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Hace mas de veinte años tuve la suerte de leer un libro; no cualquier libro, ni de un autor cualquiera, ni sobre un tema cualquiera, sino todo lo contrario; un libro excelente, con un contenido único en el mundo, escrito apenas tres meses luego de de la muerte de Kennedy, pero que se tardó ocho meses en hallar otro valiente, esta vez el impresor, así salió al mundo esa joya del periodismo de investigación y de la verdad llamada “ESTOS MATARON A KENNEDY” ESCRITA POR EL PERIODISTA VALIENTE Y CAZADOR DE LA VERDAD ROBINSON ROJAS, hoy en día a mas de cuarenta años del asesinato de J.F.K. y de la publicación del libro aún está exilado en China, pues durante la supuesta democracia de los copeyanos chilenos y mas aún luego del sangriento asesinato y golpe de estado contra Allende y la democracia en Chile su país natal, este periodista tuvo que huir, esconderse para que no lo asesinarán ni la C.I.A. ni la D.INA. chilena; no por cobarde, por si acaso, sino por que este investigador denunció al mundo la verdad, una verdad que le podía y aún puede costar la vida, un libro donde se desnuda la verdadera sociedad Norteamericana, donde se pone al descubierto con nombre y apellidos, con lugares y fechas, con menciones exactas de las fuentes y con argumentos irrebatibles quienes son los que gobiernan en E.U.A. , quienes ponen y quitan presidentes, Magistrados, Gobernadores, Alcaldes, Congresantes y todo cuanto hallan creado los gringos para armar su imperio, no con elucubraciones, suposiciones ni nada de tal vez, o quizás; todo lo contrario; datos precisos, cifras, números, nombres, y todo un banquete para el lector interesado en combatir al Imperio, ese imperio causante de guerras, muertes, drogadicción, alienación, transculturización, hambre, enfermedades, desastres ecológicos, sufrimientos, conspiraciones y todo cuanto se le ocurra a Satanás inventar para destruir al ser humano y con ello su dignidad y su paz.
Por otra parte yo, este humilde servidor de la revolución y de la dignidad, propondría que quien tenga acceso al Presidente Chávez, le haga la propuesta para que se traiga de visita a Robinsón Rojas a Venezuela, lo ponga hablar en cadena nacional en horario estelar, sobre sus libros, que son varios, pero principalmente sobre este, que habla de Kennedy, que de paso si el autor lo permite, también el Presidente ordene la impresión de millones y millones de ejemplares de dicho libro para ser regalado en toas las escuelas, liceos y universidades de Venezuela, en fin hacerle un homenaje en vida a este incomparable periodista chileno y universal a la vez.
Comenzando la descripción del libro, editado por ediciones “arco” de Chile, que tuve nuevamente la suerte de hallarlo, claro tenía tiempo buscándolo, lo he leído y vuelto a leer, pues soy un apasionado de la lectura; así como lo soy del pensamiento progresista y marxista y por supuesto defensor de la justicia y de la dignidad; ideas, pensamiento y acción que he ejecutado ininterrumpidamente por mas de veinte años y que me ha llevado a apoyar la revolución bolivariana., por lo tanto, no tuve otra opción y es gracias a esto, que puedo decirles con toda seguridad, que quien lo lea va a estar dándose un banquete con la información tan importante y vigente que nos tiene el licenciado Robinsón Rojas en su obra la cual es de vital importancia para todo el mundo y sobre todo para la República Bolivariana de Venezuela, en estos momentos de avance, de liberación y de luchas, pues el enemigo es el mismo: el Imperio; sólo que ahora son los hijos o nietos de aquellos que asesinaron a Kennedy, los que dirigen la nación del norte, el imperio hambreador y saqueador, guerrero y asesino, mentiroso y doble cara.
El libro “ ESTOS ASESINARON A KENNEDY”, comienza con las sabias palabras de los prologuistas PATRICIO HURTADO PEREIRA y GUSTAVO JEREZ ORTA, quienes definen y resumen con sapiencia y acierto el objeto de la obra, comenzando con una “advertencia” para que no se nos olvide, contra los medios de comunicación de masas, y es que dicen los prologuistas que los medios pasaban la imagen de un Kennedy, cabizbajo, frío, endeble; cuando la verdad que decían y dicen quienes lo vieron en vida de cerca, es que era un hombre alto, con ojos de una intensa mirada azul, imponente, con un cabello rojizo que le daba un aspecto de rebeldía y soberbia a su rostro y una mandíbula cuadrada y firme; vale decir, todo lo contrario a la verdadera imagen del Presidente Kennedy era lo que transmitían los medios en su época, por que no hacerlo ahora , digo yo. De igual forma hablan de que pasarán muchos años y nunca se sabrá quien o quienes asesinaron al único Presidente católico, defensor de los negros y de las minorías, que pretendió dar ayuda social a los ancianos y necesitados que tuvo el País del norte. El prólogo habla de la lucha titánica de Kennedy solo contra el club de los hijos de p.., de las fronteras que lo separaban de las grandes mafias del petróleo, del acero, de la energía eléctrica, de los banqueros, de los dueños de los medios de comunicación y de las bananeras entre otras mafias que gobernaban y gobiernan hoy en E. U A y en el mundo; habla de que la mano asesina de Kennedy está metida en todas las Repúblicas de América, asesinando Presidentes, imponiendo y cuidando dictadores, y de la necesidad del esclarecimiento de tan abominable hecho.
Luego viene un segundo prólogo llamado “prólogo para latinoamericanos”, escrito por el autor del libro, para afirmar que América latina es la región mas mal informada del mundo, y lo es por que así, de esa manera lo quieren, lo hacen y les conviene a los propietarios de los medios de comunicación social, que no son otros que los mismos dueños de los “otros” capitales, valga decir, bancos, empresas petroleras, de acero, carbón, automóviles de refrescos bienes de consumo masivo etc, etc. Por tal razón el autor hace énfasis en Latinoamérica, ya que la mano peluda del imperio, si bien es cierto que está metida en todo el mundo, el dice que es especial la información que trae en su obra para América Latina, y que es contra ese “club” contra el que se encontraba enfrentado valientemente Kennedy, cuando aspiraba a la reelección presidencial para un segundo período en noviembre de 1963, cuando cae asesinado en Dallas, Texas, en una ruta que no era la original, sino que fue cambiada a últimas hora, por el petrolero Texano y para entonces Vice – Presidente Lindon B. Jhonson, quien continuó con la guerra de Vietnam, la cual Kennedy no quería seguir, así como de la misma manera , Kennedy, al igualar a los Rusos en el programa espacial, estaba dispuesto a firmar la paz, para acabar con el negocio de la guerra fría, cosa que iba contra el bolsillo de los halcones dueños de las manufactureras, de la energía y de los bancos norteamericanos.
Continuará….
(*)Abogado
nelsonjlucena@hotmail.com