Nuestros socios ( Argentina y Bolivia), tras el gas y petróleo de esquisto…¿Entonces?

No es de preocuparse, ni tampoco ponerse bravo con Cristina o con Evo, simplemente las condiciones económicas a veces obliga. Argentina con una inflación rondando el 40 % para este año 2014, desempleo y falta de productos, con un consumo de casi 11 mil millones de dólares en energía (toda ella importada), un país que en antaño producía lo suficiente en gas y petróleo hoy debe importar. No es de extrañar que teniendo posiblemente la cuarta reserva más grande del mundo en gas y petróleo de esquito no aproveche esa oportunidad para cubrir su déficit interno de energía. Eso aún está por verse. Pero las circunstancias apremian y deben decidirse para el año que viene, a sabiendas que hay elecciones presidenciales. La Bolivia de Evo, es otra cosa, su situación económica no es tan apremiante, pero tiene unas reservas ya verificadas que podrían oxigenar su economía a largo plazo si la circunstancia lo amerita. El pragmatismo de Evo todos lo conocemos, si es de utilizar la extracción de gas y “petróleo” de la fracturación de esquistos lo haría sin consulta previa. Él es así, muy práctico. Pero vamos más allá del contexto suramericano, aun cuando el gigante amazónico Brasil también tiene pretensiones futuras de ir por ese camino.

El fenómeno de la extracción de gas y aceite de esquito no es nuevo en el mundo, desde siglos se ha utilizado, siendo de manera rudimentaria su extracción. Desde el 2010, los EEUU y Canadá emplearon tecnología para extraerlo a gran escala. Hay que aclarar que el aceite de esquito no es petróleo, es un hidrocarburo que tiene que pasar por un costoso refinamiento para poder acercarse al petróleo convencional. Ese hidrocarburo de esquito solo puede emplearse en la fabricación de asfalto y en procesos de refinerías y en la obtención de algunos derivados de cadena orgánica. Es decir, aun, no puede suplantar al petróleo en su totalidad. Argentina y Bolivia, junto con Brasil se encuentran entre los países que tienen yacimientos, como Canadá, EEUU, Gran Bretaña, China, Polonia, México, Australia, Austria, Suecia, Francia entre otros. Quienes han avanzado en su tecnología y manejan ya un volumen de extracción son los EEUU. Algunas agencias de energía predicen que para el 2035 los EEUU manejaran un 40 % de su consumo de gas proveniente de la fracturación de la piedra. También dicen que para el 2020 EEUU producirá 4,5 millones de barriles diarios de hidrocarburo de piedra pizarra. ¡¡Bull Shit¡¡..Diría un compatriota que vive en Denver. Las agencias propagan informaciones que no comulgan con la realidad. Ellas han dicho que los USA ha podido tener una explotación alrededor de 1 millón de bd en 4 años de exploración, realmente eso no está muy claro. Lo cierto que la explotación por intermedio del “Fracking” no es nada rentable comparado con la del petróleo convencional. He aquí la primera contradicción. Muchos piensan que la explotación de esquito ha sido uno de los factores para la baja que experimenta el crudo convencional, es al contrario. Los bajos precios del petróleo, pueden dar al traste con la industria de extracción de esquito.

Las grandes transnacionales del petróleo que conocemos son las mismas que experimentan con la extracción de hidrocarburos extraídos de la piedra. Los bajos precios del petróleo actuales y los grandes costos para conseguir, perforar y explotar un yacimiento de esquito hace que estas corporaciones vean como sus flujos de caja empiezan a decrecer. Aunado a que en los países “No OPEP” se está acabando el petróleo convencional. Hay que invertir sumas de dinero exorbitante para conseguir nuevos yacimientos, que la gran mayoría son finitos, entonces, cubrir los costos con extracción de esquito es cosa de un demente. Las transnacionales petroleras no tienen un pelo de tontas.

Otra de las consideraciones que hay que tomar en cuenta, es el daño irreversible al ecosistema, los movimientos ecológicos y ambientalistas están en alertas. Ya en Francia una ley lo prohíbe, también en Gran Bretaña han cuestionado este modelo de búsqueda de hidrocarburo, hasta un sismo, igual como ocurrió en Arkansas (USA), lo han atribuido a esta explotación. La contaminación de las aguas subterráneas es un problema específico. La gran cantidad de químicos utilizados en la perforación, casi todos, son cancerígenos. La técnica de perforación que se utiliza hace que la propagación de químicos sea inevitable en el subsuelo. La perforación del pozo se hace inicialmente hacia abajo, luego se direcciona de manera horizontal a unos 3 km, para luego bombear agua, arena y químicos a presión. En los EEUU, dicen que no hay problema, ya que todos los terrenos son privados y los dueños están de acuerdo, pero sabemos que los acuíferos no tienen límites, son libres y sin fronteras. El daño ecológico seria irreversible y considerado como catástrofe ambiental.

Más allá de los pronósticos de las agencias estadounidenses, que dicen que el empleo aumentara y el ahorro energético seria descomunal, sabemos que la extracción de hidrocarburo no convencional ha muerto al nacer. Algunos expertos dan una cortísima vida a esta producción de gas y de imitación de petróleo.

Nuestra hermana Argentina, aun, cuando considere a futuro su utilización, ya tiene algunas cifras no tan satisfactoria. En la provincia de Neuquén donde se considera que existe un gran yacimiento, el costo inicial de perforación puede redondear los 7,5 millones de dólares. Comentan los expertos que aunque la perforación seria vertical, aun así, puede existir contaminación, también el uso gigantesco de agua, es un problema, ya que las leyes regulan el uso del preciado líquido. Las comunidades del sector “Vaca Muerta” de la provincia de Neuquén están alertas para defender su patrimonio acuífero y el derecho al uso del agua por el hombre y los animales.

Es así que la producción de “petróleo· y gas de esquito tiene sus días contados, los bajos precios del crudo convencional es un duro golpe para quien lo explota (transnacionales). Las condiciones actuales de los EEUU hacen que busque afanosamente energía para proseguir con su conducta de gran consumidor. Los USA utilizan lobby de presión para bajar los precios y comprar más barato. Sumado la guerra (la de Irak, costo 2 billones de $). La oferta de países productores del oriente próximo ha hecho que por ahora bajen los precios. Los EEUU seguirán dependiendo de la energía que envían los 80 países quienes son sus suplidores, incluido Venezuela. Pero todo esto debe hacer reflexionar a los gobiernos y a los ciudadanos del mundo. Una vez alguien dijo; “Que la era de piedra se había acabado y no por falta de piedra”. Depender de la energía fósil, no es tener “independencia energética”. Depender de algo que es finito, no es independencia, y la energía fósil es finito, se descubre, se explota y se acaba.

Venezuela, debe ir en búsqueda de energías renovables, permanentes en el tiempo y en el espacio. No podemos seguir dependiendo nuestras vidas de algo tan volátil como los precios del petróleo. Aun nuestra industria petrolera y petroquímica no ha podido producir los más de 24 mil productos que provienen de la transformación del petróleo. Solo somos exportadores y dependientes de lo que compramos afuera. Para el 2013 la producción petrolera necesaria mundial fue calculada en 90 millones de bd, para el 2040 se especula que será de 104 millones de bd. Ya muchos yacimientos están secos, y no se consiguen otros. Hay un reto. Pensemos en eso.

Llego la Hora… Venceremos¡¡


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Pedro Patiño

Químico, Investigador de Asuntos Económicos e Históricos, Analista Político, Eco socialista y Bolivariano.

 pedro2.patino@gmail.com      @pjph

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