Somos Médicos Integrales Comunitarios

¡Joven, Empínate!

"La juventud ha de ir a lo que nace, a crear, a levantar a los
pueblos vírgenes, y no estarse pegada a las faldas de la ciudad
como niñotes que no quieren dejarle a la madre el seno." José Martí.

PRIMERA PARTE

Nosotros los Médicos Integrales Comunitarios y nosotras las Médicas Integrales Comunitarias, nos debemos a la MEDICINA SOCIALISTA signada por los siguientes principios: Solvencia Científica, Integridad Moral, Humildad, Autocrítica, Identificado con los objetivos de la justicia, y sobre todo una gran fortaleza moral ante las presiones, las amenazas, las tentaciones, la adulación, los sentimentalismos y los nexos gremiales; a esto añadimos nuestra divisa, que no es otra que la GRATUIDAD DE LA SALUD reconociendo ésta como un derecho universal e inalienable.

La burguesía aduce hipócritamente sobre nuestra formación, dizque preocupados por la salud de nuestro pueblo, vanagloriándose de un supuesto nivel científico bien cuestionado por los resultados que en materia de salud nuestro pueblo venía afrontando; muchos de ellos, mercaderes de la salud, empezaron criticando nuestro enfoque en contraposición al de ellos, pues, el hecho de que nos llamemos "MÉDICOS INTEGRALES COMUNITARIOS" no es una casualidad, encierra este nombre todo el desafío de este profesional ante los nuevos tiempos históricos que vive el país; ellos dicen graduar "médicos cirujanos", título que prácticamente es una verdadera falsedad, pues, no hay cirujanos con seis (6) años de estudios, como los había hace dos siglos, de allí los mal llamados "médicos cirujanos", título que está en disonancia con lo que es un médico cirujano en la actualidad. Es sabido que en seis (6) años de la carrera (pregrado) no se hacen cirujanos, sino, los estudios de postgrado hacia esa especialidad. Por lo que no debe sorprender que los médicos comunitarios tengan las mismas competencias científico-técnicas que los supuestos médicos cirujanos formados por las universidades tradicionales.

La diferencia en esencia, entre ambos profesionales, va desde el color de la piel, los rasgos de mestizaje, estatura y orígenes afro e indo-descendientes hasta su posición social, porque somos los médicos integrales comunitarios los más genuinos representantes del pueblo en materia de salud, es decir, defendemos sus derechos de acceso a los servicios de salud lejos de la vorágine mercantilista. He allí el meollo del asunto. Hemos pasado por rotaciones hospitalarias, nos hemos codeado con ellos en condiciones adversas y hemos demostrado nuestro nivel científico, desenmascarando su carácter mercantilista de la salud.

La campaña de desprestigio y las opiniones adversas a uno de los programas más justos y exitosos de la REVOLUCIÓN BOLIVARIANA como lo es la formación de Médicos Integrales Comunitarios con los argumentos más falaces, pretende la élite médica de este país minimizar por un lado, el alcance social que estos médicos y médicas significan para la población y por el otro, ocultar sus verdaderas pretensiones y deseos que no son otros que seguir manteniendo el sistema de salud público a sus anchas apetencias mercantilistas; transformándolo en un apéndice de la medicina privada, engranado a una salud tutelada por las pautas de las grandes transnacionales farmacéuticas y empresas tecnológicas de equipos médicos. Sin menoscabo a la tecnología, la esencia de nuestro nuevo sistema de salud debe ser el hombre como un todo interrelacionado a un complejo sistema biopsicosocial donde debe privar el prever y no el curar, en contraposición a la pauta de la medicina capitalista que fortalece su categoría dominante, la ganancia.

No todos los médicos venezolanos están plegados a los designios del sistema capitalista en materia de salud, pero si la gran mayoría; cosa que no es de extrañar, pues, para ello han sido formados; de allí se desprende su fascismo en las instituciones hospitalarias hacia nosotros, sus vejámenes, desprecios, maltratos y la falta de los más elementales principios de educación a la hora de dirigirse a nosotros, los médicos del pueblo humilde y soñador. Es prácticamente una excepción que un médico venezolano haya sido amable, cordial con estos jóvenes durante su formación; pero sí hubo para ellos, las más sinceras felicitaciones por su patriotismo y los exhortamos a terminar de entender que estamos unidos bajo un mismo estandarte: LA SALUD DE NUESTRO PUEBLO. Seamos cada vez más humanos y no nos seguemos por la mediocridad capitalista; pues, el pueblo de Bolívar debe y puede contar con profesionales que lucharán por hacer de este país y del continente, más saludable que como lo encontraron.

La Revolución Bolivariana, enmarcada en las banderas del SOCIALISMO como única vía para la redención humana, es una titánica tarea la que se llevará adelante en nuestro país; pero nuestro pueblo nos ayudará en la realización de la misma, confiará en sus futuros médicos, abriéndoles gustosamente las puertas de todos sus hogares, donde estaremos visitándole con los integrantes de los COMITÉS DE SALUD, CONSEJOS COMUNALES y demás personal médico-asistencial de nuestro país. Por el futuro de nuestros niños y por una sociedad más sana, cumpliremos a cabalidad la misión que el Comandante Chávez nos ha encomendado.

SEGUNDA PARTE

En este nuevo año de logros y avances del proceso revolucionario, se incorporaron 2.500 nuevos Médicos Integrales Comunitarios al Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS), para un total de 16.792 médicos y médicas formados por y para la revolución; estos galenos tienen un objetivo muy claro que no es otro que seguir profundizando los cambios que en materia de salud viene exhibiendo nuestro querido y amado pueblo en revolución. Al ser incorporados a los diversos centros de salud adscritos al MPPS, deben hacer uso de su mentalidad científica que está ajustada a los nuevos tiempos históricos que vive el país, y cuyo pensamiento los distingue de la medicina mercantilista. Ahora bien, ¿En qué consiste el pensamiento médico revolucionario de los Médicos Integrales Comunitarios?

Primero: Hay que empezar por decir que durante la dictadura adeco-copeyana, nunca en nuestro país se desarrolló un pensamiento médico venezolano, es decir, que estuviese ajustado a nuestras realidades como pueblo libre y soberano, por el contrario, aquí se practicó una la medicina semiprivada, que propugnaba una salud tutelada por las pautas de las grandes transnacionales farmacéuticas y empresas tecnológicas de equipos médicos. Desde este punto de vista y una vez llegada la revolución bolivariana se enfrentan dos culturas médicas: la SOCIALISTA y la mercantilista. Por un lado, la primera encarna en un médico que va y hace vida en el barrio, en el campo, en fin con el hombre y la mujer humilde; la otra encarna en el médico que está acostumbrado a "su hospital" a tratar "las enfermedades". En contraposición del médico que va al primer frente, donde está el enfermo, diferenciándose así radicalmente del médico que recibe al enfermo sólo en el hospital y que está lejos de comprender la realidad social del paciente, tan importante en el proceso salud-enfermedad.

Segundo: Otro aspecto de vital importancia que caracteriza el pensamiento médico revolucionario en la Venezuela Bolivariana, es el hecho de que el Médico Integral Comunitario para poder llevar a la práctica el enfoque biopsicosocial, debe asumir la salud a través de la indivisible unión de dos cuerpos que determinan la condición humana de nuestros pacientes. Por un lado está el CUERPO SOCIAL, y por el otro el CUERPO HUMANO propiamente dicho; ambos cuerpos deben estar en un equilibrio constante, la afectación de uno es directamente proporcional al otro; de allí que llevar la salud a nuestro pueblo es una tarea que está unida a la construcción del socialismo, pues, el capitalismo es un sistema anacrónico, disfuncional y que reproduce una sociedad enferma por lógica de consumo, donde privilegia lo curativo ante lo preventivo.

Tercero: Es sabido que la medicina mercantilista y sus máximos exponentes, los médicos burgueses, se mueven dentro del oscurantismo médico que durante años sembraron en el imaginario de nuestro pueblo, valiéndose de la inexistencia de una cultura médica afianzada y enraizada en las masas populares, tienden a manipular a nuestro pueblo con los argumentos más falaces sobre la Medicina Socialista. De esta forma se lanzan en manadas contra todo lo que ella representa y contra quienes la impulsan, así es como han llegado a decir de forma hipócrita que se preocupan por la capacitación de los Médicos Integrales Comunitarios, ocultando tras esta campaña sus más viscerales intereses económicos de clase.

Es sabido que el Médico Integral Comunitario está signado por dos preceptos fundamentales: uno es su CONCIENCIA POLÍTICA y el otro su férrea POSICIÓN DE CLASES, que se traduce en el principio de la gratuidad de la salud como práctica profesional a donde quiera que este vaya.

TERCERA PARTE

Comienza la cuenta regresiva del pútrido sistema de salud mercantilizado. Es un hecho notorio la gran capacidad científica desplegada a través de la mística combativa de los Médicos Integrales Comunitarios, quienes de la forma más valiente han enfrentado al fascismo en los diversos centros de salud donde les ha tocado convivir con los remanentes de la salud privada expresados en los especialistas burgueses; en esos seres que creen tener la voluntad suprema de comercializar con las vidas del pueblo, y haciendo eco de su "capacidad científica", se declaran defensores de la salud privada practicada en el capitalismo, razón por la cual se atrincheran en lo que ellos consideran su último bastión.

En la actualidad, la Revolución Bolivariana cuenta con casi 17.000 médicos integrales comunitarios, buena parte de estos profesionales cumplieron su artículo 8 a finales del pasado año. Situación que los acredita como aptos para optar a posgrados de las diferentes especialidades médicas; necesarios para tomar el poder político y científico dentro de todas las instituciones de salud adscritas al MPPS. Esta idea aterroriza a los médicos burgueses mercantilistas y han salido en manada, como una jauría de lobos, gritando a los cuatro vientos cualquier argumento para descartar esta posibilidad de postgrados para los médicos integrales comunitarios; ellos, los sin ética, están desplegados en una batalla campal contra la nueva salud impulsada por la Revolución Bolivariana, ellos desean preservar ese sistema que tantas vidas ha cobrado a nuestro pueblo, prácticamente sus bienes adquiridos por la práctica de la salud privada están machados de sangre de nuestros humildes; cuales vampiros de la salud, sus opulentas vidas se sostienen con la sangre de un pueblo que pagó las universidades públicas donde ellos se formaron, para que estos le nieguen la salud por no tener dinero.

Esta lucha entraña la situación real de cambiar un sistema de salud que se lleva el 73% del presupuesto asignado al MPPS, a través de los seguros médicos privados, razón por la cual estos merolicos de salud están atemorizados, sus fortunas están sustentadas en las más salvajes atrocidades cometidas contra nuestro pueblo en materia de salud, y quieren negarle el paso a especializaciones a los médicos integrales comunitarios, porque saben que allí hay una posibilidad real de cambiar e instaurar la salud socialista en nuestro país.

La lucha promete arreciarse y las filas de la medicina integral no estarán dispuestas a recular, ya es sobradamente conocido su espíritu combativo.

¡Ante el pueblo hemos jurado vencer!

¡Y Venceremos!

Fecha: Junio, 2014.

Escrito por: Eliezer Mora.

Enviado por: Camilo Torres

cetp111@hotmail.es



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