Transcripción de la grabación del plan de magnicidio contra Chávez

General Guillén Dávila

General Guillén Dávila

Porque estoy metido en un peo ¿Por qué? Porque quiero conspirar ¿Por qué? Porque quiero matar al hijo de puta este de aquí ¿Por qué? Me estoy metido en este peo y ya se acabó.

Sindry: ¿A dónde te fuiste a las seis de la tarde?

Thomas: Estoy firmando, que quieres saber tú, que me estaba reuniendo con los oficiales que estamos haciendo una vaina para joder un carajo. Eso es lo que estoy diciendo. Que graben la llamada. Mala leche.

Sindry: ¿A dónde fuiste a las seis de la tarde?

Thomas: Aquí, abajo, en la urbanización, estábamos reunidos.

Sindry: ¿Con quién?

Thomas: Con unos carajos. Unos capitanes y unos tenientes.

Sindry: ¿Para qué?

Thomas: Coño, porque estamos inventando una vaina, te lo quiere decir, no lo querías saber, sí lo estoy haciendo.

Sindry: ¡Ah! Bueno ¿Dime a quién vas a matar, para de una vez acusarte?

Thomas: Yo sí y tú sabes muy bien a quién es.

Sindry: ¿A Chávez?

Thomas: Sí, señora.

Sindry: Ahorita mismo.

Thomas: Llame.

Sindry: Sí.

Sindry: Ahora resulta que está conspirando para matar a Chávez y claro, según tu papá a ti te adora y él es que te está metiendo esa mierda.

Thomas: Sí, como no, soy yo.

Sindry: ¡Ah! ¿Eres tú?

Thomas: Soy yo.

Sindry: Te jodiste.

Thomas: Soy yo ¿Oyó?

Sindry: ¡Ah! ¿Sí? Desde las seis de la tarde hasta las, hasta las, dos de la tarde ¿No es cierto?

Thomas: ¿Hasta qué?

Sindry: Hasta mañana ¿no es cierto?

Thomas: ¿Hasta qué?

Sindry: Desde las seis de la tarde hasta las dos de la mañana. Andate con tu mariconera.

Thomas: ¿Mariconera? También somos maricones toditos.

Sindry: Sí, claro men.

Thomas: Nojoda, inventando guevoná eso es lo que quería saber por teléfono ¿Ah? Pregunto eso. Es lo que querías saber tú por teléfono. ¿Ah? Yo en esta mierda, hay que coger a estos carajos en esta verga. Yo estoy cansado de esta vaina. Que me jodan a mí y jodan a todo el mundo ¡Nojoda! Si crees cree lo que te da la ana ¡Nojoda! A mí no me interesa un carajo.

Discusión acalorada (...)

¡No! Te estoy diciendo lo que estaba haciendo ¡Coño!.

Sindry: Mentiroso, no te creo, Thomas. Es que ya no te puedo creer.

Thomas: Yo no te puedo hablar ni por celular, ni por teléfono. Aquí me tienes metido ahorita, porque esta vaina está puyada. Aquí, esta güebonada.

Sindry: No te puedo creer.

Thomas: Estoy, inventando, vaina. Aquí esta vaina hay que hacerla poco a poco, porque yo no puedo seguir en esta mierda así.

Sindry: Yo no te puedo creer ni lo que respiras. Quédate con tu mamá y con tu papá.

Thomas: Sindry, vas a tener que creerlo cuando me veas.

Sindry: Quédate con ellos, que ellos son tu felicidad...

Discusión acalorada (...)

Sindry: Y tú, según tú, tu trabajito ¿Para cuándo es?

Sindry: Vas a matar a tu Presidente.

Thomas: Yo no estoy metido en esa vaina. Yo estoy planeando otra vaina igualito. Pero, yo estoy en otra vaina, en ora corriente.

Sindry: Estás traicionando a la persona que te da trabajo ¿No?

Thomas: ¡Nojoda! ¿Trabajo quién me da a mí?

Sindry: Él te da trabajo.

Thomas: A mí no me da trabajo ese señor.

Sindry: Él te da trabajo.

Sindry: ¿De dónde sale la plata?

Thomas: Yo soy oficial.

Sindry: ¿De dónde sale la plata?

Thomas: ¡No! Soy oficial y así esté el Presidente que esté, ¿Oyó? A mí me pagan, ¿Oyó?

Sindry: ¿Quién te está pagando?

Thomas: A mí no me paga Chávez.

A mí me paga, ¡Nojoda!, la Fuerza Armada Nacional.

Sindry: Por eso ¿De dónde sale la plata para la Fuerza Armada, del Gobierno!

Thomas: ¡No, señora! De la Fuerza Armada, del Ministerio de Defensa.

Sindry: ¿Y para cuándo piensas tú matar al güebón?

Thomas: ¡Ay! Yo no sé eso. No te puedo decir yo a ti.

Sindry: ¡Ay! Hijo de puta.

Thomas: Hay una corriente que se está moviendo aquí fuerte. Aquí la gente se va a empezar a joder en esta vaina.

Sindry: Vamos a ver si les sale ¡Ja!

Thomas: Bueno, dígalo, corra la voz. Lo que usted quiera

Sindry: Sí, sí voy a correr la voz.

Thomas: Va a ser una más del montón que hay.

Sindry: Yo no soy del montón, porque venezolana no soy.

Thomas: Bueno.

Sindry: Gracias a Dios.

Discusión acalorada (...)

Sindry: ¿Con quién estabas anoche mentiroso de mierda?

Thomas: ¿Yo no te dije ya?

Sindry: No me has dicho, tú me dijiste que estabas solito.

Thomas: Coño no te puedo hablar por teléfono, lo que ya te dije ¡carajo!

Sindry: No me importa. Si te importa un poquito, tienes que contarme todo.

Thomas: Está bien, coño. Te estoy contando, me estoy destapando, si quieren que graben. No importa. Mándale mensaje, si quieres coño, a Donaire, al embajador.

No importa. Mándale, te estoy diciendo, coño. No me interesa si me joden, no me importa.

Sindry: Que te jodan, pues, que te jodan. Eso es lo único que tú mereces por malo.

Thomas: Ya, pues. Mándale mensajes si quieres. No importa. Te estoy contando eso.

Sindry: Pero, ahora resulta que la zorrita con la que estabas anoche se convirtió en hombre. Decídete, pues, qué mentira me dices.

Primero que fuiste a dejar a tu abuela. Segundo, que estabas caminando. Ahora me sales con que no, con que estabas reunido con unos amigos.

Thomas: Coño, no puedo hablarte por teléfono. Ya te dije ya.

Sindry: A mí me dices ahorita qué estabas haciendo.

Thomas: Te dije, te estoy diciendo, estabas reunido aquí, en una casa de aquí abajo del general Cerruti. Ahí estaba una reunión. Se reunieron los oficiales.

Sindry: ¿Con quién, con tu papito?

Thomas: Ah.

Sindry: Con tu papá, me imagino.

Thomas: Sí.

Sindry: ¿Y qué haces con el viejo maricón de tu padre?

Thomas: Coño, estábamos en una vaina. Estaba también un bojote de gente ahí.

Sindry: ¡Ah! Sí, lleno de mujeres debe estar.

Thomas: ¡Ay, coño de la madre! ¿Qué verga es, Sindry?

Sindry: Para que veas lo mucho que te quiere tu papá, como te estás involucrando en este asesinato.

Thomas: Yo no estoy metido.

Sindry: Para que veas que tu papá también es un asesino.

Thomas: Mira, yo no estoy involucrado directamente en este peo. Yo lo que estoy es observador en el mierdero.

Sindry: No sé. A mí no me interesa.

Thomas: ¡Ajá!

Sindry: A mí no me interesa.

Thomas: ¿Por qué? Porque aquí la vaina se está poniendo fea. Aquí vamos a estar punto de guerra, porque ahorita ya ayer se suspendieron una vaina de las elecciones que es la vaina de las papeletas por votación, no van a valer aquí nada más las máquinas entonces la gente aquí nada más se está lanzando para la Presidencia.

Sindry: Son unos traicioneros ustedes.

Thomas: No, no Sindry.

Sindry: Sí.

Thomas: Si no, que aquí la gente, la están acabando. Aquí a todo el mundo lo están acabando, estés o no estés.

Sindry: A mí no me interesa, a mí no me interesa.

Thomas: Incluyéndome.

Thomas: Coño, nojoda, eso no es así, Sindry.

Sindry: Sí.

Thomas: Aquí lo que se está tratando de sacar en la manera pacífica, de que no pase un coño, de que las Fuerzas Armadas no salgan a la calle ¿Por qué? Porque se está evitando es, ¡coño! que haya un derramamiento de sangre aquí, porque si las Fuerzas Armadas salen para la calle, es otro peo.

Sindry: Y ese general como es que se llama ¿Cerruti? ¿Cómo es qué?

Thomas: Así mismo.

Sindry: ¿Cerruti?

Thomas: ¡Ajá!

Sindry: Ese general Cerruti es una mierda.

Thomas: ¿También? ¡Coño, nojoda! Te estoy diciendo, mira. Yo estoy hablando. Me estoy aquí cayendo. Por teléfono. Mala leche que estén grabando. Eso no importa.

Sindry: ¿Y cuál es el problema, sufres por tu papá acaso?

Thomas: No importa.

Sindry: Si tu familia ya se fue a la mierda. No me voy a ir a Venezuela.

Thomas: Y hablamos aquí y te enseño todo lo que está pasando.

Sindry: No me voy a ir a Venezuela.

Thomas: ¡Aló!

Sindry: Porque yo con asesinos y traicioneros no vivo.

Thomas: Eso no es así. Yo te estoy diciendo que no es así.

Sindry: No quiero estar contigo por asesino.

Thomas: No soy así.

Sindry: Y tu familia es una traicionera, hijo de madre.

Thomas: Yo no. Así tú sabes muy bien que yo no soy así.

Sindry: Tu hermana se mete millones, millones y millones al bolsillo y sin embargo traiciona a quien le da de comer.

Thomas: Yo no sé si es así, ¿me entiendes? Yo lo que quiero ¡coño! Que tú vengas para acá y explicarte un bojote de vainas que está pasando ¡Coño! Por favor, vente para acá y hablamos esta mierda.

Sindry: No.

Thomas: ¿Oíste?

Sindry: No. No me voy a ir yo con asesinos, traicioneros no estoy.

Thomas: Eso no es asesinos, traicioneros, Sindry, ¿qué vaina es esa? ¡Dios, mío! ¿Tú papá también no estuvo metido en golpes de estado y la güebonada?

Sindry: Verás, mi papá asesino no es.

Thomas: Es que yo no estoy diciendo que soy asesino.

Sindry: Nunca ha sido mi papá. Aquí siempre he estado. Él ha sido un hombre recto.

Thomas: Igual que yo.

Sindry: Bueno, por eso es que él ha renunciado a sus mierdas porque él no van a comprarlo.

Thomas: A mí tampoco me están comprando.

Sindry: ¿Ah, no te están comprando? Están matando a una persona, Thomas.

Thomas: No, no, yo no. Yo solamente estoy observando. Nada. Yo lo que tengo es que controlar a mis guardias que no salgan de un comando de donde están.

Sindry: ¡Ay, sí! Por ellos te preocupas ¿No? ¡Ay! Por ellos sí te preocupas.

Thomas: Yo no estoy preocupado por nadie. Por Dios, véngase.

Sindry: ¿Y ese general me imagino que es de la Guardia?

Thomas: No... ¡Aló!

Sindry: ¡Ah! No es de la Guardia ¿Qué haces tú con uno que no es de la Guardia?

Thomas: Es del Ejército... ¡Aló! Mirá Amor, amor...

Sindry: No me digas así.

Thomas: ¡Coño! Los muchachos terminan clase. Yo estoy ahorita consiguiendo la maldita casa ahí en Puerto Ayacucho, la vaina.

Sindry: No me voy a ir. Yo a mis hijos primero muerta antes de que se vayan.

Thomas: Y en San Fernando de Atabapo, donde estoy yo ¿Oyó?

Sindry: Primera muerta.

Thomas: ¿Tú me quieres ver preso ahorita?

Thomas: (...) Yo lo que hice fue estudiar una maldita carrera de cinco años, para que no fueran a joder. Tampoco la vaina es así.

Sindry. No me interesa.

Thomas: Porque yo, como oficial.

Sindry: No me interesa. Más jodido.

(...)

Thomas: Es una reunión ahí, de oficiales, de lo que está pasando, de la situación ahorita. Los EE UU aquí a Venezuela le quitó la venta. Hay un pocote de problemas con los aviones. Con los aviones militares. Están sin repuestos. No hay repuestos, para armamento ni un coño. Aquí estamos parecemos indigentes en esta güebonada. ¿Entonces, coño?

(...)

Se corta la llamada.


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