Cochabamba, marzo 13 - El presidente de Uruguay, José Mujica, abogó por la solución pacífica y justa al centenario reclamo boliviano a Chile por una salida soberana al mar Pacífico, reseña la declaración conjunta que suscribió el sábado en Cochabamba, 400 km al este de La Paz, con su homólogo de Bolivia, Evo Morales.
"Con referencia a la demanda marítima de Bolivia, el presidente Mujica reiteró la solidaridad de su Gobierno y el pueblo uruguayo para una solución pacífica y justa a esta histórica demanda de Bolivia y permita una pronta solución a este reclamo, haciendo votos para que el diálogo de la agenda de 13 puntos iniciado con el anterior Gobierno de Chile tenga avances sustantivos durante la nueva gestión de gobierno" en ese país trasandino, destaca el documento divulgado por las cancillerías de La Paz y Montevideo.
Uruguay es, en diversos foros multilaterales, desde la desaparecida Liga de las Naciones (reemplazada en 1948 por la Organización de Naciones Unidas) el más férreo defensor en Sudamérica de la causa marítima boliviana.
La declaración conjunta se enmarca en la visita de Estado que Mujica cumple a Bolivia el sábado.
Mujica volvió a ofrecer este sábado, en Cochabamba, la disposición invariable de su país para que Bolivia utilice un puerto uruguayo como salida al Océano Atlántico.
"No fue mi gobierno, ni fue el gobierno que hemos heredado, fue otro gobierno que hace tiempo otorgó a Bolivia en el Uruguay una zona franca, un galpón importante (..) el Uruguay, no mi gobierno, el Uruguay como país entero, con su derecha, su izquierda y su centro, hace tiempo resolvió y no lo va a volver a discutir, que le va a ofrecer siempre salida atlántica a Paraguay y a Bolivia porque es una manera de construir unidad regional", afirmó durante una conferencia de prensa ulterior a una entrevista con Morales en un hotel de Cochabamba, a primera hora del sábado.
Bolivia carece de acceso al mar Pacífico desde 1879, cuando, en alianza con Perú, enfrentó militarmente a Chile.
En la denominada guerra del Pacífico (1879-83), Bolivia perdió 400 km lineales de costa y 120.000 km cuadrados de territorios en la puna del Atacama, a favor de Chile.
Bolivia demanda desde 1904, cuando suscribió un Tratado de Paz y Límites, que selló su enclaustramiento geográfico, la reposición de una salida a marítima, por vía de un corredor soberano en el límite septentrional de Chile y la frontera sur de Perú.
Uruguay plantea a Bolivia exportar su carga a ultramar por la Hidrovía Paraná-Paraguay, que se conecta con el este del territorio boliviano.
Tras el fracaso de las aspiraciones bolivianas por afianzar una salida al Atlántico por territorios ejercidos por Paraguay, país también mediterráneo, con el que libró una guerra entre 1932 y 1935, La Paz ha puesto los ojos en ese océano, precisamente por la Hidrovía.
La Paz y Santiago han construido entre 2006 y 2009 una relación de confianza mutua y la piedra miliar de ésta es la amistad personal de la ex presidenta Michelle Bachelet y Morales, patente en la agenda de 13 puntos que discuten sin prisas ni pausas desde 2006.
Bolivia y Chile carecen de relaciones diplomáticas desde 1976.
La Paz y Santiago han mejorado en el último tiempo sustancialmente su relación, reducida, desde 1989, a un intercambio comercial, favorable, en una proporción de 9 a 1, a Chile y ahora signada por inéditos intercambios en el área militar, en la educación y la tecnología y también en el campo político, preñada de viajes de misiones parlamentarias de uno y otro lado.
Por primera vez en la historia bilateral, La Moneda (sede del gobierno chileno) se avino a discutir sin remilgos el reclamo marítimo boliviano en 2006, pese a fundar sus argumentos en el carácter irretroactivo del Tratado de 1904.
La hidrovía Paraguay-Paraná es un plan fluvial intergubernamental, que incluye a Paraguay, Bolivia, Uruguay, Argentina y Brasil y que tiene por objetivo contar con un canal de navegación para embarcaciones de hasta diez pies de calado durante todo tiempo a través de los ríos Paraguay y Paraná desde Puerto Cáceres (Brasil) hasta Nueva Palmira (Uruguay).
De hecho, Bolivia construye infraestructura portuaria con vocación comercial en los pasos fluviales en dirección al Atlántico en el extremo oriente de su territorio.
Hace poco menos de una década, Bolivia saca a ultramar sus exportaciones de granos por esa vía.