El pasado jueves 21 de septiembre de 2023 me encontraba en la emisora Salsa Caribe 102.3 FM, antigua AN Radio en la ciudad de Caracas, grabando en horas del mediodía el programa "Enfoque en los Medios" en su edición 623, conducido por el compañero Pedro Román Castro. En el referido programa transmitido por la referida emisora ese mismo día en el horario de 7 a 9 pm.

Entre los temas tratados en el referido programa tenemos el referido al plan conspirador develado recientemente, específicamente a partir del 20 de septiembre de 2023, con el despliegue de la Operación Gran Cacique Guaicaipuro, en el Centro Penitenciario de Aragua, coloquialmente conocido como cárcel de Tocorón, y una visión del contexto, de la coyuntura en el plano internacional. Fue como siempre cuando comparto con este compañero, un programa de altura.

Ese día, caía un torrencial aguacero en Caracas, que nos obligó a permanecer casi una hora más en los estudios de la emisora, pero como Dios opera de maneras misteriosas, nos topamos y empezamos a monitorear la sesión de la AN que se celebraba en esos momentos. Estoy hablando de que eran casi las 2 de la tarde, cuando termínanos la grabación del referido programa.

Además del debate interesante que se estaba escenificando respecto a un proyecto de Acuerdo en el que se condenaba la incursión por parte de la Exxon Mobil y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, usando de fachada a la República Cooperativa de Guyana, de otorgar concesiones petroleras en la fachada atlántica, mar territorial aun no delimitado entre nuestro país y Guyana. Pero más allá de la impecable y brillante intervención del diputado del Distrito Capital y presidente del parlamento, Dr. Jorge Rodríguez, lo más impactante fue la propuesta que lanzó, y que casi 4 días después de formulada, todavía, tanto los revolucionarios y revolucionarias como los que adversan a la Revolución Bolivariana, no han comprendido la jugada estratégica lanzada, más allá de que el tema del Esequibo es un tema que nos convoca a la unidad nacional.

Pero, ante este hecho público, notorio y comunicacional poco analizado, vamos hoy a realizar algunos aportes, y a clarificar en la medida de lo posible, por donde "podrían ir los tiros", como se dice coloquialmente.

En primer lugar, y por eso el presidente del parlamento instruyó a la Secretaría de la AN a que se hiciera lectura del artículo 71 de nuestro texto constitucional, el cual consagra la figura del referendo consultivo, las materias de especial trascendencia nacional podrán ser sometidas a referendo consultivo por iniciativa del Presidente o Presidenta de la República en Consejo de Ministros; por acuerdo de la Asamblea Nacional, aprobado por el voto de la mayoría de sus integrantes; o a solicitud de un número no menor del diez por ciento de los electores y electoras inscritos en el Registro Civil y Electoral.

De igual manera señala el precitado artículo, que también podrán ser objeto de la activación de esta figura del referendo consultivo, las materias de especial trascendencia parroquial, municipal y estadal. La iniciativa le corresponderá a la Junta Parroquial, al Concejo Municipal o al Consejo Legislativo, por acuerdo de las dos terceras partes de sus integrantes; al Alcalde o Alcaldesa, o al Gobernador o Gobernadora de estado, o a un número no menor del diez (10) por ciento del total de inscritos o inscritas en la circunscripción correspondiente, que lo soliciten.

En otras oportunidades, en artículos escritos por este servidor hace varios años, varias veces me referí a los cuatro tipos de referendo que prevé nuestra Carta Magna: El consultivo en el 71, el referendo revocatorio en el artículo 72, el referendo aprobatorio en el artículo 73 y el referendo abrogatorio en el artículo 74.

Salvo la doctora María Alejandra Díaz Marín, que grabó videos donde rechaza la activación de esta figura, con respeto y en aras de elevar el debate sobre este tema, le respondo y hago acotaciones no solo en materia constitucional sino políticas, que sustentan la propuesta de este referendo consultivo por parte de la Asamblea Nacional.

En primer lugar, porque como señalé de la transcripción del artículo 71 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, las materias de especial trascendencia nacional podrán ser sometidas a referendo consultivo, y no solo esta iniciativa puede partir del propio Presidente de la República en su condición de Jefe de Estado y Jefe de Gobierno en Consejo de Ministros, sino que el propio parlamento puede proponer un referendo consultivo mediante acuerdo adoptado por la mayoría de sus integrantes, como es el caso que hoy nos ocupa. También lo puede activar el Poder Popular con la recolección de firmas o manifestaciones de voluntad. Si el Registro Electoral Permanente se ubica en casi 20 millones 400 mil electores y electoras, pues con la recolección de 2 millones 400 mil firmas se podría convocar un referendo consultivo.

En segundo lugar, se ha tratado de señalar que el artículo 10, 15, 322 y 326 de la Carta Magna prohibirían la activación del referendo consultivo o que el 73 y 74 también, y en ese sentido hay que hacer algunas aclaratorias al respecto ante lo que pudieran ser evidentes intentos de manipulación sobre estos temas.

Ni los artículos 10,15,322 y 326 de la Carta Magna prohíben la activación de la consulta por referendo sobre esta materia, más allá de las interpretaciones que cada quien quiera darle. Lo bueno del referendo consultivo es que genera un debate, y gente que puede estar a favor y en contra.

Ahora con respecto a la confusión de normas que se trata al mezclar el artículo 73 referido a los referendos aprobatorios y el 74 referido a los referendos abrogatorios, hay que hacer las siguientes puntualizaciones.

En el caso del referendo aprobatorio, los tratados, convenios o acuerdos internacionales que pudieren comprometer la soberanía nacional o transferir competencias a órganos supranacionales, pueden ser sometidos a referendo aprobatorio, sólo que en este caso, la iniciativa de la Asamblea Nacional debe ser de los 2/3 de sus integrantes, además de la iniciativa que podría tener el Presidente de la República en su condición de Jefe de Estado y de Gobierno en Consejo de Ministros y Ministras, y en el caso del Poder Popular, debe ser solicitado por el quince (15) por ciento del Registro Civil y Electoral, y no es el caso que hoy nos ocupa.

Como tampoco, y esto en el caso del referendo aborgatorio, no se está sometiendo a consideración del referendo ni leyes de presupuesto, ni las que establecen o modifiquen impuestos, las de crédito público ni las de amnistía, así como tampoco aquellas que protegen, garanticen o desarrollen derechos humanos o aquellas que aprueben tratados internacionales.

Los supuestos de hecho previstos en las normas constitucionales precitadas no se enmarcan dentro de la iniciativa que el pasado 21 de septiembre ha activado la Asamblea Nacional, por lo que el referendo consultivo es perfectamente constitucional su activación como lo ha hecho la Asamblea Nacional.

Ahora bien, en la próxima edición de esta columna, trataré de señalar de acuerdo a mis evaluaciones, elaborar algunas hipótesis sobre la eventual celebración de este referendo consultivo, basados en referentes históricos y algunos datos de consideración.

Esto más que por lo denso, por lo extenso del tema, y la idea es ser pedagógicos con respecto a este transcendental tema, el cual todavía la población no ha asimilado su importancia.

Y por eso, en esta entrega, luego de haber hecho las consideraciones constitucionales en una primera etapa, quiero formular una evaluación política acerca de la propuesta de referendo consultivo, el cual hasta ahora no he visto a nadie hacerla en profundidad.

La primera, evidentemente el tema aglutina, convoca y genera un debate importante en el país. De hecho la figura del referendo consultivo sobre el tema del Esequibo se constituye en un disparador o detonante de la movilización nacional en un contexto de Medidas Coercitivas Unilaterales (MCU) y en el marco de unas elecciones presidenciales, sin descartar la posibilidad de que las mismas devengan en unas elecciones generales, donde entren en juego la Asamblea Nacional, gobernaciones, alcaldías, parlamentos estadales y municipales. Esto es algo que ni el más avezado de los analistas vio venir.

En segundo lugar, es la tercera vez que me recuerde desde el año 1999, que la figura del referendo en cualquiera de sus formas, el referendo es activado bajo una iniciativa distinta a la del Presidente de la República. Desde el año 1999 hasta la fecha, siempre había sido el Presidente Chávez el que activaba los referendos. La segunda oportunidad fue el 2 de junio de 2004, cuando las oposiciones en aquella oportunidad, activaron el referendo revocatorio contra Chávez, aun cuando justo es reconocer que lo hicieron mediante fraude constitucional al poner a fallecidos a firmar, más las famosas "firmas planas". Legalmente se pudo haber impugnado ese proceso, más Chávez teniendo esa visión política y estratégica decidió someterse a referendo y probar dicha figura, lo cual hicimos el 15 de agosto de 2004, y lo demás es historia, como ustedes saben.

De alguna manera, esa historia se repite con esta iniciativa, ahora activada no por el Presidente de la República sino por el parlamento nacional en uso de sus atribuciones constitucionales.

Esto me hace recordar el año 2007, cuando por un margen muy estrecho, no logramos aprobar la reforma constitucional. El comandante Fidel Castro le hacía la observación a nuestro Comandante Chávez de que nuestra Constitución tiene figuras maravillosas las cuales no hemos probado. Y 16 años después, hay que reconocer que el Comandante Fidel tiene toda la razón, y aun no hemos internalizado esto.

Asimismo, la propuesta lanzada por el Presidente de la Asamblea Nacional, Dr. Jorge Rodríguez Gómez de este referendo consultivo, me hizo recordar, guardando las distancias, la misma que realizó hace seis años un 1 de mayo de 2017 en plena marcha del Día Internacional de la Clase Obrera, de los Trabajadores y Trabajadoras, Nicolás Maduro Moros, cuando convocó al Poder Constituyente Originario, y se convocó a la Asamblea Nacional Constituyente, la cual contribuyó de manera importante a rescatar la paz y estabilidad nacional. Nuevamente y en esta oportunidad ahora lo hace el parlamento como expresión de todas las corrientes de nuestra sociedad, que convoca al Poder Constituyente para que ejerza su voluntad absoluta.

Como se dice coloquialmente, el compañero Diosdado Cabello les ponía "el peine" de hablar de "elecciones en el 2023" y todo el mundo se desbocó en decir que no eran constitucionales, entre otra sarta de argumentos banales que no vale la pena reproducir en el presente escrito. No contaron con la información privilegiada y estratégica con la que contaba el Gobierno Bolivariano sobre las acciones que Exxo Mobil y sus aliados británicos harían sobre la plataforma atlántica nuestra, colocando en bandeja de plata esa jugada estratégica como la convocatoria de un referendo consultivo sobre esta materia de trascendencia nacional.

Este referendo contribuirá a la movilización política y porque no expresarlo, electoral de cara al triunfo de las elecciones del año 2024, cuya joya de la corona es la Presidencia de la República. El PSUV y sus aliados del Gran Polo Patriótico tienen la ventaja de que desde hace rato tienen una importante movilización de calle, y el referendo consultivo contribuye a escalar en la movilización y agitación. Otro punto para el Gobierno Bolivariano.

Además de ello, no olvidemos que el próximo 8 de abril de 2024, le corresponde a Venezuela presentar ante la Corte Internacional de Justicia sus "memorias", que no son más que los argumentos y pruebas que sustentan nuestro histórico reclamo sobre este territorio que sin duda es venezolano. Y así se contribuiría a despejar el horizonte político para no tener distracciones innecesarias y convocar a las mejores voluntades por encima de nuestras diferencias políticas, para así poder tener éxito en esta comparecencia.

Otro elemento dentro de este contexto es que Surinam va a estar muy pendiente de cómo se resuelva el diferendo nuestro con Guyana con respecto al Esequibo. Ya que no se puede obviar que Guyana también pretende arrebatarle una porción a Surinam de su territorio y esto es objeto de litigio por parte de esos países. De cómo la Corte Internacional de Justicia dirima el diferendo sobre el Esequibo podría constituirse en jurisprudencia para la solución de la reclamación que tiene Surinam con Guyana.

Capítulo aparte merecerá el pronunciamiento de Caricom, el cual detallaremos en próximas entregas.

Otro elemento de carácter geopolítico y estratégico de esta jugada realizada por nuestra Revolución Bolivariana tiene que ver porque en la próxima expansión de BRICS, Venezuela podría entrar al bloque. Decisiones de carácter geopolítico no permitieron su ingreso formal en esta primera instancia de expansión, aunque venimos participando en los mecanismos de este bloque emergente como "socio invitado" como lo explicó el Presidente Maduro en el balance que hizo de su gira por China. Y el primer semestre del año 2024 será estratégico para esta pretensión nuestra.

Tampoco estoy mencionando la decisión que también adoptó por unanimidad el Consejo Nacional Electoral (CNE) de prestar la asistencia técnica a sectores de las oposiciones, para definir una candidatura que enfrente al chavismo de cara a las presidenciales, y en la que hay un consenso de que el candidato del chavismo sería el actual mandatario, Nicolás Maduro. Aun la Comisión Nacional de Primarias ha dado la respuesta, por lo que la pelota está del lado de ellos.

Ya estamos terminando esta primera entrega de análisis, y lo hacemos casualmente el 25 de septiembre, cuando la traición pretendió segar la vida del Padre de la Patria Grande, de Simón Bolívar en Bogotá. No obstante, el amor y la lealtad de Manuela Saénz, le salvaron la vida, y no en balde a ganarse en buena lid el título de"Libertadora del Libertador".

Lo que los enemigos de la Patria, las oposiciones, incluso aquellos compañeros y compañeras que militaron en la izquierda y que ahora dicen que hacen oposición a Nicolás Maduro, no reconocen que a Maduro y al Alto Mando Político y Militar de la Revolución se le puede criticar muchas cosas, pero lo que no se les puede criticar es que han tenido habilidad y sapiencia para mantenerse en el poder.

Por eso es que el referendo consultivo, además de probar las figuras constitucionales, es una jugada estratégica de alto impacto que nadie vio venir

Este análisis aun no ha terminado, así que pendientes, que en próximas entregas profundizaremos sobre más elementos de esta importantísima decisión que tirios ni troyanos pudieron prever.

¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron sigue!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!