Me horrorizo ante la inaudita crueldad humana, las decapitaciones en vivo por ejemplo, todos nos estremecemos de horror ante ellas, pero, ¿qué pasa con Guantanamo? ya perdí la cuenta de los años que esos seres tienen allí sometidos a toda clase de vejaciones y malos tratos, eso nos deja imperterritos, ya ni son noticia desde hace mucho tiempo. Tampoco parece que a nadie preocupa el destrozo humano y estructural de Gaza, sus ejecutantes están felices y nadie les aplica sanciones, no los mencionan como criminales y mucho menos los tocan ni con el pétalo de una rosa, es más la hipocresía llega al punto de justificarlos.
La destrucción del habitat humano es un hecho que creo, en mi humilde ignorancia, es ya irrevercible, eso no le preocupa a nadie, nuestra especie desaparecerá (gracias a Dios) y desgraciadamente también desaparecerán casi todos los animales no humanos que no tienen ninguna culpa de nuestros desmanes, eso tampoco preocupa a los poderosos, ellos seguramente ya tienen preparado como irse a deshumanizar otro planeta, me alegra pensar que no podrán y desaparecerán en el espacio, al menos eso es lo que yo espero que haga Dios con ellos.
Decapitar a una persona que yo creo es inocente porque su profesión es la de periodista, es brutal, pero matar a centenares de niños (esos si totalmente inocentes fuera de toda duda), dejarlos huerfanos o incapacitados es tan terriblemente brutal que sólo el hombre en su miseria puede hacerlo y nosotros, los demás no condenarlo y sancionarlo con la pena máxima.
Rodilla en tierra y esperando la justicia divina porque la humana no se dará nunca, no existe
