18 de sept. 2009. - El Presidente de la Federación Campesina de Venezuela, Miguel Ulises Moreno León, informó que este gremio se declara en estado de Emergencia y Vigila Nacional ante el reciente atentado perpetrado contra el dirigente cojedeño, José Pimentel, y anunció que se manifiestan respetuosa pero duramente ante el Ministerio Público para que acelere las investigaciones contra los sectores involucrados en las muertes de dirigentes y campesinos agremiados.
"Tenemos 219 muertos, más de 300 heridos, apaleados y golpeados, que hacen un universo de más de 500 víctimas. Reclamamos de la manera más cortés pero más dura, al Ministerio Público: no es posible que se investiguen solamente 34 casos y tenga en mora más de 400", resumió Moreno León.
Dijo que la Federación Campesina de Venezuela está con el Gobierno Bolivariano en el desarrollo de su política de tierras, por lo cual agradece al Ejecutivo su empeño por erradicar el latifundio. "Nosotros acompañamos al Comandante Presidente en su política contra el latifundio... Lamentablemente, hay sectores que no les gusta. Y no hemos querido ir a un enfrentamiento abierto o una guerra en la zona rural".
Reafirmó que los sectores opuestos a las políticas socialistas no pueden solucionar a balazos sus diferencias. "Hemos manifestado que si tenemos que salir a defendernos desde los 4 puntos cardinales, del país lo haríamos", advirtió.
"Hemos dicho y que quede claro a todos: a diferencia de otros países, el campesino venezolano no se desplaza. Nosotros creemos firmemente en la institucionalidad, creemos en nuestro gobierno. Sabemos que no hay equivocación con dar la lucha contra el latifundio".
"Pero ya estamos cansados de poner los muertos. Ya está bien que aquí se atente contra nuestras vidas...", dijo, recordando que se ha atentado contra dirigentes nacionales como Braulio Álvarez, quien ha sido objeto de varios ataques; la muerte de Iraida Quintero, asesinada al sur del lago en Zulia, y ahora dos atentados consecutivos contra el dirigente de Cojedes, el último de los cuales se produjo en la propia sede del INTI, cuando culminaba una ceremonia de entrega de tierras.
Puntualizó que si el Ministerio Público no toma acciones para castigar a los sectores responsables de estos atentados, la Federación Campesina saldrá a las calles a protestar, pero no como enemigos del Gobierno, ni mucho menos como guarimberos.
