Esta época es propicia para el encuentro en familia y el compartir con amigos, se recuerda la fecha que según la tradición cristiana nació en Belén allá por Palestina Jesús de Nazaret, venido al mundo en humilde cuna, dio así la primera señal de con quien tiene opción preferencial y con quienes debemos compartir los que nos decimos sus seguidores.
A propósito de estas fechas vemos con mucha preocupación que los llamados a divulgar el verdadero sentido del aviento entre los hombres prácticamente se han quedado mudos dando paso libre a la publicidad y el consumismo, en los medios de comunicación, las instituciones públicas y privadas el mensaje de la solidaridad del desprendimiento, de la justicia y el amor que cada 25 de Diciembre debe nacer en cada uno de los creemos en Jesucristo, se ha obviado por un personaje gordo con barba que solo ofrece consumo superfluo y crea necesidades falsas, la tradición de compartir sanamente en familia y con vecinos se ha tornado en la ansiedad ante el desenfreno y la ingesta en exceso de licor. Esta fecha tan importante es usada como pretexto para vender o promocionar productos, cada año al final de estos días son más dramáticas la cifras de muertos y heridos por la imprudencia en los autos y las riñas, amén de los atracos y robos.
Los jerarcas religiosos se callan, como no lo hacen ante la cuestión política donde al parecer son guardianes de intereses no precisamente muy cristianos, en estos tiempos sería bueno aprovechar para sincerarnos con nosotros mismos, con nuestro Dios y en el caso de Jerarquía religiosa, dirigentes políticos y gobernantes con el pueblo, para hacer un propósito y darle un regalo de niño Jesús a nuestro pueblo, obrando no con la falsa moral del discurso incendiario cuando en realidad solo se busca el propio provecho.
Estamos absolutamente convencidos que el 2009 será clave para empujar hacia adelante la Venezuela que todos anhelamos y en la que todos trabajaremos para lograrlo, el próximo será un feliz año nuevo y ¡Que el Pueblo decida!
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