Presidente Maduro, no rompa nuestros sueños

Yo también tengo un sueño, no solo Martin Luther King, http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/international/newsid_3188000/3188123.stm, tuvo derecho de soñar, nosotros los que vivimos en esta patria de Bolívar y de Chávez,  también tenemos ese derecho.

Después de 40 años acumulándose una inmensa deuda social, con una profunda crisis moral, con una elite política gobernante en decadencia, corrupta, que no pudo lograr alcanzar las metas que el país esperaba y que le hacían promesas al pueblo, una y otra vez, en cada elección que venía y lo engañaban, una y otra vez, dándole la espalda a ese pueblo, surgió de ese mismo pueblo nuestro gran Comandante Chávez, para despertar de nuevo la esperanza perdida en todo los venezolanos. 

Con la insurgencia del Comandante Chávez la madrugada del 04 de febrero de 1992, el día que el pueblo venezolano recuperó la dignidad, los venezolanos despertamos de ese letargo en el cual estábamos inmersos, y empezamos a soñar con una Venezuela  más libre, más independiente, más digna, más prospera, más humana, más solidaria, más segura, con ciudadanos honestos, respetuosos de la ley, con sólidos valores, en feliz convivencia, tolerantes, pacíficos, responsables, alegres, amantes de la paz, sin ambiciones desmedidas, sin el egoísmo corrosivo, fraternales, estudiosos, trabajadores, con iguales oportunidades, en unión familiar, nobles. Y también empezamos a soñar con un cambio radical y violento que mejorara tanto la forma de conducir el estado, como en el surgimiento de un nuevo funcionario público deslastrado de todos los vicios de sus antecesores. 

Para materializar ese sueño, fijamos nuestra esperanza en la conducción de ese gran líder, el Comandante Chávez, que con el apoyo popular llegó al poder el 2 de febrero de 1999. Un presidente con una marcada diferencia a los presidentes que lo antecedieron durante los últimos cuarenta años, irreverente, insurgente, sincero, que estableció una conexión profunda con su pueblo que lo eligió, con esa descarnada sensibilidad humano, de lenguaje sencillo, humilde, sin compromisos con grupos económicos,  resteados con los más pobres y necesitados, y que asumió con coraje y valentía la difícil tarea de darle cause a la revolución venezolana.

El camino transitado por el comandante Chávez para lograr el objetivo de adecentar el país que había heredado, fue duro, lleno de dificultades, de traiciones externas e internas, penetrado por oportunistas incompetentes. Y a pesar de todas estas dificultades avanzó significativamente en propulsar cambios revolucionarios inspirados en el socialismo Bolivariano. No pudo completar la tarea, el destino le deparó una mala jugada, pero como todo líder visionario, justo en el ocaso de su vida, aquel histórico 8 de diciembre, le entregó el testigo a nuestro actual Presidente Nicolás Maduro para que continuara conduciendo la revolución a un destino seguro.

El sistema socialista que se está construyendo no ha fracasado, no es responsable de habernos conducidos a la situación que hoy con preocupación contemplamos, los verdaderos responsables son algunos de sus conductores, falsamente socialistas y revolucionarios infiltrados, por su ineficiencia e incapacidad demostrada, que por el contrario han sido muy eficientes en la construcción de redes de poder que han rodeado, antes al comandante Chávez y hoy al presidente Maduro.

Seguimos soñando con un país, en el que algún día se materialice el pensamiento de Bolívar, inspirador de esta revolución: "El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad posible y mayor suma de estabilidad política”.

Seguimos soñando con un país:

- Donde se erradique la pobreza y la pobreza extrema.

- Donde estén en funciones de gobierno, verdaderos socialista y revolucionarios (que cuando salgan del gobierno tengan la misma modesta posición económica con que llegaron al cargo, salvo las mejoras logradas producto del esfuerzo de su trabajo).

- Donde se extermine la corrupción, que constituye un viro mortal en cualquier sistema de gobierno (hay demasiadas denuncias de corrupción desde las más altas posiciones de gobierno hasta en los más bajos eslabones de la burocracia).

- Donde se castigue la ineficiencia en cualquier instancia de gobierno con la destitución ejemplar del cargo (se debe eliminar la cultura del enroque de funcionarios, si lo hacen bien déjenlos y prémienlos y si lo hacen mal sáquenlos y no los pongan en ningún otro lugar donde lo sigan haciéndolo mal).

- Donde exista una red de salud pública que supere en calidad y cantidad la red privada de salud.

- Donde exista un sistema educativo público con una infraestructura ejemplarmente mantenida y educadores con la moral muy en alto, con una mística a toda prueba y dignamente remunerados. Un sistema que garantice la educación a todo niño, con una atención especial a los más pobres y con difícil situación familiar.

- Donde se garantice seguridad  personal.

- Donde haya oportunidades de trabajo de calidad.

Señor presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros usted tiene la oportunidad de materializar este sueño. Tiene el apoyo de todos los venezolanos que votamos por usted. Tiene un país inmensamente rico. Tiene un pueblo noble. Tiene un pueblo que todavía no ha perdido la esperanza. Tiene un pueblo trabajador. Tiene un pueblo honesto. Tiene un pueblo acostumbrado a vencer las dificultades. Tiene un pueblo hijo de Bolívar. Tiene el legado de Chávez.

Señor presidente por favor no nos defraude. Señor presidente por favor no rompa nuestros sueños.

 

Salazarpjh1@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1469 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter