¿Libertad de culto o libertad para abusar?

Hago la pregunta e invito a la reflexión del lector. En nuestra constitución en el artículo 59 capítulo 3 de los derechos civiles se expresa de manera clara y explícita el derecho y la libertad que tienen los ciudadanos a ejercer o practicar cualquier religión o culto, lo que no aparece en ninguna parte en nuestra carta magna es el abuso que algunos líderes religiosos han tomado como bandera al momento de sus reuniones y prácticas, situación grave a lo largo y ancho de nuestra Venezuela, unos de los pocos países en donde las religiones conviven en santa y sana paz y precisamente por eso me he motivado a escribir el siguiente artículo:

Pidiéndoles a las autoridades y al pueblo de Venezuela que no permita que esta situación se nos escape de las manos, ya que, la misma también contribuiría a agrandar la situación que ya vivimos en lo económico y en materia de seguridad.

¿Cómo contrarrestar estos abusos desde mi humilde opinión?

  1. Que las autoridades de manera responsable se aboquen a darle atención y solución a casos y denuncias por perturbación, contaminación sónica, contaminación ambiental, perturbación por alterar la paz y tranquilidad de familias y comunidades, acoso religioso, etc.
  2. Promoviendo nuevos proyectos de ley donde estos grupos religiosos se vean en la obligación a acondicionar sus templos, casas y locales donde practiquen sus cultos, de no contar con los fondos necesarios para acondicionar los mismos que se les permita sus reuniones pero sin ningún tipo de perturbación ni violación de las leyes y que en caso de irrespetar estas leyes, sean verdaderamente sancionados.
  3. Y lo más importante: hacer campañas de concientización a todo grupo o persona religiosa que se sepa esté alterando la paz y tranquilidad de sus vecinos.

Es bueno recordar que nuestra condición humana nos conduce al camino de la religión en busca de la verdad, lo que no podemos permitir es olvidar que en nombre de la religión se han cometido y se siguen cometiendo abusos y crímenes, involucrando a Dios en asuntos que sólo pertenecen al egoísmo y egocentrismo del hombre.

"Cuando el ser humano abandona la conciencia y en su lugar adopta al egocentrismo a partir de ese momento deja de ser humano y se convierte en algo tóxico".

ernestoliendo72@gmail.com



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