La lucha de los pueblos por su emancipación tiene en las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)*, un acervo de saberes que con la debida orientación contribuirá al avance de la conciencia de la dominación a la conciencia de la liberación. Esta es otra de las tareas revolucionarias.
En su origen las TIC fueron desarrolladas para uso militar y gubernamental, y son susceptibles de ser mejoradas permanentemente. Con el paso del tiempo se hicieron accesibles a un número cada vez mayor de la población civil de países desarrollados y periféricos o menos desarrollados, como el caso venezolano. El acceso masificado a la Internet y por esta vía, al uso y disfrute de programas y aplicaciones de computación que facilitan las comunicaciones y transparentan la información, impacta positivamente en el quehacer domestico, gubernamental, industrial, militar y comercial en los ámbitos comunal, local, nacional e internacional, es imposible medir este nivel de facilitación e influencia.
Es así como información, programas y aplicaciones comercializados por multinacionales y distribuidos a un elevado costo han sido modificados y mejorados por especies de “guerrillas” altamente capacitadas que entienden de manera conciente y política que estos esfuerzos de la inteligencia artificial deben estar al servicio de los pueblos del mundo y no comercializados de manera privada. El camino para poner al servicio de la humanidad este patrimonio no fue, ni es, ni será fácil.
En el fondo subyace el afán y la aspiración valida de sectores excluidos, por el acceso a esta tecnología sin tener que pagar por ella lo que de hecho le imprime un componente importante de irreverencia y subversión del modelo capitalista. La mayoría de estas tecnologías, ya en manos del pueblo, son utilizadas para efectos de comunicación y socialización de información, saberes populares y conocimientos compartidos entre redes virtuales informales donde están involucradas comunidades locales, regionales y se trascienden fronteras.
Estas redes conforman una especie de corriente “contra-conocimiento burgués”, en tanto que no es privada, ni cerrada sino que es abierta y está al servicio de la persona y la sociedad de manera horizontal. Evidenciamos un movimiento con fuerza dispuesto a confrontar el modelo que produce, comercializa y distribuye inteligencia acantonado en Silicon Valley, (localidad norteamericana icono productor de tecnología de comunicación) de manera privada e inaccesible que excluye y margina. El movimiento generador de Software (Programa) Libre es el mejor ejemplo de esta tendencia cada vez en aumento.
Otra expresión de este movimiento “contra-conocimiento burgués” es la confrontación entre “copy-rigth” y “copy-left”. Mientras el “copy-rigth constituye la regulación y registro de la propiedad intelectual privada para su posterior comercialización local, nacional e internacional; el “copy-left” emerge de manera acelerada y exponencial, teniendo como bandera la ruptura y democratización de este modelo tradicional y capitalista del mercado del conocimiento.
En el fondo, vemos el conflicto entre dos formas de gestación, construcción y desarrollo de la sociedad de la información y el conocimiento: 1.- El modelo “copy-rigth” de propiedad intelectual basado en la conocida producción y gestión selectiva, privada e individualista; y 2.- El modelo “copy-left” basado en la libertad de circulación y utilización de esta producción compuesta de saberes y técnicas de manera masiva y popular, que hace posible y contribuye a comunicaciones eficientes, populares, democráticas, y casi con nulo costo de inversión.
El surgimiento de una especie de “tecno-generación”, involucrada en su papel y rol histórico, conciente social y políticamente, conformada por millones de hombres y mujeres, especies de “guerrillas”, con conocimientos técnicos y científicos suficientes para generar y mejorar “software”, programas informáticos que permiten el manejo, adecuación y procesamiento de información y facilitan las comunicaciones de manera masiva que tiene como centro el bienestar del ser humano nos permite afirmar que el dominio casi exclusivo de estas tecnologías e innovaciones en los países del centro capitalista es cada vez menor.
Esta “tecno-guerrilla”, conciente del rol político que debe jugar en el actual momento histórico de la civilización pone al servicio de las causas sociales y populares sus habilidades y destrezas. Es decir el desarrollo de estas aplicaciones, la utilización de estas tecnologías para el bienestar colectivo de manera abierta y democrática. Estos “cuadros”, cual vanguardia cumplen una función “tecnopolítica”, que no se rige por cánones o lineamientos preestablecidos o emitidos en un centro de poder capitalista sino que los crea desde abajo o periferia ayudando a la toma de decisiones y a emprender acciones como parte de su papel histórico. Es el “cognotariado”, nuevo proletariado o “tecno-guerrilla”, dispuesta a continuar en su actitud rebelde, subversiva y de lucha por lograr la liberación de las bondades de la inteligencia artificial y ponerlas al servicio del pueblo.
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TIC. Tecnologías de la Información y la Comunicación
Cognotariado. Nuevo Proletariado, vanguardia revolucionaria en el campo de las TIC y la Inteligencia Artificial
Tecnoguerrilla. Nuevo Militante y Activista Guerrillero en el campo de las TIC y la Inteligencia Artificial