Lo que hay detrás de la navidad

La natividad es una festividad occidental de origen cristiano que data del siglo IV, sus dignatarios eligieron solemnizarla el 25 de diciembre, ya que ese día los romanos vitoreaban el nacimiento del dios solar Mithra , quien era para ellos el redentor de la humanidad. Al vincular dicha fecha, la iglesia católica con el nacimiento de Jesús, el culto idólatra fue girando poco a poco hasta transformarse en una celebración "cristiana". La transformación al catolicismo del emperador Constantino El Grande, tuvo mucho que ver en esto de la unificación del culto pagano al dios solar, con el nacimiento de Jesucristo.

Con el trascurrir de las épocas, la significación y su génesis (humildad, solidaridad, reconciliación, paz, amor) se han trasfigurado y han dado paso a la navidad posmoderna consumista y capitalista. Es demencial como el sistema dominante (capitalista), engendra las circunstancias objetivas y subjetivas, que inducen a imaginar a la clase obrera con la prosperidad y el bienestar, y que ello lo establece el poder adquisitivo. Esto acarrea como resultado, que la sociedades occidentales se hundan en un consumismo frenético beneficiando a las trasnacionales que venden los artículos que estén “en boga” (teléfonos, computadoras, electrodomésticos, ropa, calzado. etc.)

Para este cometido utilizan como herramienta la publicidad y la propaganda, pero no es tan inocente como parece, Edward Bernays autor del libro la “Propaganda” (1928), manifestó que el manejo de la opinión pública era una parte imprescindible de la democracia:

“La manipulación consciente e inteligente de los hábitos y opiniones organizadas de las masas son un elemento importante en una sociedad democrática. Aquellos que manipulan este mecanismo no visible de la sociedad, constituyen un gobierno invisible, que es el verdadero poder gobernante de nuestro país… Somos gobernados, nuestras mentes son moldeadas, nuestros gustos son formados, nuestras ideas son sugeridas, mayormente por hombres de los que nunca hemos oído hablar…”

Es palpable que la navidad dejo de ser una festividad de carácter popular que tenía como fin único el acercamiento sincero de la sociedad con sus principios (hermandad, solidaridad, amor, paz, etc.), y trasmuto a una celebración consumista, posmoderna y capitalista que solo beneficia a la clase hegemónica en menoscabo de la clase obrera.
Navidad capítulo Venezuela:

Es impactante el grado de consumismo del pueblo venezolano, la carga histórica que regía en el país antes de la llegada del Comandante Supremo “Hugo Chávez”, le dan una característica especial a la revolución Bolivariana. Es incuestionable que se tenía que pagar una deuda histórica social importante, ya que aproximadamente el 70% de la población vivía en pobreza, pero tenemos que hacernos una autocrítica. El proceso revolucionario y en especial el partido (PSUV), no ha cumplido con una tarea fundamental e histórica que es emprender la revolución cultural.

Siempre oímos hablar de este tema pero ¿Qué es en realidad?. Es simple, es crear las condiciones objetivas y subjetivas para que el pueblo se valla emancipando de las cadenas del capitalismo, y para eso, tenemos que colocar los medios de comunicación al servicio de la labor referida, trasformar el sistema educativo en todo los niveles, el partido debe estar en todos los espacios y lugares del país elaborando ejecutando tareas en pro de consolidar la sociedad socialista. No es una tarea sencilla pero quién dijo que ¡hacer revolución es elemental!.

Muchos camaradas difieren del papel de partido como eje central de la revolución, porque consideran al partido como una vanguardia supra terrenal que no puede estar por encima de la clase trabajadora, y vociferan que la misma clase obrera se emancipa con la lucha. Esta tesis hasta ahora, en Venezuela ha fracasado. Hoy día, después de tantas luchas ganadas observamos como nuestro pueblo es más derrochador, y le dan a la navidad un carácter consumista, posmoderno y capitalista.

En lo personal creemos firmemente la teoría de Lenin con respecto al papel del partido como eje central para consolidar la revolución, al respecto el camarada exponía lo siguiente:

No sólo los revolucionarios en general se rezagan del ascenso espontáneo de las masas obreras, sino que incluso los obreros revolucionarios están atrasados en relación con el auge espontáneo de las masas. Y este hecho confirma del modo más evidente, incluso desde el punto de vista "práctico", que la "pedagogía" con que nos obsequia tan a menudo, al discutirse el problema de nuestros deberes para con los obreros, es absurda y reaccionaria en el aspecto político. Este hecho testimonia que nuestra obligación primordial y más imperiosa consiste en ayudar a formar obreros revolucionarios que, desde el punto de vista de su actividad en el partido, estén al mismo nivel que los intelectuales revolucionarios (subrayamos: desde el punto de vista de su actividad en el partido, pues en otros sentidos, aunque sea necesario, está lejos de ser tan fácil y tan urgente que los obreros lleguen al mismo nivel). Por eso debemos orientar nuestra atención principal a elevar a los obreros al nivel de los revolucionarios y no a descender indefectiblemente nosotros mismos al nivel de la "masa obrera", como quieren los "economistas" (...).

Y sólo la más burda incomprensión del marxismo (o su "comprensión" en sentido "struvista") ha podido dar lugar a la opinión de que la aparición de un movimiento obrero espontáneo de masas nos exime de la obligación de fundar una organización de revolucionarios tan buena como la de los partidarios de “Tierra y Libertad” o de crear otra incomparablemente mejor. Por el contrario, ese movimiento nos impone precisamente dicha obligación, ya que la lucha espontánea del proletariado no se convertirá en su verdadera "lucha de clase" mientras no esté dirigida por una fuerte organización de revolucionarios. (…)
Lenin. “¿Qué Hacer?”, 1902.

Es fundamental el papel del partido en Venezuela. La clase obrera sigue cayendo en la trapa del capitalismo y despilfarra su ingreso en artículos banales. Tenemos que cortar de una vez por todas el cordón umbilical del capitalismo si queremos crear una sociedad socialista, ¡Patria, Socialismo o muerte …estamos venciendo!.

Colectivo comunicacional GUERRILLA GRAFIKA


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