A nuestra redacción llegó la siguiente denuncia remitida por Irving Mosquera la cual explica en el texto.
20 de septiemnre de 2012.-No se trata de una exageración lo enunciado en el título, solo basta darse un paseíto a cualquier hora de la madrugada por el I.V.S.S de Parque Central para observar el curso de Supervivencia (obligado) al que son sometidos los Adultos Mayores, discapacitados y trabajadores informales que requieren de algún servicio de esta oficina. Por ello valga la invitación al Cnel. Carlos Rotondaro y demás autoridades del Seguro Social, (Aunque dudo que desconozcan la situación) para que cuando se encuentren en la calle en horas de la noche, bien sea cenando con familiares o amigos, o en una fiestecita, se acerquen a estas instalaciones para que presencien como nuestros “Reivindicados en sus Derechos” Adultos Mayores, están desde la medianoche tirados en el piso o parados haciendo colas desde la madrugada, para garantizarse la posibilidad de ser atendidos a partir de las ocho (8) de la mañana.
Pudiera “aceptarse” que en la taquilla 13 donde se atiende a los trabajadores informales y la continuidad facultativa se presentase un desbarajuste por tratarse de un decreto Presidencial imprevisto que benefició a muchos Compatriotas y recargo de trabajo a la Institución, sin embargo lo inexcusable es que un Ciudadano que trabajó la mayor parte de su vida y una vez cumplida la edad para obtener su pensión de vejez, en muchos casos superada con creces el número de 750 cotizaciones que exige el I.V.S.S., tenga que sufrir tantas humillaciones en unas instalaciones que no cuenta con las condiciones mínimas para atender a los usuarios. Es inconcebible que este procedimiento de otorgar las Pensiones de Vejez, que ha existido por tantos años, no se haya podido humanizar, racionalizar y/o minimizar para que en lugar de un castigo a los solicitantes se convirtiera en un premio, un reconocimiento a su invalorable trayectoria laboral. Considero que solo se necesita un poquito de sensibilidad y conocimiento gerencial para lograr estos cambios. A continuación menciono algunas de las atrocidades observadas:
ü No hay suficientes sillas para el gran número que se presenta diariamente a introducir los documentos para solicitar su bien ganada pensión, las pocas sillas existentes, son repartidas por unos vigilantes, mal educados, mal encarados, mal vestidos, mal hablados y seguramente mal pagados, que reparten a cuenta gotas y a quien le cae bien las sillas, en el momento que les da la gana y si alguien se atreve a reclamarles les contestan que se vaya a quejar con Chávez. Como si fuera poco las jardineras que circundan el lugar, en sus bordes, por orden seguramente de algún genio de la maldad, se les colocó un enrejado en zigzag, aparentemente para proteger unas plantas inexistentes, dichos bordes bien pudieran servir para permitir que los ancianitos (as) se sentaran ante la carencia de las benditas sillas.
ü No hay un solo baño público y si un anciano quien dura hasta seis (6) horas en una cola, se le ocurre salirse para mitigar alguna necesidad y en ese momento pasa el funcionario que entrega los números o recoge las cedulas, quienes llegan sin previo aviso y como una exhalación, puede jurar que así busque 20 testigos que avalen que está allí desde antes de las 4 am, no será tomado en cuenta y tendrá que regresar la siguiente semana cuando le corresponda el terminal de su cédula. No se les ocurre avisar unos cinco (5) minutos, antes para dar tiempo que se organicen las colas y mucho menos de colocar un par de baños portátiles.
ü Luego de recoger las cédulas, aparece nuevamente un funcionario con cara de general ascendido a generalísimo, llamando a aquellas personas que al ser chequeadas en el CNE, aparecen como votantes en otros municipios distintos al municipio libertador para indicarles que se dirijan a las oficinas del IVSS, del Estado donde votan, no les importa ruegos lloros, explicaciones, sino que su misión es cumplir la Ley del Talión, o sea donde votas, que carguen tus demandas, así demuestres que trabajaste los últimos 20 años en Caracas o que estás viviendo en Caracas, solo debes acatar la sentencia.
ü Finalmente los aprobados a partir de las 8 am, entran de diez en diez y allí es donde te encuentras con la verdadera inquisición, viene la revisión de carpetas, donde te pueden devolver porque la carpeta no es tipo oficio, el sello de la constancia de trabajo les parece que es chimbo o escaneado, de nada vale que coincida con la información que refleja la 14-02, que es la que maneja el IVSS, tienes que volver a la empresa que la emitió para que haga una nueva y moje mejor el sello, no importa si le dices que le empresa está ubicada en el Amazonas y que ya hiciste un viaje para obtener la supuesta constancia chimba. Si por mala suerte eres Apoderado de alguien que por estar fuera del País o enfermo no puede levantarse a las 2 de la mañana, para salir a la calle a arriesgar la vida, para tratar de llegar a las 4 am a hacer su colita, te piden la Fe de vida del solicitante, sin importarles tampoco que el Poder que le estas entregando sea elaborado un día antes, firmado y sellado por un Cónsul o por un Notario Público antes Testigos, simplemente estas eliminado. En fin se trata de la estupidez y la soberbia humana en su máxima expresión. Lo trágico cómico del caso es que la mayoría de estos reparos a los documentos que te piden al entrar al salón de inquisición, no aparecen en el listado de requisitos obligatorios que te entrega afuera un vigilante ni en la página web del I.V.S.S. Si reclamas te dicen que presentes tu queja a la Directora de la Oficina, resultando que si logras acceder a la secretaria de la dirección, te da una cita para dentro de dos meses, por ello es que consigues ancianitos (as) que tienen el record de haber hecho el curso de supervivencia por más de cinco (5) veces.
Compatriota Cnel. Carlos Rotondaro, solo le he esbozado los aspectos más resaltantes que atravesamos a diario los usuarios de las oficinas de Parque Central, por ello considero que la solución no está solamente en que se construyan nuevas oficinas, se trata de un problema de Liderazgo, de capacidad gerencial, si no se cuenta con Líderes que sean capaces de transmitir la Visión Misión de la Institución a sus subalternos, que entiendan lo que significa compromiso y sentido de pertenencia, solo seguirá estirando la arruga. He leído sus últimas declaraciones a los medios, donde manifiesta con orgullo los cientos de miles de beneficiados por el I.V.S.S., pero no toma en cuenta, los otros cientos de miles, burlados humillados, decepcionados, etc., que salen hablando mal del gobierno, aunque esa parece ser las constante en otras Instituciones Públicas, la verdad que con procederes de esa naturaleza, no hace falta oposición, sus trabajadores se encargan de hacer el trabajo de destrucción de la imagen del gobierno.
Como todo no puede ser críticas, particularmente me ofrezco a trabajar para el I.V.S.S., Ad Honorem, el tiempo que sea necesario para demostrarle, que con voluntad y verdadera visión socialista es posible realizar los cambios que durante tantos años nadie ha podido o querido implementar en esa Institución para beneplácito de nuestros Adultos Mayores.
Usted tiene la palabra.
irvingmosquera@hotmail.com