24 de abril de 2012.- Los Círculos Bolivarianos de Venezuela, a través de los miembros de su Secretariado Ejecutivo Nacional José Pereira, José Chiriti y Rubén Mendoza, denuncian la existencia de funcionarios estadounidenses que, desde la embajada de Estados Unidos en Venezuela, vienen realizando todo un plan de conspiración para derrocar al gobierno revolucionario del comandante Hugo Chávez, para lo cual han decidido consignar ante la Fiscalía General de la República y demás organismos competentes del estado venezolano, un conjunto de evidencias recogidas a través de su plataforma de inteligencia social contra la funcionaria Sarah Simons, a quien califican de agente encubierto de la Central de Inteligencia Americana – CIA, declarándola persona no grata y exigen su expulsión de territorio venezolano, por atentar contra la paz de nuestra patria y soslayar las convenciones internacionales referidas al respeto de la soberanía.
Historia de un centro de poder y conspiración: la embajada de USA
La Embajada de Estados Unidos en Caracas está ubicada en las Colinas de Valle Arriba, zona lujosa de la ciudad. Tiene 110 mil metros cuadrados y un edificio moderno de 5 pisos y un interior de 8 mil metros cuadrados. Es un inmenso complejo con un bunker subterráneo. Todas las agencias oficiales del Gobierno estadounidense mantienen sus oficinas dentro de la Embajada, ya que desde el año 2005, el Gobierno venezolano no ha permitido a la DEA ni a la Misión Militar de EEUU ocupar espacios dentro del territorio venezolano. La Misión Militar de EEUU antes ocupaba un piso completo en la Comandancia del Ejército venezolano, dentro de la base militar Fuerte Tiuna, en Caracas. Hoy, está ubicada dentro de la sede de la Embajada. Desde allí también operan las oficinas de la USAID, la NED, la Oficina de Asuntos Públicos e Información, el programa de becarios Fulbright y el Buró de Cultura y Educación, que patrocina un programa de financiamiento e intercambio a estudiantes, periodistas, diputados, profesores y líderes políticos venezolanos. A través de este programa, titulado el “International Visitor Program”, la Embajada ha dado financiamiento a docenas de periodistas y productores de medios de comunicación privada, como Globovisión, Televen, El Universal, Tal Cual, Unión Radio, entre otros, y numerosos diputados y líderes políticos de la oposición, pero también algunos que supuestamente apoyan al Gobierno del Presidente Chávez.
Este programa, también llamado “Liderazgo Internacional” manejado por el Departamento de Estado a través de sus embajadas, fue establecido por Nelson Rockefeller en el año 1940, cuando ocupaba el cargo de Coordinador de Asuntos Comerciales y Culturales de las Repúblicas Americanas. Fue el propio Rockefeller quien inició el intercambio con personajes de América Latina, invitando a 130 periodistas latinoamericanos a Estados Unidos. Dos años después, en febrero 1942, una red de catorce emisoras de onda corta comenzaron la transmisión de la Voz de América, emisora de propaganda del Gobierno de Washington que se transmite ahora por toda América Latina y el mundo. Importante es anotar que el año 2006 el Congreso de Estados Unidos autorizó un fondo de 10 millones de dólares para intensificar las transmisiones de la Voz de América en Venezuela.
En junio de 1942, la Oficina de Información de Guerra (OWI) fue establecida para consolidar las diferentes agencias estadounidenses que manejaban información y propaganda a nivel nacional e internacional. El Presidente Truman suspendió la OWI en el año 1946 y abrió una Oficina de Información y Asuntos Culturales dentro del Departamento de Estado con una red de 76 oficinas por el mundo. La Voz de América comenzó a transmitir al mundo entero en 24 idiomas. En el año 1947, esta oficina fue denominada Oficina de Información Internacional e Intercambio Educacional. En el año 1948, el Congreso de Estados Unidos aprobó la Ley Smith-Mundt, que estableció una agencia de información con la misión de “promover un mejor entendimiento de los Estados Unidos en el exterior y para incrementar una comprensión mutua” entre estadounidenses y ciudadanos y ciudadanas de otros países. La Ley Smith-Mundt reconoció la importancia de los intercambios educacionales y culturales financiados por el Gobierno estadounidense para formar una red de intelectuales y líderes políticos y sociales, bien-informados y favorables a la agenda de Washington. Así fue creado el Programa de “Liderazgo Internacional”, mecanismo para captar los hombres y mujeres, que por cargo y dinero, se convertirían en sus agentes en los diversos países y por ende traidores a sus patrias.
En el año 1952, este programa fue consolidado como un programa de intercambio de personas dentro del Departamento de Estado, formando parte de la red de propaganda manejada por la Agencia de Información de Estados Unidos (USIA). Las embajadas de Washington en el mundo se encargan así de reclutar individuos de influencia para que participen en dicho programa. Más de 4500 personas de diferentes países y profesiones del mundo participan anualmente en el programa. Las raíces de “Liderazgo Internacional” – donde participan periodistas, diputados, líderes políticos, sociales y estudiantiles de Venezuela y muchos otros países– evidencian claramente que se trata de una estrategia de Guerra Cultural, PSYOPS y subversión.
Además de ese programa, la Embajada también está encargada de supervisar la entrega de fondos de la USAID y la NED, así como apoyar los funcionarios del IRI, el NDI y Freedom House durante sus operaciones en Venezuela. La Embajada es sin dudas un gran centro de conspiraciones, ya que sus invitados frecuentes han incluido a numerosos líderes de la oposición venezolana ya domados e incursos en el delito de conspiración, como Pedro Carmona, Carlos Ortega, Manuel Rosales, Leopoldo López, Marcel Granier, Gustavo Cisneros, Yon Goicochea, entre otros. Los embajadores que han ocupado el cargo en la Embajada desde la llegada de Chávez en 1998 han mantenido lazos abiertos con los medios de comunicación privada, los partidos políticos y dirigentes opositores, dándoles apoyo financiero y político. Tal es el caso del Golpe de Estado en Abril 2002, el que abiertamente apoyó junto al lockout patronal.
La Embajada logró abrir consulados satélites, que actúan como centros de conspiración, en cinco estados de Venezuela: Anzoátegui, Bolívar, Lara, Monagas y Nueva Esparta, llamados American Corners. El Secretario Político (POLOFF) de las embajadas de Estados Unidos en el mundo es generalmente un oficial de la CIA o de otro servicio de Inteligencia estadounidense.
Una cara de ángel al frente de la conspiración
SARAH SIMONS, agente encubierta de la CIA, labora actualmente como 2da secretaria de la embajada en Caracas y utiliza como medio de recluta para integrar equipos de inteligencia a la orden de la CIA, al programa de becas fulbright, personal que utiliza para conspirar contra el gobierno revolucionario de Hugo Chávez. Es importante tener presente que la CIA ha
estado involucrada directamente en todas las operaciones ligadas a la
conspiración en nuestro continente, como la Operación Cóndor en
Sudamérica, que derrocó a Salvador Allende de Chile, que estuvo en las
conspiraciones para asesinar al Che Guevara, para desestabilizar a
Cámpora, heredero de Perón en la Argentina, para maniatar a LEA y JLP en
México, destruir a los sandinistas de Nicaragua, etc, teniendo una
clara tarea de derrocar gobiernos autónomos y rebeldes e imponer
gobiernos sumisos .
Este programa opera en y desde la embajada del gobierno de EEUU en Venezuela,
teniendo como un connotado dirigente de oposición en cargos de
dirección a Carlos Vecchio, miembro de la organización pro yanqui y
fascista “Voluntad Popular”, entre otros.
Para colmo de males, dicho programa tiene relaciones con el programa del gobierno nacional Gran Mariscal de Ayacucho, del cual se sirven para enviar sus apátridas lacayos sociales al exterior.
El gobierno de EEUU además usa otros medios para reclutar nuevos servidores de fuentes de inteligencia, uno de ellos es la llamada "Camara Junior Internacional", que opera en varias ciudades de Venezuela, siendo sus principales miembros personas relacionadas con Venancham, las cuales además están ubicadas en cargos estratégicos en universidades y empresas relacionadas al ramo petrolero de servicio, como por ejemplo Rene Aguirre, Vicerrector Académico URBE en Maracaibo (becas del gobierno regional), quien a su vez se relaciona a la empresa GUASCOR Venezuela, y utilizan conexiones con el grupo empresarial Moshella (LUKIVEN, WOODGROUP, TUBOSERVICIOS), con quienes opera la señora Simons.