Nuestra dolarización y la actuación oportuna

El Comején Moral

Se ha dejado pasar tanto tiempo que los vicios han tomado mucho cuerpo y se han instalado en las neuronas, en la mente de las personas que incurren en delitos; casos muy actuales: los raspacupos, el bachaqueo, entre otros.

Tanto se instala en su estructura mental que para ellos, “ese es su trabajo” y “nadie se meta con su trabajo”  “de qué va a vivir luego en este país tal…y tal”.

Sinceramente no creo que el patrón de actuación sea dejar que las cosas pasen durante uno, dos, tres años o más, para comenzar a “darnos cuenta” de lo que está pasando a los ojos de todos y que como el comején se come TODO, hasta la moral de un pueblo que hoy es muy diverso en nacionalidad (no sólo colombianos, hoy convivimos con más chinos, más cubanos, más portugueses, árabes, entre otros) diverso en costumbres y en la manera de ver y hacer las cosas; de todos ellos hemos escuchado cualquier cantidad de cosas, buenas y no tan buenas.  

Por otro lado, observamos como hoy estamos dolarizados quizás como nunca, hasta al Presidente Maduro recientemente le escuché hablar de “Nuestros dólares” y también de “los dólares del país” lo que me hace resonancia, porque yo hablo de “nuestros bolívares” de los “bolívares de país”; particularmente en esa ocasión yo contextualicé el contenido del discurso del Presidente, ya que lo escuchaba con atención; pero para quien lo escuchó con menos cuidado, es probable que capte mayormente “ nuestro dólar” ¡Ajá! ¿Y desde cuándo es nuestro dólar?

Lo cierto es que con alguna frecuencia escuchamos decir “Síii… Maduro lo que quiere es quitarnos nuestros dólares”

¡Hey! El Presidente aclaró que eso es un beneficio otorgado a partir de este Gobierno Bolivariano, por aquello que somos un país petrolero, o sea, un beneficio petrolero, que  Chávez pensó que nos correspondía sólo por el hecho de tener la nacionalidad  venezolana.

Ahora si esto es así, no es una obligación por parte del Gobierno, el cual pudiera plantearse una suspensión temporal del beneficio, mientras los precios del petróleo se estabilicen;  propondría además, mientras se afinen los procedimientos y controles de su administración, porque partiendo de mi punto de vista le ha traído más mal que bien a los venezolanos, si evaluamos sus efectos desde los principios morales, los cuales deben ser preservados por encima de cualquier interés económico.

Disgusta mucho, es injusto que mientras unos “se benefician” ilícitamente, el grueso de la población (de verdad ya no sé si es el grueso) que no utiliza los mecanismos desviados que ya sabemos para obtener lo que necesita, tengamos que estar consumiendo nuestro tiempo y energía, entre, hacer colas para comprar los productos básicos y hacer colas esperando un transporte que nunca llegará en las provincias de alta densidad poblacional, en 4 ó 5 minutos, como hoy es posible gracias a este gobierno en Caracas y Miranda, ni siquiera en el doble o triple tiempo; 45,60, 120 o más minutos, si es que llegan.

¿Cuáles han sido los aportes de este beneficio?

Sé muy bien que para los académicos sí y para muchos que compraban medicamentos; pero se desvirtuó. Parece que tenemos la mala costumbre de desvirtuar lo que nos beneficia.

Pobre Chávez  y  pobre Maduro hoy.

Un beneficio que nos ha hecho el peor daño, un daño moral, ha carcomido la moral de muchos, quienes hoy se cuentan como personas que han cometido un delito ¿y cómo se tipifica a quien comete un delito?

También, ¿Por qué demoramos tanto en enderezar el entuerto?

¿Somos tan ingenuos como para dejar que las cosas pasen uno, dos, tres y mas años, para reaccionar?

¿Hemos necesitado que la VII Cumbre se realizara en Panamá para asociar el crecimiento de inversiones en ese país por parte de venezolanos, con lo que ha venido pasando en nuestro país? con los raspacupos por ejemplo.

¿Hemos tenido una venda en los ojos? Hoy cuando el país por culpa de Chávez, cuenta con tecnología de punta, satélites, que nos ayudarían a proteger nuestra seguridad.

El pueblo lo ha venido diciendo desde hace tiempo, por todos los medios que se lo permiten. Hemos convivido con el raspacupo, el bachaqueo, el contrabando, el acaparamiento y el engorde de los productos de todo tipo y por todo tipo de gente sin distingo de clases sociales, familias completas y lo que es peor, muchos justifican su accionar.

Tenemos que escuchar al pueblo; Presidente sintonice por ejemplo, en Radio Nacional de Venezuela, programas como Tiempos de Zamora, trasmitido a las 5.00 a.m. donde sí dan suficiente tiempo a la intervención de los usuarios, quienes generalmente son personas con mucha experiencia, que han vivido en la cuarta y la quinta República, han vivido lo suficiente para no callar verdades y para sugerir vías de acción más expeditas que contribuyan a mejorar la producción.

El pueblo habla, pero pareciera que no se le escucha lo suficiente, si se le escuchara mas, estoy convencida que la realidad real, se impondrá a la realidad virtual y de manera oportuna se pondrá en acción la mano dura de la cual tanto  nos ha hablado últimamente el equipo de gobierno.

El temor a la norma debe imponerse, de tal manera que el comején moral mitigue su avance desmoralizador que transforma la ética del pueblo.

 

*Orientadora

ruthcueto7@gmail.com

 

 



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Ruth Cueto


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