¿Por qué urge una VANGUARDIA REVOLUCIONARIA?
La Vanguardia revolucionaria es la dirección política que orienta el inicio y rumbo de todo proceso revolucionario. Sin ella todo se torna quimérico, especulación y pragmatismo; haciéndose cuesta arriba verificar en la practica si es correcto, o no, el camino trazado, en un momento determinado, porque cuando un pretendido proceso “revolucionario” es “dirigido” por aventureros de oficio, negadores de la VANGUARDIA REVOLUCIONARIA y de la teoría Marxista-Leninista, es casi seguro que los resultados sean catastróficos, adversos a los intereses del pueblo.
Si nuestra máxima aspiración la encarna la construcción del estado SOCIALISTA, como nuestro proyecto estratégico que es, resulta vital y es imprescindible tener bien claro que toda táctica empleada para alcanzarlo ha de ser correlativa al mismo; sopena de sacrificarlo y destruirlo, al menos temporalmente; porque ninguna táctica puede ser yuxtapuesta a la estrategia; sacrificar la forma (táctica) implica destruir el contenido (estratégico).
Todo proceso revolucionario está determinado por factores que le condicionan, es vital determinar si el desarrollado de tales factores guarda correspondencia con la realidad objetiva que deseamos transformar; es decir, si han logrado la vitalidad y maduración requeridas como para irrumpir contra el orden establecido y lograr la transformación deseada.
Los factores en cuestión son:
1 -Factor objetivo (realidad concreta).
2-Factor subjetivo (pueblo o masas populares).
3-Vanguardia revolucionaria(dirección colectiva-revolucionaria)
Sin embargo, estos factores no se desarrollan y maduran simultánea y uniformemente; en consecuencia, es necesario que el factor humano, como máximo factor de la vida y de la historia que es, se ponga en movimiento y con actitud beligerante accione para acelerar su desarrollo, como clave para salvar los obstáculos que habrá de enfrentar en el camino hacia el cambio y transformación revolucionaria.
De lo anterior se desprende que no es excusa para asumir la lucha revolucionaria el hecho que los mencionados factores no estén, en un momento determinado, al mismo nivel;
precisamente, aquí viene a jugar papel fundamental la VANGUARDIA REVOLUCIONARIA, porque se supone que, la misma está conformada por los hombres y mujeres mas preclaros y de mayor nivel ético, político-ideológico de una determinada sociedad y su acción está destinada a fundirse entre las masas populares (factor subjetivo) e impartirles la suficiente educación revolucionaria como para que éstas eleven su conciencia ética y alcancen el nivel que les permita, no solamente, interpretar y comprender la realidad objetiva (factor objetivo) sino transformarla; porque la VANGUARDIA comprende con mayor celeridad, precisión y previsión lo que momentáneamente les está impedido al común de las personas; por ende está en mejor capacidad de comprender la necesidad de transformar a una determinada sociedad, cuando ésta pisotea los intereses del pueblo.
Entonces, como fomentar y acelerar el desarrollo de un proceso revolucionario? El primer paso consiste en amalgamar las mejores y mas preclaras voluntades de un determinado pueblo o sociedad; de entre esas voluntades debe surgir la VANGUARDIA REVOLUCCIONARIA; y surgiendo ésta del pueblo mismo, es obvio que tendrá su reconocimiento.
Como, ya lo señalamos anteriormente, el rol de la VANGUARDIA está destinado a fomentar la conciencia ética e influir en el desarrollo cualitativo y elevación del factor subjetivo o masas populares; por lo que de los mencionados factores, sin menoscabar los factores objetivo y subjetivo, el factor VANGUARDIA REVOLUCIONARIA reviste singular importancia en el transe de la construcción Socialista; es impensable desarrollar proceso revolucionario alguno sin su conformación; porque justamente, quienes la conforman son los elementos mas elevados de una determinada sociedad; cuadros políticos con sobrada solvencia ética y probada lealtad al pueblo y a sus causas y es a través de la educación revolucionaria y el ejemplo impartidos por dicha vanguardia como las masas populares van a elevarse y adquirir conciencia ético-revolucionaria –Martí decía: la mejor manera de “decir” es “hacer”.
Ahora bien, factor objetivo no es más que la realidad concreta que impera en un determinado espacio o sociedad. En el caso Venezolano, así como en todas las sociedades donde rigen relaciones capitalistas, esta realidad concreta está imbuida de un sinfín de desmanes y manifestaciones degradantes , producto de que las relaciones que fundamentan al sistema capitalista son de carácter explotador; al tiempo que generan miseria, discriminación, racismo, exclusión, insalubridad, analfabetismo, desempleo, desnutrición infantil; estas relaciones de carácter explotador encarnan persé la “posibilidad” y “necesidad” de que los países “desarrollados” despojen a los países “subdesarrollados” -mas bien saqueados y explotados- de sus riquezas naturales (materias primas, recursos renovables y no renovables, entre otros); estos países que se han desarrollado a costa del sufrimiento , desmantelamiento y saqueo de los países “pobres” también necesitan explotar la mano de obra de sus propios conciudadanos, como medio para acaparar y acumular las ostensibles “ganancias” que les permite luego fomentar , acrecentar y extender su poderío bélico para convertirse en los gendarmes del mundo.
Factor subjetivo expresado en los sujetos o masas populares que conforman una determinada sociedad; ahora, cuando esa sociedad se manifiesta contraria a los intereses del pueblo, por su carácter explotador, entonces, ese pueblo debe luchar para transformarla en una sociedad de carácter solidario. Pero esto es impensable si antes no se produce en estas masas el salto cualitativo –conocido como maduración del factor subjetivo- que les permita determinar a sus enemigos históricos -y también a sus aliados.
Vanguardia revolucionaria expresa los elementos de más avanzada de una determinada sociedad; los mas elevados, porque defienden las causas del pueblo hasta con sus propias vidas. Y por el alto nivel ético, político y revolucionario de quienes la conforman está en capacidad de guiar al pueblo en su lucha por alcanzar la victoria popular.
A partir de estas sucintas notas, sugiero establecer algunas precisiones que considero necesarias para determinar en que etapa del proceso nacional nos encontramos. Para ello estimo pertinente plantear la siguiente interrogante:
1) Estamos transitando un proceso revolucionario, en Venezuela?
Si asumimos que, todo proceso revolucionario está condicionado por la MADURACIÓN o desarrollo y concurrencia de ciertos factores que le determinan, pero que además es deber de los revolucionarios determinar si los mismos –factores- han alcanzado en la sociedad que se pretenda transformar la suficiente madurez o desarrollo, como para comenzar a transitar una ruta verdaderamente revolucionaria, sin sobresaltos y abordando correctamente cada una de las etapas propias de todo proceso de transformación, debemos decir que en el caso Venezolano nos encontramos, a pesar del subjetivismo presente en unos pocos, en una etapa prerrevolucionaria, porque dos de estos factores –maduración del factor subjetivo y conformación del factor vanguardia revolucionaria- presentan una ostensible precariedad y que, sólo uno de ellos ha alcanzado un nivel optimo de desarrollo y maduración –el factor objetivo o realidad concreta Venezolana- , lo cual niega la pretendida tesis esgrimida por algunos facinerosos de que en Venezuela estamos en una etapa revolucionaria o SOCIALISTA, con lo cual no hacen sino confundir a las masas populares. Sin embargo, el esfuerzo de todo revolucionario debe estar dirigido a fomentar la potenciación y maduración de aquellos dos factores para lograr la debida concurrencia del trío factorial, como clave para avanzar a una etapa superior; sólo cubiertos estos pasos y logrado el precitado objetivo podremos comenzar la construcción de nuestro proyecto estratégico: el Socialismo. Antes ni pensarlo.
Valoremos, entonces, uno a uno el desarrollo y maduración de estos tres factores, contrastándolos al mismo tiempo con la situación Nacional, para confirmar si es cierta o no nuestra tesis de que en Venezuela apenas estamos transitando una etapa prerrevolucionaria:
1) MADURACIÓN O DESARROLLO DEL FACTOR OBJETIVO O REALIDAD CONCRETA EN VENEZUELA.
La crisis mundial que se expresa en la explotación del hombre por el hombre y en la miseria que hoy corroe las entrañas de la humanidad (mano de obra explotada, descomposición atmosférica, Hambruna, analfabetismo, mortalidad infantil, desempleo, etc.) constituye señal inequívoca de la MADURACIÓN del FACTOR OBJETIVO, a lo cual no escapa nuestro país, a pesar de los numerosos intentos infructuosos que ha realizado el gobierno nacional por revertir esta situación –estos esfuerzos ha resultado estériles, porque han sido realizados sin atentar en lo más mínimo contra las viejas estructuras que sirven de soporte al Estado burgués, vigente en nuestro país.
2) MADURACIÓN O DESARROLLO DEL FACTOR SUBJETIVO EN VENEZUELA.
¿Como verificar estado, desarrollo y madurez del FACTOR SUBJETIVO?
Aquí, debemos apuntar que la MADURACIÓN o desarrollo de este factor es consustancial a la MADURACIÓN o desarrollo de la CONCIENCIA DE CLASE que hayan adquirido en una determinada Sociedad las masas populares; sin esta ultima y al no comprender las masas populares su papel histórico liberador-desde luego, guiadas por una VANGUARDIA REVOLUCIONARIA- resulta cuesta arriba encaminar proceso revolucionario alguno. Mientras las masas populares sigan aceptando como natural que los fundamentales medios de producción estén en manos privadas, es decir, que la clase parasitaria capitalista siga ostentando la PROPIEDAD PRIVADA sobre los fundamentales medios de producción, entonces, muy poco hemos avanzado; mientras las masas populares no logren determinar el origen de la explotación que les conlleva cada vez más a un estado de miseria y pauperismo no estarán en capacidad de determinar a sus enemigos de clase y tampoco a sus aliados tácticos y estratégicos.
A manera de autocrítica, debo decir, que a tal situación hemos contribuido en grado sumo quienes decimos tener probada vocación y compromiso revolucionario –será por que seguimos actuando independientemente y cada quien desde su particular trinchera, sin la mas mínima intención de juntar en un solo esfuerzo todas las voluntades revolucionarias que permitan crear un bloque unitario, que no es otra cosa que la construcción de la VANGUARDIA REVOLUCIONARIA. Mientras no exista dirección colectiva que trabaje con empeño para elevar el nivel político-ideológico de las masas populares, para que éstas adquieran CONCIENCIA DE CLASE y por ende comprendan su papel en la confrontación nacional que se expresa en la LUCHA DE CLASES estaremos dando saltos al vacío.
Es obvio, nuestro desnivel como “dirigentes” es causal del desnivel que hoy sufren las masas populares; hasta el punto que hemos permitido que el “debate” nacional se desarrolle en términos de CHAVISTAS y ESCUALIDOS. Al permitir tal degeneración no hacemos sino ocultar el fondo de la confrontación –LUCHA DE CLASES.
Tampoco podemos ser miopes y negar que en Venezuela el FACTOR SUBJETIVO no haya experimentado en los últimos tiempos una creciente EXACERBACIÓN; sólo que exacerbación no implica la debida MADURACION!
3) MADURACIÓN, DESARROLLO O CONCRESIÓN DE LA VANGUARDIA REVOLUCIONARIA EN VENEZUELA.
A partir de las anteriores consideraciones, resulta lógico inferir que el proceso que se desarrolla en nuestro país carece –y por ahora no hay indicios de su conformación- de una VANGUARDIA REVOLUCIONARIA; y al no estar presente –y mucho menos maduro y desarrollado- un factor tan importante como este, es evidente que nuestras acciones rayan en el campo del subjetivismo y la especulación. Es por lo que, su conformación constituye el primordial y permanente reto y así debemos asumirlo, quienes estamos convencidos que en el SOCIALISMO está el futuro de la humanidad y para lograrlo es condición sinequanon la conformación de una VANGUARDIA REVOLUCIONARIA, Marxista-Leninista; sólo así será posible transformar esta nefasta Sociedad Capitalista.
En Venezuela no podemos llamarnos a engaños, debemos descartar toda conseja que pretenda, por vía especulativa, vociferar una supuesta revolución que sólo puede caber en la mente de quienes desconocen las etapas práctico-concretas e histórico-científicas que rigen un proceso verdaderamente revolucionario. Todo proceso revolucionario ha de construirse desmontando y/o transformando las viejas relaciones de poder –capitalistas- y nunca reproduciendo y fortaleciendo constantemente esas viejas relaciones de poder.
No obstante, es necesario reconocer que, en Venezuela estamos viviendo si una etapa PRE-REVOLUCIONARIA, la cual debemos abonar y profundizar , incorporando a las masas populares a las tareas revolucionarias; no sin antes proveerles de los elementos, herramientas e instrumentos que les permita elevarse y alcanzar un alto nivel en el plano ético y político-ideológico; sólo así podrán adquirir la necesaria y urgida CONCIENCIA DE CLASE; sólo así podrán enfrentar y vencer a su enemigo histórico estratégico: el imperialismo, representado en Venezuela por la burguesía nacional y sus lacayos, y establecer de una vez y para siempre la DEMOCRACIA POPULAR . Pero nada de lo anterior podrá consumarse sin la construcción y maduración del FACTOR VANGUARDIA, porque las tareas antes mencionadas le están asignadas exclusivamente a la misma; sin VANGUARDIA toda lucha por llevar acabo un proceso revolucionario esta perdido a priori.