En cualquier burdel serio que se respete, las muchachas que ahí laboran siempre han tenido una causa o justificación noble para excusar la venta explícita de sexo, es decir, la venta de sus ser desde su cuerpo, aunque el sexo y la sensualidad son divinos por excelencia. El punto es que siempre habrá excusas para justificar lo que es reprochable por el mismo hecho de que se está vendiendo la dignidad humana y se están haciendo daño a sí mismas, más allá de la simple moralina que las estigmatiza y actúa hipócritamente, con represión de todo tipo.
Otro tanto, estamos presenciando en otras esferas de lo social en Venezuela, a propósito de la firme intención que tienen algunos sectores: los unos, de quebrar la economía nacional como puntal para quebrar las bases institucionales y derrocar o salir legítimamente del obrero presidente, Nicolás Maduro ; los otros, porque son por naturaleza ladrones, usureros y especuladores, es decir, son los parasitarios burgueses de siempre y; los más, porque esta ha representado una fabulosa oportunidad de matar dos pájaros de un solo tiro, como lo es salir del chavismo y su socialismo del siglo XXI, además de sacar jugosas ganancias económicas por la vía práctica de la restauración de la voracidad neoliberal y su libre mercado, irónicamente, con el apoyo irrestricto de esa clase que busca parecerse a la burguesía, la llamada clase media que conforman profesionales asalariados y una fracción del pueblo, envilecida en su pobreza.
Ahora, resulta que hemos llegado al punto de justificar a los bachaqueros y a su forma de rumiar en la economía, comprando en cuanto comercio hay, al detal, para revender al pueblo, es decir, a los iguales, a la masa trabajadora a la que le desangran con la burda excusa de que el pobre bachaquero es alguien que se rebusca como puede porque a él tampoco le alcanza para mantener a su familia, así como la vieja conseja de que me prostituyo porque tengo una madre ancianita, un hijo y unos hermanos, cual Dostoievski.
Esta especulación y usura se vienen dando en una cadena depredadora, que genera súbitas ganancias a una minoría, pero también, dispara una espiral hiperinflacionaria, que no se resuelve con medidas puntuales, ni con funcionarios cazausureros solamente, sino en la convergencia efectiva de nosotros, los ciudadanos que conformamos al Pueblo sencillo y llano, con un gobierno determinado en no hacer ninguna concesión a esa parasitaria burguesía, ni a sus serviles bachaqueros y mediaclase, que a cambio de un mendrugo, hacen daño al Pueblo y se han prestado para hacer cualquier corruptela, cuando ponen su conocimiento al servicio de la trampa y los guisos, tal y como hacen muchos profesionales que maquillan estados de cuenta, balances y tasas de cambio, para defraudar al SENIAT, a la SUNDDE y a todas las instituciones del Estado.
Resulta además, que ahora hay quien afirma con la certeza científica de que “dios existe”, que el “Dólar Today” es imposible de liquidar y abatir, porque según su sabio entender “eso forma parte de las leyes naturales del mercado, por las cuales el capitalismo es inherente a la condición humana, razón por la cual, el socialismo es solo una fantasía de Chávez y de los pendejos que creemos en un mundo justo y en el bien común”.
También, resulta que esa plataforma alocada, arbitraria, ilegal y usurera de cambio inventada por unos parásitos que gozan de impunidad “por ahora”, se ha convertido en un boomerang, porque se revertió en contra de todos los venezolanos, no sólo contra los chavistas, porque las consecuencias de la hiperinflación planificada por una minoría delincuencia ha llegado a un límite en que los usureros de comercios y servicios, los dueños de empresas y fábricas, ya no tienen margen para su especulación y usura, porque ellos liquidaron el sueldo y el salario del trabajador imposibilitando su capacidad de compra y al no haber mercado, ni consumidor, ni usuario, hay quiebra y se proliferan otros delitos de los que ese sector parasitario es el blanco y víctima, que ya empieza a pagar las consecuencias, no sólo económicas, sino también, sociales, mientras no se liquide a ese dólar galáctico que ellos inventaron y se reordene nuevamente la tasa de cambio controlada por el Estado, es decir, por el gobierno que preside el obrero a los que ellos, los nucleadas en Fedecámaras-Venamcham, odian.
Tenemos ahora, una oportunidad que no podemos desaprovechar, cometiendo nuevos errores, más que con la corrupción, con la ineptitud que puede terminar siendo colaboracionista, sin saberlo o de manera deliberada. Se trata entonces, de acelerar el protagonismo de las comunas, para ya mismo, confiar, ya no en palabras, sino con hechos, en los trabajadores, confiscar y expropiar toda empresa de parasitarios y promotores de esta guerra económica, entregarlas a los consejos de trabajadores para su administración, desarrollo y producción. Activar y fortalecer las empresas de producción social (EPS), las empresas de producción familiar (EPF), adecuar inmediatamente, sin tácticas dilatorias y sin concesiones a todas las universidades con el Plan de la Patria, ya que son muchos los que supuestamente están del lado revolucionario, pero no quieren ni hablar de esto. Por ahora, importemos absolutamente todo lo que estos parásitos llamados empresarios nos han desabastecido, acaparado y aumentado vorazmente. Incluso, pasemos a la ofensiva comercial, atosigando el mercado nacional y haciéndolos quebrar, porque la guerra es guerreando.
N.B: expreso mi preocupación, igual que la de todos los merideños y personas de buena voluntad, por la desaparición del camarada chavista ALCEDO MORA. Tiene que aparecer.