Corrían los primeros años de esta Revolución y recién se dejaba escuchar el espíritu de la integración energética. Rodeada de la impregnante propuesta de la “Alternativa Bolivariana para las Américas”, se trataba de unir a este difícil mundo en acuerdos energéticos sustentados en la solidaridad, complementariedad y corresponsabilidad compartida para el uso democrático y justo de los hidrocarburos. Empezaba a moverse el tablero geopolítico internacional de los productos provenientes de la cesta petrolera.
Esta nueva base se concentro en dos epicentros: el primero, la nueva complementariedad e integración de los pueblos, como nueva base social y jurídica impulsada por las nuevas naciones.
El segundo, el nuevo concepto de poder por la liquidez internacional de los hidrocarburos. Venezuela es el país que menos alianzas necesita para obtener petróleo y sin embargo es, el que mas las promueve.
Petroamérica es una nueva orientación geográfica, geopolítica, geoestratégica y de seguridad y defensa para la región y los países que la conforman. Sus resultados serán: integración, rejuvenecidas relaciones, cooperación y sencillos pasos para orientar acuerdos de defensa internacional de este rublo.
Aun cuando estos países no tengan petróleo o sus reservas sean muy débiles, juegan un papel importante en el escenarios internacional de defensa en conjunto de los precios de la cesta petrolera.
En palabras del propio Presidente Hugo Chávez, “no es justo que teniendo nosotros tanto gas, tanto petróleo, haya apagones frecuentes en Dominica, el norte de Brasil no tenga energía para sus quirófanos, Colombia no tenga infraestructura eléctrica suficiente para sus fronteras, o en el Sur y en el Oeste Haití no tenga ni siquiera para las plantas eléctricas que alimentan sus famélicos hospitales”. Mientras que llevan mas de una década los permanentes marines estadounidenses destacados sólo por la represión para contener la rabia de quienes no olvidan a Jean Beltrán Aristi.
La situación de Grenada, bombardeada y aplastado su gobierno por las mismas tropas gringas no sin antes provocar el asesinato de su Presidente Bisop. Venezuela es gentil con los países que reclaman una migaja de nuestra principal riqueza, ellos, los que fueron responsables solidarios desde la lucha por nuestra independencia y al igual que entonces, hoy, ayudan en la defensa de nuestra soberanía desde sus curules internacionales.
Estos países al igual que nosotros sufren las lamentables desigualdades sociales, culturales y económicas, obstaculizadas por los modelos petroleros neoliberales de limitar las alianzas con países de la región.
Es la cooperación sub-regional y en las nuevas bases del interregionalismo se adaptan los que tienen como rasgo peculiar contribuir dentro de los nuevos conceptos de integración energética de los países impulsantes de esta propuesta. Los convocados en Petroamérica impulsan a una débil región que solo podrá salvarse y llegar a ser estable si adopta nuevos conceptos en el área geopolítica y geoestratégica de soberanía, intercambio y negociación a partir de los nacientes acuerdos petroleros.
*M Sc. Ciencias Politicas
venezuela01@gmail.com
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