La Reforma a la Ley de Planificación Pública y Popular

"Luego habrá que seguir trabajando otras escalas, objetivos específicos, generales, regionales, nacionales. Es una nueva forma de planificación, es la planificación integral socialista, porque la construcción del socialismo está sujeta a la planificación"

Comandante Hugo Chávez Frías – 11-06-2012

Con la reciente reforma a la Ley Orgánica de Planificación Pública y Popular, en el marco de la reciente Ley Habilitante, se coloca en el tapete de la discusión una serie de elementos, muy necesarios de abordar, en cuanto a gestión pública se refiere.

La primera y necesaria referencia es la de aquellos aspectos novedosos que trae la nueva Ley y que sin duda, vigorizan la urgente puesta en marcha de esta normativa. Veamos:

· Pone énfasis en la planificación territorial promoviendo la figura de la planificación subregional referida a: las regiones geográficas, que sirvan como espacios funcionales, y desde donde se puedan planificar políticas públicas, atendiendo a criterios geo-históricos, de identidad y potencialidades económicas, pudiendo tener formas específicas de distritos motores de desarrollo, zonas económicas especiales, regiones de conocimiento productivo, etc…

. Se amplían los actores del Sistema Nacional de Planificación Participativa y Protagónica con la incorporación de la figura presidencial y de los consejos presidenciales del poder popular (figuras instituidas por el Presidente de la Republica y que buscan ser factores articuladores entre el Ejecutivo Nacional y las diversas expresiones de gobiernos territoriales y del poder popular para la elaboración e instrumentación de políticas públicas sectoriales en todas las regiones del país).

· Se amplía la vocación planificadora a través del Sistema de Planes, de carácter integrado, pudiendo ser los planes espaciales o sectoriales, bajo categorías estratégicas u operativas, siendo una novedad los de Desarrollo Subregional.

· Pone de relieve en el marco de la planificación coordinada y armonizada, para el logro de un bienestar social integral, el impulso de la equidad territorial, entendida esta como la acción planificada que permita alcanzar un desarrollo geográfico y geo humano integro. Es decir, la elaboración de políticas que promuevan el desarrollo equilibrado de las regiones (art. 185 de la CRBV), con alto sentido cooperativo, donde se complementen las políticas e iniciativas de desarrollo de las distintas entidades públicas territoriales y las instituciones de gobierno del Poder Popular.

· Otorga preeminencia al Sistema Nacional de Planificación Participativo, en cuanto a la optimización de los procesos de definición, formulación, ejecución, control y evaluación de las políticas públicas; de efectividad, eficacia y eficiencia en el empleo de los recursos públicos dirigidos a la consecución, coordinación y armonización de los planes, programas y proyectos para la transformación del país.

· Igualmente, concede tareas de coordinación concretas al Ministerio del Poder Popular con competencia en materia de planificación, en cuanto a su articulación con el Sistema Nacional de Planificación Participativa para garantizar la coherencia y coordinación entre los diversos planes espaciales y sectoriales, y a la Comisión Central de Planificación, como responsable de la evaluación de los lineamientos estratégicos, políticas y planes, de acuerdo a lo establecido en el Plan de la Patria.

De manera entonces, que urge la puesta en marcha del Sistema Nacional de Planificación Participativa y Protagónica, que no es otra cosa que la mejor síntesis teórica, operativa y de gestión pública estratégica para el develar los misterios del Estado en cuanto a políticas públicas se refiere. Además porque desmitifica los procesos de planeación, catalogados como el conocimiento de estricto manejo de especialistas. Y sobre todo, como diría Haiman El Troudi, porque democratiza la información contenida en las "cajas negras" de la planificación.

En fin, el Sistema Nacional de Planificación Participativa y Protagónica es la herramienta para la articulación institucional, así como para la armonizar los sistemas de financiamiento, inversión pública, los presupuestos, la gestión gubernamental y la contraloría social, o en otras palabras como lo señala la Exposición de Motivos de la novel reforma: "… la planificación a escala nacional, regional, subregional, estadal, municipal y comunal, enunciada en la presente propuesta, facilitará definir la estrategia del Estado para el seguimiento de las políticas integrales en el territorio…" .

De manera entonces que la mesa se encuentra servida tanto para el Ministerio de Planificación, como para la Comisión Central de Planificación, para el impulso de esa planificación de nuevo tipo de la que se requiere para institucionalizar metodologías que orienten la acción del Estado y garanticen la participación de los sectores y factores sociales y económicos, acorde con las estrategias establecidas en el Plan de la Patria; Recordemos, que hoy más que nunca cabe la premisa que solo bajo el socialismo, la producción debe ser planificada y organizada, para dar preeminencia a la satisfacción de las necesidades, económicas, sociales y espirituales del pueblo antes que el lucro y la ganancia desmedida; que la Revolución Bolivariana, busca integrar a todos los miembros de la sociedad en el desarrollo, las revisiones, las correcciones y la ejecución de los planes de gestión pública y; porque La planificación pública, tiene que lograr la amplia participación de las masas sociales para determinar los objetivos y las metas del desarrollo y el buen vivir; estudiar sus planes, su aplicación; revisarlos cuando la necesidad lo exija; e iniciar nuevos proyectos para el futuro. Tampoco olvidemos que la planificación genuina es inseparable de la más amplia democracia.

Cabe mencionar finalmente, el inmortal pensamiento de Carlos Matus Romo (Ministro de Economía, Fomento y Reconstrucción de Chile, bajo el gobierno del Presidente Salvador Allende): "La planificación implica que el sujeto es capaz de crear su futuro y no sólo de aceptar resignadamente lo que el destino le depare. Planificar significa pensar antes de actuar, pensar con método de manera sistemática, explorar y explicar posibilidades y analizar ventajas y desventajas, proponerse objetivos, proyectarse hacia el futuro, porque lo que puede o no ocurrir mañana decide si mis acciones de hoy son eficaces o ineficaces. La planificación es la herramienta para pensar y crear el futuro. O sabemos planificar o estamos obligados a la improvisación. La planificación es una herramienta de libertad".



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Victor Barraez


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