¡Jaque mate al capitalismo!

Una guerra económica fue la primera guerra mundial. Guerra por el control de los mercados. Una guerra santa fueron las cruzadas. Una guerra política, la Revolución Rusa. Las guerras de cuarta generación, de baja intensidad, las guerras de hoy son políticas. Y las económicas económicas son entre capitalistas, por el control de mercados y políticas por poder. Cuando se invade a una nación, se invade por razones económicas pero la guerra resultante es política, de control del poder, como Vietnam, como Irak. El bloqueo a Cuba es una guerra política con armas económicas, eso es viejo. Es una forma de sitiar al enemigo.

La guerra económica de la que hablan en el gobierno es un ataque, con armas económicas, en una guerra política, y el gobierno pareciera que no lo sabe. Me gustó mucho que el vicepresidente de Bolivia dijera en su discurso que los revolucionarios no estaban para administrar al capitalismo. Y de eso se trata. Son los capitalistas los primeros que entienden eso. Para los capitalistas, un socialdemócrata honesto es un enemigo, un advenedizo hostil, a menos que él traicione, se haga un soplón, un espía, un agente de sus propios intereses.

Para nuestros capitalistas, el gobierno sigue siendo socialista mientras no claudique, no se entregue totalmente y se incline, se humille. Para los capitalistas la guerra es política. Solo para nuestro gobierno la guerra que enfrenta es económica. Busca aliados "socialistas" en el mundo capitalistas. Los chinos, que se tienen como aliados, son capitalistas, los "capitalistas honestos", otros de los aliados, son sobre todo capitalistas, los brasileros, los coreanos, los japoneses, etc., son capitalistas, y como tales no van a dejar que ningún "revolucionario" les administre sus negocios.

La guerra es política y ningún capitalista va alearse con advenedizos, o con técnicos chimbos, con petulantes, menos con exguerrilleros cuando ellos cuentan con los mejores especialistas en el campo. China libra una guerra de poder con EUA y Europa, una guerra política con armas económicas. Venezuela es solo una de sus colinas estratégicas. Los capitalistas nunca se van a dejar gobernar por nadie que no sea de su clase, es un principio político, ideológico, espiritual, cultural. El banquero Strozzi, poderoso y orgulloso solo se dejaría gobernar por Cosme de Medicis, el banquero más importante de su época. El capitalista necesita de su estatus y su estrato, de sus privilegios, y no va a renunciar nunca a ellos. Si lo hace deja de ser capitalista, explotador, ostentador, mediocre y parásito, y por supuesto, emprendedor.

Compañeros, la historia no nos perdonará nuestras debilidades e inconsistencias. Y la historia se cuenta en poco tiempo. Camaradas del gobierno, están sobre el tablero, lo que hagan ahora sin pensar lo van a pagar luego con humillación. El enemigo no va a regalar ni un peón. El tiempo cuenta y hay que tomar decisiones vistas a la estrategia final, y ésta es derrotar al rey enemigo, al capitalismo.

Así hay que ver la guerra, como una lucha política por el poder. Las ambiciones egoístas y mezquinas, familiares, grupales no cuentan ahora. Ustedes se comprometieron con el socialismo y la revolución, y así los distinguen los enemigos. Somos los blancos y ellos los negros, no hay grises. Claudicar con los técnicos, con los economistas, con los especialistas, con Abbad es nuestro fin, es la muerte de la revolución, inclusive, de sus propias aspiraciones personales.

¡Jaque mate al capitalismo.!

hecto.baiz@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1645 veces.



Héctor Baíz

http://hectorbaiz.blogspot.com/

 hecto.baiz@gmail.com

Visite el perfil de Héctor Baiz para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Héctor Baiz

Héctor Baiz

Más artículos de este autor