunicado Oficial de la República Bolivariana de Venezuela.
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