28 de abril de 2016.- Rumores de saqueo se posesionaron ayer del ánimo de los transeúntes, comerciantes y visitantes de Catia, al oeste de Caracas, con efecto negativo de cierre de establecimientos en gran parte de la calle Argentina y zonas aledañas, aunque en el resto de la vasta parroquia reinó la normalidad.

“Que hubo tres muertos”, “Que están saqueando”, “Que ya el pueblo se arrechó”, “Que los bachaqueros desmantelaron los negocios”, y tantas otras expresiones sin prueba, sin autores conocidos, pasaron de boca en boca y lograron negativo efecto multiplicador.

Diversas versiones fueron calando en la curiosidad del pueblo e hicieron mella en el lógico sentido de autoprotección, lo que causó cierres de locales en estampida y las consabidas pérdidas por la interrupción de la actividad.

Las escuelas del sector, ante la incertidumbre, llamaron a los representantes para que retiraran a los alumnos antes de la hora prevista y esto aumentó la confusión.

La situación estuvo aderezada, incluso desde días anteriores, con fábulas difundidas en páginas web y algunos medios nacionales e internacionales, que se encadenaron al mejor estilo maquiavélico del jefe de la propaganda política Nazi, Joseph Goebels, en busca de que las mentiras repetidas incesantemente se transformaran en realidad, violencia y caos.

Trataron incluso de involucrar al gobierno de Nicolás Maduro en supuestos hechos de represión.

Sobre el mediodía, Catia se volvió un hervidero, porque los rumores hablaban de saqueos buscando la imposición de la anarquía.

Bajaron las santamarías y aumentó el despliegue policial.

En pleno bulevar de Catia, entre plaza Sucre y Pérez Bonalde, hubo escaramuzas entre algunos bachaqueros y pueblo organizado.

Hablaron de disparos y dos heridos, no identificados, como producto de la supuesta acción violenta de un colectivo.

Ciudad CCS, en un amplio recorrido que incluyó 23 de Enero, La Silsa, Propatria, Las Lomas, zonas adyacentes al bulevar, AltaVista y la avenida Sucre en todo su trayecto, corroboró que todo rumor era tal.

Con esos rumores trataron de activar un detonante en la población, debido a la coyuntura del desabastecimiento y el bachaqueo, que son realidades inocultables pero no superiores al sentido común y de resguardo de la vida por parte del pueblo. Se impuso la sensatez, y el constante llamado de las autoridades a mantener la paz.

EL RECORRIDO, MÁS RUMORES

Cerca de la 1:30 de la tarde, desde el mercado hasta la plaza Catia, había poca fluidez de vehículos en la normalmente embotellada Calle Colombia. Muchos negocios cerrados. Ya no había presencia policial.

Pero en los pequeños comercios de las calles Maury y México, tanto como en el transporte público que brinda servicio en el sector, la actividad fluyó de manera ininterrumpida.

La calle Argentina mostraba intermitencia de alerta, ya que casi por mitad los negocios cerraron sus puertas. La otra mitad, abiertos y todo normal.

Más rumores: “La vaina está fea en Los Teques”; e insistían con saldos rojos de heridos y muertos. Afortunadamente, nada cierto.

Abastos, panaderías, licorerías y mueblerías, expuestos a un público pacífico que recorría el sector bajo el sofocante Sol.

Llamó la atención el cierre total del centro comercial Lago, pero nadie dijo el porqué. Precaución, seguramente.

Desde esa transversal de la calle real de Los Flores y la calle Argentina hacia La Silsa, ante la silente mirada del transeúnte, un montón de bachaqueros estaban agolpados a las puertas de distribuidoras de víveres y otros productos, para apertrecharse y luego estafar al pueblo de a pie con sobreprecios que avivan la guerra económica.

En la entrada de Los Magallanes, un claro indicio de que la tensión había bajado pese a las altas temperaturas: “Señor deme tres más; bien frías”; dijo el buhonero que tiene los melones a 2kg por 300 Bs.

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Medios digitales auspician desestabilización

Medios de comunicación digitales hicieron eco de la ola de rumores sobre saqueos en distintas ciudades del país. Entre los medios que se unieron a comunicar esta falsa información están El Nacional, Caraota Digital, El Pitazo, La Patilla, Venevisión, Crónica Uno y webs regionales. Los mismos reportaron que los estados Carabobo, Aragua, Lara y Miranda fueron asediados por vándalos que irrumpieron en establecimientos. Asimismo, aseguraron la existencia de supuestos hechos de violencia. Estas informaciones son basadas en comentarios, fotos y videos publicados en Twitter, en los que destacan periodistas como Nitu Pérez Osuna, quien desde el pasado 26 de abril denuncia supuestos hechos violentos en Vargas por “falta de comida”.

A esta campaña se le sumó El Clarín de Argentina al publicar que el presidente Nicolás Maduro mandó a reprimir las manifestaciones del pueblo.