29-07-14.-El pasado domingo falleció la artista del grabado Gladys Meneses, oriunda de Tucupita, estado Delta Amacuro, quien contaba con 75 años de edad, 32 de los cuales los dedicó a la formación de creadores venezolanos.
Meneses, quien se dedicó al grabado y a la investigación en obras tridimensionales, tuvo su primer encuentro con la pintura desde muy temprana edad, cuando manipulaba los pigmentos utilizados por su madre, de ocupación costurera, en la decoración de vestidos, reseñó un boletín de prensa del Ministerio de la Cultura.
Entre los años 1958 y 1962 cursó estudios de arte puro en la Escuela Cristóbal Rojas y, posteriormente, comenzó a practicar el grabado con las técnicas tradicionales.
En esa fecha se iniciaron las actividades del Círculo Pez Dorado, grupo del que Meneses fue miembro fundador y mediante el cual realizó sus primeras exposiciones individuales.
Más tarde impartió clases en la Escuela de Artes Plásticas Armando Reverón de Barcelona, estado Anzoátegui.
En 1963 viajó a Italia donde se inscribió en la Academia de Bellas Arte de Roma durante un mes para estudiar grabado en metal en el taller de Attilio Giuliani, lugar donde tuvo acceso al Palacio de la Farnessina y pudo ver de cerca numerosos grabados originales de gran importancia artística e histórica.
Este mismo año, bajo los auspicios de la Embajada de Venezuela en Yugoslavia, participó en una exposición colectiva de grabadores venezolanos en Belgrado.
La artista fue reconocida con el Premio Nacional de Grabado. Además desarrolló innumerables talleres de pintura y tallado para niños y jóvenes a lo largo del territorio nacional.
Meneses contrajo matrimonio con el reconocido escultor Pedro Barreto, quien murió en 1985. Con él tuvo dos hijos: Carla Barreto y Carlo Barreto.
En los últimos meses estuvo estrechamente relacionada con el Centro Nacional de Artesanía, ya que elaboraba el vitral de las Residencias Estudiantiles, Alcaldía de Caracas en en antiguo Edificio Los Andes, en Plaza Venezuela, Caracas.
Meneses también fue militante de izquierda en la región oriental en los tiempos de la Cuarta República, lo que le trajo consecuencias de aislamiento y persecución policial.
El pasado mes de mayo se inauguró en el Instituto de las Artes de la Imagen y el Espacio (Iartes), en Caracas, una sala de exposiciones que lleva el nombre de la grabadora para rendir homenaje a su trayectoria.
