Sentir Bolivariano

¡Reformismo o revolución! (I)

En estos tiempos de imprescindible compromiso, lealtad, y claramente de definiciones, he querido retomar este tema, ya abordado en otros contextos, porque considero que el reto que el mismo encierra continúa peligrosamente vigente. Construir con bases firmes y definitivamente nuestro socialismo pasa por derrotar, también definitivamente, esta peligrosa desviación ideológica.

Hoy, como antes, tenemos que tener muy claro que el reformismo es un fuerte enemigo del proceso revolucionario, y por ello la lucha contra ese flagelo tiene que ser frontal y decidida. Ya en 1913, en plena batalla revolucionaria, advertía Lenin: "La burguesía liberal, concediendo con una mano reformas, siempre las anula con la otra mano, las reduce a la nada, las utiliza para subyugar a los obreros, para desunirlos por grupos, para eternizar la esclavitud asalariada de los trabajadores. Por eso, el reformismo, incluso cuando es totalmente sincero, se transforma de hecho en un instrumento de la burguesía para corromper a los obreros y reducirlos a la impotencia".

En nuestras filas revolucionarias no estamos a salvo de ese flagelo; en esta etapa de transición hacia el socialismo el reformismo está presente, sin dudas, y causando confusiones considerables. Allí se cobijan los oportunistas, los arribistas, los resentidos, los corruptos, los traidores. Allí se agrupan los que no trabajan verdaderamente por el pueblo, los que no aman verdaderamente al pueblo; esos que se visten de revolucionarios solo para satisfacer sus propios intereses individuales, esos que se disputan un cargo no para servir al pueblo, sino para aprovecharse del pueblo. Es nuestro deber derrotarlo definitivamente, antes de que termine siendo un fuerte obstáculo en el camino hacia la consolidación del Socialismo Bolivariano.

Para ello, es importante estudiar y debatir en todos nuestros espacios, sin tapujos, sobre lo que significa el reformismo, para así poder acumular las armas teórico-prácticas necesarias y combatirlo a fondo, hasta enterrarlo para siempre. Es un componente esencial en la batalla de las ideas de estos tiempos.

El diputado del Bloque de la Patria Eustoquio Contreras, en su libro "Principios y Valores del Proceso Revolucionario" explica muy bien el concepto de reformismo: "es una corriente política partidaria de los cambios graduales y no cree en los cambios revolucionarios. Ideológicamente los reformistas son personas comprometidas con determinados intereses, a los cuales defiende de la posibilidad de ser afectados por cualquier cambio radical. Los reformistas se esfuerzan por contener las luchas revolucionarias aplicando una artificial política de conciliación entre clases con intereses contrapuestos. El reformista colabora con la burguesía en la realización de reformas parciales, que no afectan sus intereses de clase y de paso, entretiene a las clases explotadas con el espejismo de las reformas…".

Debemos continuar detectando a estos "actores" dentro de las filas de la Revolución Bolivariana, a los que yo llamaría "gatopardianos", porque proponen supuestos cambios, pero para que nada cambie; aparentan compromiso, pero no compromiso con la verdadera acción revolucionaria. Los reformistas suelen ser "expertos" en infiltrarse en nuestras filas y aparentan ser más revolucionarios que nadie, se podría decir, incluso, que hasta suelen presentarse casi como más chavistas que Chávez… Ojo pelao camaradas!!!

Desde los inicios de nuestro proceso revolucionario, hemos sido víctimas de este flagelo. Recordemos que durante los primeros años, la derecha oligárquica y proimperialista logró colearse en nuestras filas; ejemplo de ello, Luis Miquilena, quien constituyó un bloque "pequeño burgués" que no aguantó la careta por mucho tiempo; luego vinieron los intentos, que superó el Comandante Eterno, al enfrentarse a embajadores norteamericanos, a representantes de FEDECAMARAS, que pensaron que podrían comprarlo y desviar el camino de la Revolución. Otros han ido apareciendo en el camino, unos abiertamente, algunos más solapados, han ido mostrando su compromiso con la oligarquía. A varios de ellos no les ha quedado más remedio que retirarse de las filas de la Revolución, de las filas de los que verdaderamente estamos comprometidos con el legado de Chávez, con la construcción de la Patria Nueva. Otros continúan infiltrados, actuando como quinta columnas.

Y aquí quiero nuevamente alertar de lo imperioso de estar preparados para no dejarse engañar, porque una de las principales características del reformista es su habilidad en el verbo o retórica revolucionaria, lo que le permite, cual camaleón, camuflajearse entre nosotros, a la vez que de manera simultánea, sirve y defiende al sistema capitalista. El reformismo aparece con fuerza cuando las posibilidades revolucionarias son evidentes; se infiltra en el proceso de transformación con el objetivo principal de desviarlo, debilitarlo, tratando de impedir que la nueva sociedad surja y que por tanto lo viejo, el sistema capitalista burgués, termine de morir.

Por lo importante del tema, consideré necesario no tratar de agotarlo en un solo artículo. Es un tema para profundizar, para debatir, para fortalecer nuestra trinchera de ideas. En un próximo trabajo le daremos continuidad y, para ello, bienvenidos sean los aportes, los comentarios de quienes nos leen.

Para concluir el texto de este domingo, y con la certeza de que en las circunstancias actuales los reformistas que actúan dentro de las filas de la Revolución en realidad terminan haciendo un inmenso favor a los enemigos abiertos y declarados, a la oposición apátrida y fascista que intenta destruirnos y acabar con las conquistas de nuestro pueblo; me aferro con más fuerza que nunca al vigente y vital legado de Chávez y les dejo estas contundentes certezas del líder histórico de nuestra Revolución:

  • "No hay más camino para la grandeza patria que el socialismo; nuestro Socialismo Bolivariano. El de la democracia socialista: participativa, protagónica, solidaria…
  • Cuando recrudece la batalla política que se desató en nuestra Patria hace 200 años: unos, los más, queremos la Independencia Nacional; otros, los menos, quieren convertir de nuevo a Venezuela en una colonia, en un país subimperial, en una subrepública.
  • El otro camino, por el que nos quiere llevar la derecha fascista, los colonialistas pitiyanquis, condenaría a nuestro país a la minusvalía, a la pequeñez y a la tumba histórica; es el camino del capitalismo neoliberal.
  • Nosotros, los patriotas, andamos con un juramento; aquel que hizo nuestro Padre Libertador en el Monte Sacro el 15 de agosto de 1805. Nosotros, los independentistas, tenemos un proyecto, portamos una bandera.
  • Ellos, los colonialistas, no tienen juramento, no tienen proyecto, no tienen bandera. Representan lo contrario a la Patria, son la contrabandera, son lo contrabolívar. Son la negación. Son la antipatria".

Yo añadiría que con estos últimos terminan aliándose los reformistas. En Venezuela estamos transitando por un territorio nuevo: el territorio socialista. Y a pesar de los múltiples problemas, aún por resolver, a pesar de la guerra no convencional que enfrentamos, quién puede negar los grandes logros de esta Revolución, sobre todo en las variables sociales más sentidas por la población. Por eso, con la experiencia acumulada, nutriendo la teoría revolucionaria, para continuar acelerado la práctica socialista, seguiremos avanzando por el camino del Socialismo Bolivariano; nunca los reformistas lograrán que se niegue la esencia de esta Revolución.

Después de tanto ensayo fallido en la historia humana, se suele decir con insistencia que cobijar el sueño del socialismo es una apuesta a la utopía. Detrás de esa aseveración se oculta algo muy peligroso: un desánimo que acaba en un desalmado conformismo, por un lado; y por el otro un golpe demoledor al ímpetu del carácter revolucionario que nos debe animar cotidianamente. No lo permitamos. Fortalezcamos nuestra conciencia, armémonos de ideas, no cedamos al desánimo, luchemos y trabajemos sin descanso por ese mundo mejor y posible al que aspiramos.

No al reformismo!!

Los apátridas no volverán!!

El presente es de lucha, el futuro nos pertenece!!

Hasta la Victoria Siempre!!

Venceremos!!

Barinas, 21 de agosto de 2016.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 3451 veces.



Adán Chávez Frías


Visite el perfil de Adán Chávez Frías para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: