En la actualidad, las políticas y reformas educativas de Venezuela han concedido mayor importancia a la escuela, destacándose la autonomía y la participación escolar como centro de una política educativa que pretende mejorar los resultados de la prestación del servicio educativo, expresados en términos de acceso, eficiencia y calidad.
El Estado venezolano a través de sus políticas públicas manifiesta como objetivo alcanzar la justicia social, para disfrutar los derechos, disminuyendo las inequidades y priorizando necesidades sociales, por lo tanto, se incoporan los actores corresponsables llamados a integrar un todo, entre los que se destacan; consejo escolar, padres, madres, representantes o responsables, para lograr el bien común, los valores culturales, la interculturalidad, el deporte y recreación. ética del trabajo, participación ciudadana, corresponsabilidad educativa, actualización y tecnología, identidad nacional y respeto a corrientes de pensamiento, las cuales son políticas emprendidas por el Estado en materia educativa. Por tanto, las reformas educativas que se están implementando en Venezuela se mueven entre la universalización del conocimiento, en la búsqueda de una mayor equidad, se manifiesta el interés por su fortalecimiento en los planes de estudio mediante el establecimiento de educación para la convivencia, la paz y la ciudadanía; educación sexual y para la salud; educación ambiental, para el uso del tiempo libre y la educación para la equidad del género.
En definitiva, la transformación de las escuelas en espacio de participación activa y responsable de padres, estudiantes, maestros y miembros de la comunidad, al dotarla de mayores niveles de autonomía e instancias de concertación, potencia la democracia y la formación de ciudadanía, porque crea las condiciones que permiten propiciar y promover la participación y la corresponsabilidad de los diversos actores en el proceso de educación y socialización de las nuevas generaciones.