Hoy, cuando la burguesía se ha quitado la careta y no de carnaval, sin darse cuenta que la vida es tan corta (EN AÑOS) que no vale la pena creerse superiores, vemos una realidad inocultable y es que el pueblo en vez de colocar guarimbas en sus barrios, prefiere y opta por divertirse y pasarla bien, unos en la playa o cualquier paraíso venezolano, otros en los templos; los que se quedaron en sus casas, la pasan en familia con su sancocho de cabeza de pescado o una paella con camarones, calamares y demás. Entonces, al ver la cruda realidad de una derecha apátrida, asesina, saboteadora y que odia hasta en Semana Santa, nos preguntamos ¿hasta cuándo seguirán los ricos con su guarimbazo, viendo poco a poco su decadencia? ¿Será que vienen nuevas manifestaciones criminales para que se acabe la criminalidad? ¿Será que los empresarios se cansaron de perder dinero y dejarán de desabastecer y no especularán a un pueblo que tiene Mercal o Pdval? ¿Seguirán en su maldad del odio imperial?

Al ver las jugadas de la derecha, con “sesudos” estudiantes ganando plata por guarimbear, como la Gaby Arellano, el Lorent Salent o el gordo Requesens, más que pillados en sus actividades desestabilizadoras y donde la urgencia es meterlos presos o quizás están en libertad para seguir ampliándoles sus expedientes y así, cuando caigan no tengan justificación para casa por cárcel, al ser traicionada la patria; TRAICIONADA. Pero llama la atención, la cantidad de apellidos raros que en otros tiempos no eran tan comunes, porque antes la mayoría de los venezolanos teníamos apellidos españoles y de un tiempo para acá aparecieron apellidos como el de Shirley Varnagy o el de la Viteznik, que se asemejan mucho a los apellidos de los “estudiantes” Smolansky o Sharifker, discúlpenme si su tatarabuelo llegó con Colón. Total, que esta partida de “criollitos” está confabulada para tumbar un gobierno legítimo y de paso ganando buena plata y viajando para “prepararse” en acciones guarimberas, criminales y golpistas.

No queremos escribir que la guarimba se rehizo, queremos escribir que La Revolución no deje que los precios aumenten, lo logramos en Diciembre, pero si en este momento un par de zapatos promedio vale 2.000 bolos, es que los “empresarios importadores” siguen guisando al pueblo con su especulación, claro venimos de una cuarta república, donde no se crearon las condiciones para desarrollarnos y la que paga los platos rotos es nuestra quinceañera revolución y el pueblo, que lo sabe y resiste el casquillo burgués; la maldad de las clases que lo tienen todo y está en este momento planeando su retorno; “nosotros” gozando una bola y los ricos arrechos. Sin ir muy lejos fíjense el GABO, tuvo que escoger una segunda patria porque en la primera estaba en peligro (como paso aquí) por ser un carajo de izquierda, que con su inteligencia logró desde niño darse cuenta, que en los gobiernos de los ricos, los que viven bien son los RICOS y ahí los ves; peleándose las cenizas de un escritor más claro que el agua, que me recuerda a Rómulo Gallegos. Léanse Doña Bárbara.

El escualidismo, desde hace tiempo usa el plan B, (fascismo) porque el A, (democracia) no les resulta; gracias a Chávez y la siembra del petróleo, además de que ese chorro petrolero va hacia los humildes en gran cantidad, hemos superado esa basura llamada cuarta república, bipartidismo o Pacto de Punto Fijo. Así, la patria mancillada que creó artificialmente el imperio con sus acólitos representantes nacionales, apátridas, me llevan a recordar al General Tomas de Heres, nacido en Angostura (hoy Ciudad Bolívar) el 18 de septiembre de 1795 de familia adicta a la corona de España. Éste, en 1812 entró al Batallón Numancia, creado por Monteverde, con soldados y oficiales venezolanos, que se parecían a los traidores de hoy, con la diferencia que luego de ser maltratados por los superiores españoles, (Morillo entre otros) por su condición de venezolanos, reaccionaron; Heres, se pasó en la primera ocasión que tuvo, junto a todos los integrantes del Batallón Numancia, a las fuerzas independentistas, esta ocasión se presentó cuando Perú, fue invadido por las tropas argentinas y chilenas del general San Martín. Este “salto de talanquera” sucedió en la madrugada del 3 de Diciembre de 1820, cuando Heres y sus tropas, toman prisionero al comandante del Batallón, Coronel Ruperto Delgado y algunos de sus oficiales. Al lograr esto, Tomas de Heres, marchó en seguida a buscar las fuerzas del General San Martín, encontrando la más cercana, que era la del General Rudecindo Alvarado y allí se incorporaron todos a las tropas del sur. San Martín, vio con buenos ojos semejante acción y actitud de este Batallón y ordenó que se llamara “Numancia, fiel a la patria” Heres, prestó grandes servicios en favor de la emancipación suramericana; con ellos y el desempeño cabal de diversos cargos, logro sus ascensos y el renombre bien merecido que lo acredita como uno de los más ilustres próceres venezolanos.

De tal manera que, mientras el pueblo este gozando una bola y los ricos estén arrechos, cabalgamos por la ruta del general Heres, quien tuvo que saltar la talanquera, a nuestro lado, al ser odiado por los imperialistas. ¿Cuándo se darán cuenta los escuálidos, que el imperio los odia y que simplemente están haciéndole un daño a su propia patria, al ser utilizados a cambio de dinero? o ¿son en realidad “gente” que al tener esos apellidos raros, no pertenecen a esta patria sino que pertenecen a los países de donde llegaron en la cuarta república, sus padres o abuelos? Ahí está la cuestión porque reconocemos que Capriles, López, Machado, Ledezma, son apellidos “venezolanos” pero de burgueses y hasta amos del valle y por eso su empeño en poner sus sanguinolentas manos en el poder a costa de la muerte de otros venezolanos, qué se llaman como ellos (Capriles, López, Machado, Ledezma) que en este caso, si son verdaderos amantes de la patria de Bolívar, Chávez y Maduro y de cada venezolana o venezolano que respeta su patria y reconoce la obra de nuestros líderes.

Nota: en este momento en CÑM, cuando está oscureciendo en La República Bolivariana, el Sábado Santo del 2014, esta Aristegui, a quien mis ojos vieron en otras oportunidades en el mismo programa, más bien de izquierda ella; resulta que ¡ahora es de derecha! y de paso entrevista al Heinz Dietrich, prepotente y agrandado hablando paja y pestes de la República Bolivariana y su gobierno popular. Tremendo par de bacalaos contaminados, a los que no es necesario ni importante dedicarles una letra más, tan solo que Aristegui, se quitó la pinta de hippie y ahora parece Aristócrata.

Estuvimos estos días, en el teleférico e instalaciones del Waraira Repano y estaba repleto, constaté que estaba hasta la bandera de pueblo. Todo tan bien organizado que es ampliamente recomendable. La comida, el paisaje, la gente, provoca quedarse por allá arriba. No dejen de visitarlo. En general disfrutamos una capital, que va a paso de vencedores en el proceso de transformación y de cambio de lo objetivo que tenemos, desde hace mucho (suciedad, delincuencia, prostitución, niños de la calle, mendigos, etc.) hacia una ciudad (un país) donde el ser humano sea lo más importante, lo demás, es lujo.