Caracas 19 de mayo de 2011.- Jorge Giordani, Ministro de Planificación y Finanzas de Venezuela, propone a sus homólogos latinocaribeños construir una institucionalidad financiera que no responda a las hegemonías de los “grandes” centros económicos del mundo.
Explica que las llamadas economías emergentes, como las del Continente, están llamadas a dar un paso adelante en el proceso de integración, pensando en una moneda que sustente el intercambio comercial.
Considera que el objetivo estratégico es “crear un espacio de liquidez, un mercado de capitales que sea motor del crecimiento regional”, aunado a un sistema de compensación.
El ministro enfatiza que la crisis financiera que padecen los Estados considerados desarrollados tiene una fuerte repercusión en la vida de los ciudadanos, porque disminuye las fuentes de desempleo y con ellas las perspectivas en el futuro y la esperanza de vida.
“La sociedad moderna vive una crisis estructural que afecta las bases materiales de su sustentación así como las referidas al mundo de las finanzas”, señala.
Por ello los gobiernos deben replantearse disminuir las diferencias sociales a través de la distribución de la riqueza, crear políticas inclusivas y elevar las fuentes de trabajo, sobre todo para los más jóvenes.