Bogotá, noviembre 5 - Tras dos años de seguimientos e interceptaciones a las comunicaciones de
sus colaboradores más cercanos, el jefe de las Farc Alfonso Cano cayó
desarmado al recibir tres balazos de fusil del Ejército, según detalles
del operativo militar revelados el sábado.
Funcionarios narraron cómo el jefe rebelde fue muerto de tres tiros de fúsil,
probablemente de un Galil de tropas de asalto del Ejército que llevaban
varios tipos de arma y munición.
Los balazos impactaron a Cano en el lado derecho del cuello, en la ingle y en la cadera.
Las
tropas se confundieron al ver al buscado jefe de las Farc sin su
tradicional espesa barba, pero para agentes del Cuerpo Técnico de
Investigación (CTI) de la Fiscalía General, y que fueron llevados a la
zona para identificar el cuerpo a través de las huellas dactilares, no
cabía duda: el cadáver que se encontraron el viernes por la noche en un
paraje de la localidad de Suárez, en el departamento de Cauca, a unos
350 kilómetros al suroeste de Bogotá, era el de Cano.
"Al
'ojimetro' (o a primera vista), sabíamos que era él; como (su muerte)
no fue con bomba, el cuerpo no estaba destrozado", dijo Maritza
González, directora nacional del CTI de la Fiscalía.
Desde hace
dos años, narró la funcionaria, seguían las pistas del jefe rebelde.
Con información de desmovilizados interceptaron al menos
300 líneas telefónicas que eran usadas por los colaboradores de Cano,
pero no del mismo líder rebelde que escasamente usaba celulares o
satelitales.
"Era muy complicado que lo escucháramos (por
teléfono) a él (Cano); eran líneas (telefónicas) de gente muy cercana a
él. Era gente de su seguridad más que todo", dijo González.
"Anoche,
a las ocho de la noche, salió solito" y caminó a un pequeño riuachuelo.
"El tipo parece que se desorientó y los centinelas (militares) que
estaban haciendo el cubrimiento por tierra lo observaron" y hubo un
combate entre algunos guerrilleros del cerco de seguridad de Cano y los
militares y allí cayó el jefe rebelde herido de muerte, agregó la
funcionaria.
El líder insurgente estaba desarmado, dijo González.
Fueron
cinco militares los que rodearon a Cano, explicó el comandante de la
Aviación del Ejército, general Gabriel Rey. Pero en la zona estaban al
menos 80 militares.
Junto a Cano cayeron otros tres rebeldes (dos
hombres y una mujer), detallaron Rey y la directora del CTI.
Inicialmente las autoridades habían informardo de otro guerrillero
muerto, pero los funcionarios aclararon que fueron sólo tres.
En
el área donde estaba el jefe rebelde las autoridades encontraron siete
computadoras, 39 memorias USB y 194 millones de pesos (unos 102.000
dólares), según ha dicho el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, al
resaltar que todas las operaciones en contra a Cano fueron planeadas y
ejecutadas por personal colombiano.
Las autoridades mantienen en
reserva el tipo de información contenida en esos computadores y
dispositivos de almacenamiento, que en el pasado, en el caso de otros
jefes rebeldes abatidos, han sido cruciales para conocer relaciones,
acciones y planes de las Farc.