Me preocupa que no le estemos prestando la atención debida al hecho de que Ezequiel Zamora y otros miembros de la oposición estén proponiendo regresar al sistema de escrutinio manual. La disyuntiva es: escrutinio manual o electrónico. El presidente Chávez ha rechazado públicamente el regreso al sistema manual con el argumento de que quieren revivir la época cuando acta mataba voto. El diputado Luis Tascón del MVR declaró el 08 de junio en su página web que "Los sistemas automatizados garantizan [la] transparencia de cualquier proceso porque además son auditables y en la misma participará la oposición". La oposición está definiendo la agenda en lo tocante al procedimiento para realizar los escrutinios. Nuestra gente defiende el enfoque electrónico por su transparencia y confiabilidad para los actores participantes en el proceso electoral.
Las ventajas de mayor relevancia para el escrutinio electrónico son la rapidez de resultados y la dificultad para manipularlo con objetivos fraudulentos. Lo único cierto de ambos supuestos es lo de la rapidez, porque lo segundo es relativo. Ya en Corea del Sur se ha realizado fraude electoral con escrutinios computarizados. Nuestra dirigencia, incluyendo al presidente Chávez, no parece percibir que puede haber en la demanda opositora una maniobra distraccionista para que tomemos partido por los escrutinios computarizados basados en las dos “ventajas” señaladas, tomadas como absolutas; sin detenernos a verificar si realmente estamos ante un sistema verdaderamente confiable.
Me hago las siguientes preguntas ¿Cuán confiable es la empresa Smartmatic? ¿No fue un globo de ensayo el escrutinio de los reparos para diputados y presidente? ¿Han sido entregados los códigos fuente a profesionales confiables ideológicamente y desde el punto de vista técnico? ¿Ha sido probado por esos técnicos confiables el paquete de software aplicado por Smartmatic? ¿Es el mismo software el que corre Smartmatic en las demostraciones y el que usa en los escrutinios reales?¿No está detrás de Smartmatic la CIA, como lo estaba en la empresa SAIC, socia de PDVSA en INTESA? ¿No constituyen parte de la cortina de humo las dudas de la Colomina y otros “conductores” de los llamados programas de opinión de la TV opositora sobre la imparcialidad de Smartmatic?
Considero absolutamente necesario que hagamos llegar esta preocupación hasta el mismo presidente Chávez, porque podemos estar ante la posibilidad de un KO fulminante. La oposición sabe que no tiene la más mínima probabilidad de ganar el referéndum limpiamente. No es descabellado suponer que el voto a favor de Chávez pueda duplicar la votación contraria. Imagine que el software esté programado para invertir los resultados de la votación o simplemente una proporción, como hicieron en Corea. Todos nos quedaremos con la boca abierta ante el resultado y en seguida la oposición comenzará a explicar mediáticamente los motivos de su triunfo. El derecho a pataleo, la auditoría, vendrá después que nos recuperemos de la sorpresa y se haya impuesto una matriz de opinión favorable a los planes desestabilizadores e intervencionistas de la oposición y sus amos extranjeros. Por esto, en mi opinión, lo único que se puede hacer hoy es prevenir.
¡Hay que meterle el ojo a Smartmatic!