E
n un acto realizado el día miércoles 14 de febrero con los pensionados del IVSS, en el salón Venezuela del Circulo Militar. El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Chávez afirmó (citando a Marx), que “Los trabajadores no pueden convertirse en esclavos del trabajo, en esclavos del capital. Este debe estar subordinado a los trabajadores”. Haciendo esta reflexión ordeno que se revisara la jornada de trabajo de 8 horas que se tiene establecida hasta ahora, además de que en este horario que será reducido se dejara un tiempo estipulado para la educación de los trabajadores. “yo pido todo el apoyo de la clase trabajadora, de los sindicatos verdaderamente revolucionarios… Llamo a la clase trabajadora a que de una vez por todas juegue el papel que le corresponde jugar en esta revolución”.
Una vez mas el presidente reitera su llamado a los obreros, a través de sus sindicatos a que tomen acciones concretas. Ya lo hizo cuando tiempo atrás hizo con un llamado a los trabajadores planteando la consigna de empresa cerrada, empresa tomada. Sin embargo los dirigentes de las distintas corrientes de la UNT no supieron aprovechar esta oportunidad, en lugar de centrar el debate de cómo organizar a los trabajadores para tomar y ocupar las empresas, demandando su nacionalización bajo control obrero, centraron la atención sobre todas las cuestiones de las elecciones internas y la lucha por ver quien controlaba la dirección.
En otra oportunidad recientemente en uno de sus alocuciones en Alo Presidente, volvió hacer otro llamado. Y ahora con estas palabras les esta diciendo a que ya es hora de actuar. En esto tienen una gran responsabilidad los dirigentes de todas las tendencias en el movimiento obrero.
Para la CMR esto sería perfectamente posible. La dirección de la UNT deben llamar a un encuentro nacional con todos los sectores entre el movimiento obrero, para discutir el Socialismo del Siglo XXI y el papel de la Clase Obrera en la Revolución Bolivariana. Organizar una jornada de toma de fábricas, creando los Consejos Trabajadores, donde los sindicatos sean el alma de los mismos. Coordinándolos a nivel local, regional y nacional. Vinculándolo a los campesinos, jóvenes y los Consejos Comunales.
Estos elementos en el discurso de Chávez se suman a la ya ruidosa ola de nacionalización de las empresas estratégicas del país. El gobierno bolivariano, en plena agudización de la lucha de clases y de saboteo capitalista a la economía y con un debate cada vez más abierto en cuanto a como construir el estado socialista, se lanza a la nacionalización de la energía y las telecomunicaciones, que despierta y anima a las masas creando enorme expectativas, y agudiza la lucha entre reforma o revolución. Ciertamente es hora de que la clase trabajadora juegue su papel. Para el movimiento obrero estos pasos son vistos como un paso adelante la nacionalización energética y las de telecomunicaciones y debe de ir acompañado del control obrero en todas estas industrias nacionalizadas, para que la burocracia estatal no transforme estas medidas progresistas en su contrario.
Estas medidas son un paso adelante para la revolución pero sólo un paso. Ahora s se encuentran bajo la presión imperialista que amenaza ahora con sabotear la economía, a través de sus peones lacayos, en otras palabras los capitalistas venezolanos. Por esto la única manera de defender las conquistas es contando con los trabajadores.
De igual manera y debido al desabastecimiento de algunos productos de la cesta básica, causado por las roscas capitalistas en la producción nacional, Chávez en el citado discurso afirmo que no se justificaba dicho desabastecimiento, reguló mediante decreto toda la cadena de comercialización y llamo a las comunidades y trabajadores a organizarse para denunciar a quienes causen este tipo de situaciones para que sean objeto de expropiación y nacionalización “atrévanse a no acatar la venta de estos productos regulados y los nacionalizo, no importa si tengo que nacionalizar la cadena completa y ponerla en manos de los consejos comunales” afirmó el Presidente.
Inevitablemente los burócratas y los capitalistas nacionales y extranjeros, boicotearan, el control obrero, pero los trabajadores que manejan las empresas nacionalizadas, en cogestión, tomadas, en conflicto, etc., deben trabajar unidos y organizadamente para lograr influir en la transformación política y económica de la sociedad. En esta dirección el FRETECO debe ser un ejemplo a seguir y a ser apoyado por el movimiento obrero a el cual hoy el Presidente Chávez le pide que juegue su papel. La mesa esta servida. El trabajo de los revolucionarios es intensificar la formación política en el campo obrero, a la par de llamar a un plan de acción unitario para centrar las fuerzas en los puntos clave e ir a la unificación de los obreros. Todavía queda por hacer y facilitar por esta vía el encuentro entre la clase obrera y su ideología. PATRIA SOCIALISMO O MUERTE VENCEREMOS.
