Caracas, agosto 15 - Un día como hoy, hace once años, en el año 2004, los venezolanos tuvieron por primera vez, la posibilidad de interrumpir el mandato de un gobernante: el presidente Hugo Chávez, quien finalmente, terminó ratificado su cargo, al lograr la victoria con 18 puntos de diferencia.
Este llamado a referéndum por parte de la oposición venezolana estuvo fundamentado en dos artículos de la Constitución de 1999.
El primero de ellos, es el artículo 72, el cual establece que “todos los cargos y magistraturas de elección popular son revocables. Transcurrida la mitad del período para el cual fue elegido el funcionario o funcionaria, un número no menor del veinte por ciento de los electores o electoras inscritos en la correspondiente circunscripción podrá solicitar la convocatoria de un referéndum para revocar su mandato”.
Este proceso se extendió hasta el 1 de diciembre de 2003. No obstante, el Consejo Nacional Electoral (CNE) luego de un exhaustivo proceso de verificación y autentificación de firmas, donde también participó el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), aprobó el 3 de junio de 2004 un total de 2. 451 mil rúbricas.
Posteriormente, el 3 de julio de 2004, inició la campaña electoral. En esa oportunidad, Chávez señaló: “Hoy anuncio a los venezolanos que me convierto en el comandante de la campaña de Santa Inés, a partir de hoy hasta el día del referéndum revocatorio, la campaña de Santa Inés, hacia allá vamos porque tiene para mí un gran parecido, esto de la acción retrógrada de ir canalizando a la fuerza adversaria para la batalla definitiva. La batalla será el referéndum revocatorio”, dijo Chávez aquel 3 de junio.
En esa batalla de la Guerra Federal, Ezequiel Zamora se fue replegando desde la capital de Barinas hasta llegar a Santa Inés y allí venció a las tropas de la oligarquía de entonces.
El proceso electoral estaba pautado desde las 6:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde. Sin embargo, la votación se extendió hasta las 12:00 de la medianoche por la cantidad de electores en cola que salieron a los centros de votación en horas de la tarde y noche.
Las largas colas no solo se realizaron en Venezuela, sino en algunos centros de votación en el exterior del país como los localizados en las ciudades de Miami, en Estados Unidos y Santa Cruz de Tenerife, en España, donde los venezolanos radicados en el exterior también podían votar en el referéndum.
En tal sentido, los venezolanos decidieron validar las opciones Sí (oposición) o No (oficialista) ante la pregunta: ¿Está usted de acuerdo con dejar sin efecto el mandato popular otorgado mediante elecciones democráticas legítimas al ciudadano Hugo Rafael Chávez Frías como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela para el actual periodo presidencial?
El resultado preliminar fue anunciado por Francisco Carrasquero, quien era el presidente del CNE, cerca de las 4:00 de la madrugada del 16 de agosto, después que el 94% de los votos habían sido escrutados.
Los resultados de ese momento arrojaron que la opción del Sí (a favor de la destitución de Chávez) fue de 3.576 517, lo que equivale a 42%. Mientras que el No (a favor de la permanencia de Chávez en el poder) fue de 4.991.483, es decir, un 58%.
Sin embargo, los resultados finales dados el 18 de agosto por el CNE fueron aún más favorables para la opción del “No”, escrutándose todos los votos, donde se reafirmó en dejar sin efecto el pedido del cese del gobierno de Hugo Chávez. La abstención de ese proceso fue de 30.08%, una de las más bajas registradas en Venezuela.
Los resultados fueron los siguientes:
NO: 5.800.629 VOTOS - 59,0958%
SI: 3.989.008 VOTOS - 40,6393%
“Un 15 de agosto de 2004 el pueblo venezolano, de forma mayoritaria y aplastante, dio un rotundo No para parar en seco todas las pretensiones imperialistas de dar al traste con nuestra Revolución Bolivariana (…) Y se confirmó una verdad innegable: en ningún país del mundo el ejercicio electoral, como expresión de la soberanía popular, ha sido tan continuo como en la patria de Simón Bolívar a lo largo de lo que va de siglo XXI”, escribió el Chávez en su columna semanal “Las líneas de Chávez”.
En esa oportunidad, la oposición denunció un supuesto fraude. Días siguientes al referéndum fueron presentadas en distintos medios de comunicación varias pruebas de ese supuesto fraude. Ninguna de las pruebas procedió ante las instancias nacionales.
Entretanto, organizaciones internacionales como la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea y el Centro Carter reconocieron la transparencia y la solidez del sistema electoral venezolano. Incluso la administración del presidente de los Estados Unidos, George Bush, reconoció que Chávez había ganado correctamente.