Soberanía Alimentaria, Comunas y Gobierno

Nuestro Presidente Nicolás Maduro en sus tantas alocuciones y en especial: la juramentación de su nuevo gabinete ministerial, nos ha convocado a impulsar la Revolución en la Revolución y en ella la revolución productiva agroalimentaria. Como Él lo afirmó, debemos de partir intensificando la producción de semillas campesinas y agroecológicas. Acertadamente entiende que es desde allí, donde se sustenta todo el andamiaje del largo y complejo caminar de la independencia y soberanía agroalimentaria nacional.

Conoce nuestro Presidente Maduro que, en cualquier proceso revolucionario y libertario, si no creamos las condiciones para Revolucionar la Revolución, en cualquier área del conocimiento, los altibajos de los procesos de cambio y sus dinámicas, nos atrasan o retrasan, las sanas, buenas y entusiastas propuestas que podamos ofertar. Entendido que en ellas continuamos manteniendo, las severas contradicciones de orden coyuntural y estructural que, en verdad, no nos permiten dar los saltos que el empuje revolucionario concibe.

 

RAZÓN, ¡LA VIDA!:

En nuestro caso venezolano, el sector agroalimentario es uno de los que -más- presenta severas contradicciones por cuanto está en juego la nutrición y/o alimentación sana-adecuada para un Pueblo. Ello implica que en la cuestión de la soberanía alimentaria y en este proceso de transición hacia un modelo de producción ecosocialista; necesariamente, debe valorarse desde diferentes dimensiones: la científica-técnica; la ambiental-cultural; la distribución-transformación-consumo; la jurídica; y la organización social de la producción primaria. Esta última dimensión complejiza más la condición alimentaria, por cuanto los medios y modos de producción irremediablemente afectan la utilización de los recursos naturales en especial el Suelo y el Agua. Un suelo VIVO implica agua PURA; Un Mono-”cultivo”, altamente dependiente de agrotóxicos, como en verdad éstos son, implica agua CONTAMINADA y en consecuencia un suelo MUERTO. Sin Agua no-hay ¡Vida!.

Es por ello, que el definir una política pública AGRO-ECO-LÓGICA, para largo y mediano alcance y a Escala Nacional, es una Prioridad de Estado demandada en la CRBV y explícitamente en el Segundo Plan Socialista Programa Patria 2013-2019. En especial el Objetivo No. 5 Preservar la vida en el Planeta y salvar la especie Humana.

 

AGENDA VITAL, DEBATES Y ACCIONES INMEDIATAS:

Para definitivamente avanzar en la independencia de nuestra soberanía alimentaria y darle solidez y consistencia, a la Revolución en la Revolución Productiva, inmediatamente debemos emprender los siguientes debates y acciones:

  1. Un primer nivel acción local-comunal, es: conformar las Redes Eco-Agroalimentarias. Venezuela tiene unidades de producción que generan cultivos, rubros o alimentos crudos, máxime si partimos que Venezuela es un país con una inmensa diversidad biológica, y está llamado a exhibir la potencia productiva de alimentos sanos y agua limpia que tienen las culturas del trópico. De estos tantos cultivos podemos encontrar 407 cultivos alimentarios de los cuales, de los cuales, el 48% tienen propiedades medicinales. Entendiendo que simultáneamente estos se pueden producir en diferentes Estados y socio-bioregiones; las Eco-Redes agroalimentarias, en su natural integración, producirían sus cultivos sobre las bases de las condiciones gastronómicas de cada región. Dicho de otra manera, cada eco-red, implica un punto de encuentro de varios cultivos o unidades de producción en la medida que podamos combinarlas. Por ejemplo: la arepa significa un punto de encuentro de 16 cultivos-alimentos o unidades de producción; las empanadas 17; el sancocho 28; el pabellón 15; la tizana de fruta 12; las cachapas y la parrilla criolla 9 entre otras.

Proponemos una forma de organizar la producción primaria de alimentos. Que cada comuna o consejo comunal consolide, entre 3 a 5 eco-redes agroalimentaria locales, partiendo del extraordinario potencial agroecológico que de ellas se desprende. Esto, debe reforzarse culturalmente con una agenda reivindicativa y mediática de estos naturales-platos de nuestra cultura, de los buenos y sanos productos que los componen y del valor de PATRIA de quienes los cultivan.

  1. Articulada a la acción anterior y de acuerdo a las resoluciones establecidas, se debe continuar potenciando el Programa Todas Las Manos a la Siembra, en 300 escuelas educación media por año, hasta llegar a cubrir todas las escuelas y liceos a nivel nacional de hoy al 2017. En la actualidad más de 500 escuelas demuestran las bondades de dicho Programa. Así mismo y por los mandatos existentes en cada Universidad Politécnica Territorial Nacional y en Universidades que tengan condiciones para producir alimentos, el programa en mención y en conjunto con los consejos comunales deben establecerse. Para diciembre del 2013 contaríamos con 35 Unidades Universitarias de Producción de Alimentos bajo el enfoque que propone el Programa Todas Las Manos a la Siembra.

  2. Abordar la implementación colectiva de los objetivos específicos, acciones generales y específicas de la Estrategia Nacional para la Conservación de la Diversidad Biológica 2010-2020 y su Plan de Acción Nacional, concomitante a las dos acciones anteriores, se pueden conformar anualmente 20 grupos de trabajo con cada eco-red y el programa mencionado y con ellos coordinar la acciones correspondientes a su sociobioregión. De ahi se deben establecerse los bancos de semillas para la producción de alimentos.

  3. A nivel nacional solicitar auditorías para la activación de más 1750 créditos agroecológicos otorgados por FONDAS. En su mayoría ubicados en Estados Andinos, Sucre, Miranda y Monagas.

  4. En el período de un año o menos, ejecutar la Re-ingeniería de Agropatria, creando articulación institucional, para potenciar en 50% la producción de bio-preparados y bio-insumos y avanzar en lo exigido en el Plan Patria 2013-2019.

  5. En el período de 2 años consolidar 3 eco-parques por regiones de defensa y desarrollo integrales, ya creadas por mandato presidencial; en donde se le de prioridad a las acciones relacionadas con el manejo de los residuos, el reciclaje de la materia orgánica. En concurrencia con campañas educativas desarrolladas en las escuelas buscando llegar a los hogares de cada venezolano. Para ello es importante la incorporación de los trabajadores del área de recolección.

  6. Para el 2019, necesitamos haber formado 3200 Agroecólogos, practicantes y militantes, orientados en escalar la producción, investigación y transferencia de técnicas y procesos agroecológicos.

  7. Avanzar en la legislación agroecológica, modificando la ley de semillas actual. Al respecto, debemos urgentemente valorar las potenciales amenaza-riesgo-oportunidad de la definitiva introducción de los cultivos transgénicos que el sector empresarial de la oposición Fedeagro-Monsanto impulsa con la propuesta ofertada del Mercosur. Recordemos el NO de nuestro Comandante Chávez a los Transgénicos. www.voltairenet.org/article1. Y las tantas reflexiones referidas. Por ejemplo: ¿Es verdad que en Venezuela no se puede potenciar la producción de alimentos de origen no transgénico? ¿Necesariamente debemos consumir y producir alimentos transgénicos sin haber consolidado el andamiaje tecnológico agrícola nacional? ¡Venezuela no es lo mismo que Argentina, Brasil y Uruguay! Sus ofertas tecnológicas las hacen sobre la base de su RELATIVA consolidación. A ello le agregamos las extraordinarias imponderables de los cambios climáticos, que obligan a valorar procesos de planificación diferentes; amén de las inferencias en la Salud que la transgenia ofrece con nefastos vaticinios.

 

RAZONES BÁSICAS PARA UNA ORGANIZACIÓN ECO-PLANIFICADA

Para la definición de una política de mediano y largo plazo, esta debe verse sobre la visión Prospectiva, que no es más que darle usos creativos, a las técnicas de teledetección. Utilizar las múltiples bondades del Satélite Miranda para valorar e impulsar la planificación de las actividades agrícolas. Estas metódicas nos permitirían encontrar buenos argumentos, para darle un nuevo ordenamiento al territorio, insumos para la Participación Creativa y Productiva. Enfocándonos en particular en los recursos que están más sometidos a stress: los Suelos y las Aguas. El país definitivamente tiene que conocer el estado del arte de estos recursos de vida, por cuanto son las eco-bases materiales de toda actividad primaria alimentaria. Se exige definir una nueva zonificación agroecológica, lo cual, nos permitiría ponderar a futuro nuestras proyecciones en materia agrícola, valorándolas con las tantas imponderables climáticas actuales. Se exige re-dirigir los potenciales institucionales y empresariales del Estado, entiéndase desde la extraviada Academia de Ciencias Agrícolas hasta la eco-lógicamente impotente Agro-Patria, bajo un proyecto agrícola sustentable coherente con la Vida. Esto es de absoluta prioridad. Para ello debemos aceleradamente impulsar las siguientes iniciativas:

  1. Generar condiciones para la conformación de grupos de tareas -y agendas conjuntas que posibiliten la convivencia productiva entre el medio institucional , las comunas, consejos comunales, tejidos socio-productivos y demás espacios de integración social. Especialmente y desde el Plan Patria 2013-2019 articulada-mente impulsar los objetivos estratégicos agroalimentarios, los cuales 35 de ellos, 17 tienen que ver con el accionar agroecológico y en la segunda de 12 objetivos 7 también lo exigen.

  2. Con agenda concreta de trabajo, conformar la Comisión Ínter-institucional de Agroecología. El mandato recae en el Instituto Universitario de Agroecología “Paulo Freire”-IALA- quien URGENTEMENTE solicita evaluar las 17 regiones hidrográficas que existen en Venezuela. Tal es el caso de la cuenca de la Región de los Llanos Occidentales , cuenca hidrográfica en cercanía a dicha institución. Se propone sobre la base de los tantos estudios elaborados, de inmediato comenzar un plan recuperación de las cuencas de los ríos que abastecen los agonizantes embalses Masparro, Boconoito, La Yuca y Tucupito.

  3. Las 24 Unidades Territoriales Científicas y Tecnológicas que existen en el país deben fomentar e impulsar aceleradamente los debates que sean necesarios para conformar el nuevo direccionamiento de la investigación agrícola-ambiental que debe urgentemente pro-moverse en nuestro proceso revolucionario

  4. Avanzar en hacer-uso de los programas de Teledetección para la Planificación de la Producción y Ordenamiento Agro-Eco-Lógico del territorio local; desarrollando, adaptando y exigiendo, donde se deba, en tecnologías libres -pero soberanas-.

A todas estas acciones puede otorgárseles un orden prioritario temporal, confiriéndoles las buenas razones de una estructura para un Programa Nacional. Independientemente de ello, cada una de estas acciones deben abordarse entre los diferentes niveles de acción productiva, educativa e investigación, de manera inmediata y prioritaria; continuar su retraso significa mantener los diferentes estragos productivos y ambientales, los cuales profundizarán las contradicciones sociales-ecológicas, que se siguen diluyendo, en detrimento de darle la mayor felicidad posible al Pueblo venezolano.

PATRIA LIBRE Y SOBERANA: ¡PATRIA AGROECOLÓGICA!

ipiat2000@yahoo.es

 



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Miguel Angel Núñez

Director del Instituto Universitario Latinoamericano de Agroecologia " Paulo Freire" Venezuela

 ipiat2000@yahoo.es      @17MiguelAngel

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