Caracas, mayo 12 - Una demanda de protección de los derechos constitucionales ante el Ministerio Público y un amparo constitucional en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) interpusieron este lunes los trabajadores del Metro de Caracas, frente a la violencia desatada por la extrema derecha venezolana y que han tomado como blanco de ataque las instalaciones del sistema y sus prestadores de servicios.
Ambos documentos fueron entregados tras una marcha que salió desde la plaza Morelos, ubicada en Bellas Artes, Caracas, y en la que contaron con la participación de usuarios y de habitantes de Caracas en general, quienes elevaron consignas a favor de la paz.
El presidente del Sindicato de Trabajadores del Metro de Caracas (Sitramerca), Edison Álvarez; el coordinador de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (CBST), Carlos López; el vicepresidente de la CBST, Marco Tulio Díaz, estuvieron entre quienes integraron la comisión que consignó los documentos. En el Ministerio Público fueron recibidos por Joel Espinoza, director general de Actuación Procesal.
Richard Chacón, quien presta sus servicios como operador de un Metrobús, desde hace 20 años, dijo que el objetivo de esta iniciativa es que el derecho al trabajo esté garantizado, por lo que en ambos documentos se solicitó una investigación contra el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, debido a que la violencia se ha focalizado en los municipios Baruta, Chacao y Sucre.
"Ha habido mucha indiferencia, se está haciendo de la vista gorda y no ha hecho nada para prevenir la violencia, pero sobretodo para prevenir los ataques al Metro, sus instalaciones y sus trabajadores. Necesitamos que se de un alto a la violencia fascista y que en esos territorios de estado Miranda se instale la paz", dijo.
"No queremos más violencia"
Desde el 12 de febrero se desató una ola de violencia en algunos municipios del país, especialmente en aquellos dirigidos por la oposición venezolana. Hasta el momento esas acciones ha dejado como saldo 42 personas asesinadas y más de 800 lesionadas, entre ellas varios funcionarios del Metro de Caracas.
De acuerdo con Edison Álvarez, han sido 38 trabajadores del Metro de Caracas los que han resultado afectados. A a uno intentaron quemarlo dentro de una unidad de Metrobús. Esta acción le generó quemaduras graves en gran parte de su cuerpo.
Además, 98 unidades de transporte del sistema superficial Metrobús han sido dañadas, así como 15 escaleras mecánicas del Metro de Caracas y daños a instalaciones de 10 estaciones del subterráneo, donde viajan a diario unas dos millones de personas. También unos 200 usuarios han sido agredidas, señaló Álvarez.
José Manuel Navarro, de la gerencia de protección y seguridad del Metro de Caracas, fue uno de los primeros agredidos por los grupos violentos cuando intentaba resguardar las instalaciones del subterráneo, específicamente en la estación Parque Carabobo.
Frente a esos hechos, Navarro pide a esos sectores "sumarse a la paz y a resolver las diferencia por la vía pacífica y a través del diálogo. No queremos más violencia, queremos trabajar".
En la marcha estuvo también el ministro para Transporte Terrestre y presidente del Metro de Caracas, Haiman El Troudi, quien calificó estas acciones contra el sistema como "injustificadas e irracionales".
"Esa indignación no nos paraliza y por el contrario seguimos garantizando el derecho al transporte público, inclusivo en el Metro de Caracas a todos los usuarios de manera ininterrumpida. No ha habido un sólo día en que por cuenta de estas situaciones inducidas de alteración del orden público y violencia contra los propios usuarios del Metro de Caracas nosotros hayamos interrumpido el metro de Caracas, donde no podemos trabajar tomamos las medidas de prevención del caso y suspendemos el servicio en algunas estaciones", dijo.