Septiembre 08 de 2014.-Desde la radios comunitarias Catabre, 99.3 FM, con reportes de Alirio Acosta y La Voz de Arismendi, 95.5 FM y Eliecer Liscano, del Estado Barinas, tierra del Comandante Chávez, nos llega esta denuncia transmitida a través de sus ondas:
Ocurrió en el municipio Arismendi del estado Barinas, hace pocos días, los agresores gozan de libertad, la impunidad con la que actuaron no es cuestión de asombro, basta con saber quiénes son sus amigos, sus curruñas, sus llavecitas, sus compañeros. Y además en una entidad como Barinas son cosas que pasan, ya casi nadie se escandaliza, hechos como estos se repiten con cierta regularidad. Las o los agraviados se cohíben en la denuncia, temen a represalias mayores, es lo usual. El caso que presentamos rompe esta norma.
El nombre de las víctimas y el número de hijos es el siguiente: UILMARY TOVAR CI 27.259.205 – Edad: 16 años, madre soltera, de un hijo de un año / YUNEIDI TOVAR CI 22.684.545 – Edad: 21 años, con un hijo de siete meses / NANCY APONTE CI 13.236.360 – Edad 47 años, tiene nueve hijos / LIGIA PADILLA CI 25.642.448 – Con una hija de un año.
Estas cuatro mujeres fueron objeto de diversos vejámenes el pasado día 2 de septiembre, cuando en horas de la madrugada llegó a sus hogares un grupo de personas que bajo influencia alcohólica, procedieron a desalojarlas de las viviendas que ellas mismas habían construido, pocas semanas antes. Los gritos e insultos de los agresores estuvieron acompañados por la amenaza de utilizar contra ellas y sus hijos los machetes y armas blancas que portaban, entre golpes y empujones fueron arrojadas al suelo y arrastradas por el pelo hasta sacarlas de sus ranchos.
Los autores materiales y quizás intelectuales fueron plenamente identificados por las víctimas. Señalan que los “educadores” o “profesores” Franklin, y Carlos Martínez, alegan ser los propietarios del terreno en donde ellas levantaron sus humildes viviendas. De estas quedaron regadas por el suelo, varas de madera, maltratadas latas de zinc, las palmas del techo y las requemadas topias de las cocinas, viejas colchonetas, restos de chinchorros y colgaderos. Pura basura, a decir de los “propietarios” de unas parcelas que la alcaldía les asignó hace más de 5 años y que las tienen “engordando”. Situadas entre el cementerio y la manga de coleo de este olvidado pueblo barinés, tan cerca de Valencia y tan lejos de la capital del estado Barinas.
Estas cuatro compatriotas y sus hijos son víctimas de la indolencia que caracteriza al actual alcalde, su nombre, si es que a alguien le interese es José Olivar Zapata, mejor conocido por sus amigos con el sobrenombre de “El Cachicamo”. Resultó electo gracias al voto chavista y a la adedócrata decisión de la dirección del PSUV regional, la campaña la hizo con la ayuda de uno de los diputados mudos que los barineses tenemos en la Asamblea Nacional. ¿Será éste, la lapa de este cachicamo?
No es sólo José Zapata el único responsable de esta situación, también es señalado el presidente del Concejo Municipal Eduardo Garrido, al que apodan “el tuerto” y los funcionarios de las oficinas de Catastro (Mérvin Córdoba) y Sindicatura (Arnaldo Lavieri). A todas estas instancias acuden los habitantes de este municipio en solicitud de una parcela para construir una vivienda y no hay atención, los asistentes de estos funcionarios repiten siempre la misma letanía: “el jefe no lo puede atender, está en una reunión”. Hasta que un día, estas cuatro mujeres, cansadas de tanta burla decidieron hacerlo ellas mismas y pararon sus ranchos en un terreno abandonado, pero con dueño. Como siempre, el derecho a la maldita propiedad privada, que despoja de cualquier derecho a los que solo posen necesidades. Primero las visitó la Guardia Nacional, amenazaron con ponerlas presas, y ellas no salieron, al día siguiente, a la hora de los ladrones, llegaron los agresores. Se dice, en cambio, que las autoridades municipales actúan muy diligentemente para conceder parcelas a personas que las mantienen como terrenos de "engorde" para la reventa especulativa.
Por ahora, luego del asesinato de Chávez, la indolencia, el burocratismo y la corrupción se hacen fuertes, atrás quedan las esperanzas de redención, el socialismo. La visión socialdemócrata impone sus políticas económicas. El desconcierto y la desesperanza amenazan al movimiento popular, honesto, revolucionario. Llega la tristeza de muchos, pero esto pasará, quizás tarde, pero sin duda este sentir se convertirá en indignación, combustible que alimenta la lucha por el socialismo auténtico. De Chávez y Bolívar heredamos la firme decisión a luchar hasta vencer, y a esta no renunciaremos.
Seguidamente los audios de los pases radiales entre ambas emisoras mencionadas, con las declaraciones de las personas agredidas:
Llamada recibida por Radio Catabre el 1ro de Septiembre 2014