En Chile, Salvador Allende tenía la mayoría del Pueblo de su lado y, sin embargo, fue asesinado y derrocado a sangre y fuego, gracias a una minoría militar y a una pseudointelectualidad reproductora del Estado burgués, de esas universidades que hoy siguen reproduciendo las prácticas fascistoides, a pesar de que hoy han vuelto al sistema de elecciones reguladas, para elegir a sus gobernantes. No en vano, han sido la cuna del neoliberalismo, presente desde el sanguinario Augusto Pinochet hasta hoy.
En Venezuela, existe un conjunto de universidades emblemáticas, por su prestigio y/o por su antigüedad, convertidas en reproductoras del Estado burgués, de la llamada IV República, que hoy se mantienen al margen de toda ley, como un Estado dentro del Estado, actualmente fortalecidas, a pesar de que en este país tenemos una nueva geografía del poder, desde 1999, con la asunción del revolucionario del Presidente Hugo Chávez Frías, hasta hoy, con el gobierno revolucionario, bolivariano, socialista y chavista, del Presidente obrero, Nicolás Maduro, pero, sobre todo, a pesar de que contamos con la mayoría nacional, el Pueblo, además de que el Estado Comunal es ley.
Estas universidades aludidas, además nucleadas en una entelequia denominada Asociación Venezolana de Rectores Universitarios (AVERU), desconoce que existen otras universidades nacidas en revolución, que reúnen a la mayoría de la masa estudiantil, nucleadas en otro paralelismo, conocido como ÂRBOL (Asociación de Rectores Bolivarianos), cuyos frutos están apenas empezando a sentirse, de manera incipiente, en donde además, su estructura, esquema y modelo, siguen siendo igual a las de las reproductores del Estado burgués, como las de AVERU, también conocida como la Asociación Venezolana de Rectores de la Ultraderecha.
En quince años de revolución estas universidades gobernadas a la presente fecha, irregular e ilegalmente, por rectores, vices, secretarios, consejos universitarios y directivos, han sido beneficiarias de presupuestos justos, los estudiantes han tenido las providencias estudiantiles jamás antes alcanzadas, se ha firmado el Primer Contrato Colectivo Único Universitario, se han atendido gastos adicionales y las infraestructuras se han rescatado y mejorado.
A pesar de ello, en estas universidades la democracia no se practica y en ellas, gradualmente, con la paciencia de un relojero suizo, se ha levantado toda una gran infraestructura, una fabulosa logística y se han formado cuantiosos contingentes de hombres y mujeres (éstas, a las que ellos antes les negaban el acceso al estudio o a ser parte del personal académico), para enfrentar con todas las armas posibles al gobierno revolucionario, hasta derrocarlo.
En estas universidades de la AVERU, el gobierno de EEUU ha instalado bases, mejores que las de Colombia, con unas asociaciones de soplones, agentes de la CIA y todo tipo de personal con mascarada de universitarios. En estas universidades de la AVERU, apenas hemos podido ver la punta del iceberg, con las guarimbas asesinas del 2013 y 2014, con mampara de universitarios. En estas universidades de la AVERU existe otra legalidad, que no acata, ni a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV: 1999), ni a la Ley Orgánica de Educación (LOE: 2009). Estas universidades de la AVERU se jugarán todo, para derrocar al Presidente Nicolás Maduro, porque confían en su impunidad y en una fuerza, de violencia y apoyo mediático, que es como la espuma de jabón, pero que intimida y ha traído muertos. Ninguno de los que controlan la AVERU ha pagado sus delitos.
Mientras tanto, del lado revolucionario, hay gente que hace vida en estas universidades que gobierna la AVERU y aspira que el gobierno sea el que haga cumplir el artículo 34 de la LOE, que establece la participación de todos sus miembros para elegir a sus autoridades: unos se aniñan esperando que eso lo resuelva solo el gobierno, otros hacen el papel de "Caperucita porno" ante los fascistas de las universidades y otros han intentado, de manera fallida, con estruendosos fracasos, hacer cumplir las leyes de la República y el artículo 108 de la CRBV y el 34 de la LOE, a pesar de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) así lo ha ordenado.
Pese a todas las adversidades, ad intra et ad extra, hay quienes han logrado avanzar exitosamente, en aras de la democratización de las universidades controladas por la AVERU y sin cálculos hegemonicistas, trayendo como consecuencia que han impuesto la democracia y van hacia las primeras e inéditas elecciones, como en la Universidad Nacional Abierta (UNA) y, pase lo que pase, incluso, si la comunidad se equivoca eligiendo ineptos o si acierta con demócratas y revolucionarios, con los resultados que deriven del Poder Popular, la universidad venezolana estará ganando.
Ciertamente, en quince años de gobierno revolucionario, el Estado y el gobierno han tenido la responsabilidad de aupar, dirigir y hacer cumplir la LOE, sobre todo, el artículo 34. No podemos soslayar que igual sucedió con la vieja PDVSA y hubo quienes, con argumentos manidos, retorcidos y seductores, aconsejaban al Comandante Chávez dejar quietas a las lacras llamadas "Gente del Petróleo", que él caería si democratizaba PDVSA y la ponía al servicio del Pueblo.
El Comandante Chávez puso a PDVSA al servicio del Pueblo y hoy Venezuela es otra. Faltan las universidades. "Ante estas circunstancia, no faltarán quienes quieran aprovecharse..." Lo advirtió el Comandante, en diciembre del 2012.
Aún estamos engatillados en las universidades. Y, aún hay quienes aconsejan convivir en una falsa paz con la derecha golpista de la AVERU, incluso, sabiendo que el gobierno de EEUU las controla y financia. Pero, estamos seguros de que se impondrá la unidad de los patriotas, es decir, la del Pueblo liderado por el Presidente Nicolás Maduro. O democratizamos todas las universidades o su golpe de Estado triunfará cuando menos lo esperemos.
