Hay motivos para mandar a Maduro al carajo (Breve respuesta a Raúl Bracho)

¡Claro que existen motivos para enviar a Maduro a donde sea! Y el mayor es establecer ciertos acuerdos con la oposición a espaldas del pueblo cuando TODOS en Venezuela sabemos a qué juega, cuales son us intenciones y de qué manera apoyan las guarimbas aquellos que se cubren con la manta de la democracia. ¿Cual es ese acuerdo? Entre otros podemos agregar el del aumento de algunos alimentos básicos o al menos de frecuente consumo para el venezolano sin siquiera aparecer en gaceta oficial; acuerdo éste básico con la burguesia nacional para que a su vez ésta no comprometa la salud económica del país con su guarimbera guerra económica, y fraguado luego de la reunión con empresarios y demás políticos de oposición que asistieron a Miraflores en el mes de Marzo. A esto el gobierno revolucionario ni el PSUV dice ni mucho menos cuestiona nada, lo cual llama poderosamente la atención puesto que los mismos gastan un buen espacio en radio, prensa y televisión en adjudicarse el legado de Chávez y por ende, la construcción del socialismo. La excusa, la misma de todo liberal. Acordar con las burguesias nacionales para subsistir y construir una alternativa a partir de...

La impotencia de quién escribe, obrero como muchos en el país, estriba en que podemos perder una nueva oportunidad valiosa en ofrecer una alternativa al capital con lo cual puedan identificarse todas y todos los explotados de latinoamérica, dejando atrás la parásita renta petrolera y mas que vivir de ella, desangrarla. Por último, señor Bracho. Pruebas de corrupción hay muchas, la mayoría ni siquiera aguantan una revisión mínima. En lo cual escuda la cruda crítica no es más que un artilugio leguleyo que protege a toda persona con influencia política en ciertos tribunales del país. Con el debido respeto a los jueces. ¿Pruebas contundentes? Mire a su alrededor y verá bienes materiales suntuosos en manos de personas que ostentan o han ostentado cargos relevantes en el gobierno nacional, estadal o municipal, justificados de forma insólita. En ciertos casos tan evidentes que vale más callar.

Para construir el socialismo se necesita acabar con la vieja cultura de corrupción, pero sobre todo, dar muestras ejemplarizantes de que el legado de Chávez apuesta por valores ético-morales que hagan cotidiano lo extraordinario. Que así sea.

polakalendar1@gmail.com



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