1819 Hoy

Conferencia por la Vida, la Patria y el Socialismo

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1819 HOY    

Las hijas y los hijos del mismo pueblo que con Bolívar recorrió la Cordillera de los Andes en 1819, vuelve a caminos tempestuosos con paso certero...

            Sin duda alguna, la partida material del comandante proveyó al enemigo imperial de una serie de condiciones para la escalada en su arremetida contra el pueblo venezolano. Entendido este último no sólo como un pueblo, sino como una patria socialista y bolivariana en gestación que además es indispensable en el restablecimiento del justo orden mundial. Como perros a la caza de indios y negros, la apátrida oligarquía venezolana en conspiración con diversos enemigos externos, soltó acaparamiento, especulación y guerra mediática como puntas de lanza de una estrategia desestabilizadora. Perros, que el pueblo ahuyentó con disciplina, paciencia e ingenio y que la organización popular acompañó con entrega a sus diversos proyectos a favor de la vida.

            Hoy  nos propusimos la Conferencia por la Vida, la Patria y el Socialismo como humilde esfuerzo de unidad y organización. No se trata de una instancia de confrontación contra ninguna institución u organización política (por ejemplo el PSUV). Muy por el contrario ratificamos, en lealtad a nuestro Comandante Chávez y con el proyecto de Patria, nuestro apoyo al legítimo presidente Nicolás Maduro. La conferencia no es más que un espacio diseñado para el reencuentro y reordenamiento del poder popular, directamente desde las bases. En los últimos 15 años, se ha consolidado un proceso de maduración política del pueblo venezolano que abrió la posibilidad de comprensión e interpretación de la realidad, y que eventualmente promueve la necesidad de transformarla.  La Conferencia por la Vida, la Patria y el Socialismo, no es un fin en si misma, sino un espacio para debatir sobre la ofensiva económica popular, la organización popular y la defensa de la soberanía “Pueblo en Armas”, temas que consideramos fundamentales en el actual momento histórico.

            Indistintamente de los niveles de resistencia del pueblo venezolano frente al abate económico del imperio, no deja de ser evidente realidad la necesidad de un abordaje distinto al problema económico del país. Tanto a lo interno, como en el plano internacional. Sólo la participación protagónica del pueblo y un mayor empotramiento de instancias productivas puede garantizar el reencauce de nuestra economía. Pero no se emprende una ofensiva económica popular sin un previo proceso de discusión e intercambio de saberes que permita la demostración de experiencias exitosas, como parte del mecanismo de pedagogización del problema económico.

            Se haría muy difícil cuantificar o cualificar las veces y la insistencia con que nuestro comandante dijo “Comuna... o Nada!”  En revolución, nada se trata de capricho.

Durante este proceso, y crecientemente luego de la desaparición física del Comandante, la necesidad de organización popular ha aumentado a un ritmo y con un tinte interesante. El desarrollo y profundización del proceso revolucionario está íntimamente ligado al desarrollo de las estructuras organizativas, comprender esto nos hace visible la necesidad de seguir fortaleciendo las experiencias del poder popular. Es el pueblo consciente y organizado quien tendrá la responsabilidad histórica de avanzar en la genuina construcción del socialismo del siglo XXI. Son las comunas las células fundamentales del cuerpo revolucionario en búsqueda de un Estado Comunal que logre  la participación plena y protagónica en el ejercicio  del poder por parte de las mayorías populares.

            “El bien más preciado que hemos reconquistado después de 200 años...”, la soberanía, es tan fundamental para la construcción de una patria, que se hace imposible no contemplar la temática dentro de la conferencia. Nos planteamos debatir y proponer en función de la defensa de la soberanía “pueblo en armas” desde la unión cívico militar. Parte importante de la macabra campaña de terrorismo mediático que viene enfrentando este pueblo se sostiene sobre la tergiversación de las organizaciones sociales y la concepción de pueblo en armas. Esta campaña no solo simplificó erradamente la infinita diversidad de organización social revolucionaria, sino que además pintó la organización social como bandas de malandros. Nosotros nos manejamos desde la comprensión de que un arma cambia de calidad cuando cae en manos de un camarada, porque entonces su misión no es hacerse de un pequeño poder para el beneficio personal, sino que se vuelve una herramienta extensión del cuerpo del hombre o la mujer que vive y de ser necesario muere por la revolución.

            Es por esa necesidad de reencontrarnos, por esa búsqueda de propuestas y alternativas, es por ese deseo de seguir por este camino manteniendo lo conquistado y profundizando en nuevos horizontes que invitamos a todos los sectores del campo popular, revolucionario, internacionalistas y bolivarianos a juntos construir una dirección colectiva, que nos incluya y de la que seamos parte protagonista, de frente mostrarle a la historia que este continente está a la altura y que su mirada está puesta en el porvenir, para nuestra próximas generaciones y las del mundo entero.

            De vuelta a 1819, Bolívar se encuentra con la misión de liberar a la Nueva Granada del Imperio Español. Los caminos más factibles eran de fácil acceso  o control para los españoles.  El único camino que los españoles, mucho mejor dotados para la vialidad y otros temas logísticos que Bolívar y su ejército, no recorrían solo quedaba libre por su naturaleza inhóspita... casi mortal. El ejército de Bolívar, llevaba consigo a sus familias: pueblo históricamente leal, solidario y valiente... entre ellos mujeres y niños. Cuentan que la altura ahogaba el aliento. Las piernas se iban volviendo de plomo. El hambre amasaba maliciosa los estómagos hasta de los más pequeños, sin compasión alguna. Y el frío le quemaba la carne, penetrante hasta los huesos, hasta al más fuerte. Vieron soles y lunas pasar, sin doblegar el paso, en favor de la vida.

            VAMOS DE NUEVO SIMÓN!       

            Que a nadie le sorprenda, despertar en la mañana, y descubrir que durante el breve receso nocturno de esta marcha una mujer haya parido... con el Paso de los Andes.

LA ESPERANZA ESTÁ EN LA CALLE!

Del 24 al 26 de Julio en el 23 de Enero. Caminemos en unión constructiva esta travesía libertaria.

 

CORREO CARIBE N° 1

 

CORREO CARIBE N° 2

 

CORREO CARIBE N°3



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