“Miles de vecinos tomaron ayer las calles de Gaza durante las 12 horas de alto el fuego entre Israel y las milicias palestinas. Los desplazados de las zonas que eligió Israel para invadir la Franja aprovecharon la pausa para buscar a sus muertos o para rescatar algo de valor en las cordilleras de escombros dejados por una semana de bombas israelíes. De Shiyaiya, un barrio al este de Gaza, y de Beit Hanún, una ciudad al norte, solo quedan ruinas: sus calles son impracticables, sus talleres están abrasados, sus casas están hundidas y su ganado se pudre al sol. El edificio de tres pisos de la familia Yandiye, una de las mayores de Shiyaiya, dejó lugar a un enorme cráter en el que familiares con aspecto anonadado trataban por la tarde de salvar algo útil: ropa, zapatos, algún avío de campo. No quedaba nada.

Un chico de la familia que no quiso dar su nombre comentó que, al menos, no les había tocado buscar muertos.” (Diario El País, España, 26 de julio,20014).


Ese reportaje del principal periódico español, ocurrido mientras transcurría el cese al fuego de parte del ejército israelí contra la población civil de la Franja de Gaza, medida levantada por espacio de 12 horas y que posiblemente sea extendida a 24 horas o más, dice a las claras como es la vida que vive la población palestina, establecida en los territorios de Gaza. Esas angustias, por las pérdidas de sus familiares y sus pertenencias, es lo cotidiano durante los últimos años y no se debe ahora, sólo por la ofensiva que está llevando acabo en esta ocasión el ejército de Israel. Levantado el armisticio continuarán las bombas que caen en humildes casas de familias; las bombas que caen en las pocas escuelas que quedan ya, y en los pocos dispensarios de salud, que seguros están abarrotados de heridos. Y, los crímenes que no pueden hacer los bombardeos, estos los van hacer los tanques y el ejército, justificándose con que quieren acabar los túneles hechos por Hamas.

Son decenas de agresiones a los territorios de Palestina y centenares los muertos perpetrados durante muchas décadas, que a todas luces queda como una verdadera limpieza étnica contra esta población original, dueña de su propia tierra y hasta de la que hoy ocupa la población judía de Israel. Entre estas, están las famosas respuestas a las Intifadas. Para tan sólo recordar las agresiones israelí de los últimos 5 años, enumeraremos los operativos: “Columna de Nube" en noviembre del 2012, con un saldo de 156 palestinos y 6 israelíes muertos; "Plomo-Fundido" en diciembre del 2008, con un saldo de 1.401 palestinos y 13 israelíes muertos; "Invierno Caliente" en febrero 2008, con el saldo de 178 palestinos y 5 israelíes muertos.

Pero el historial criminal de Israel contra el pueblo palestino no es sólo ese sino es mucho más grande. Para hacer más pasajera esa historia sangrienta, dejemos que sea Eduardo Galeano, que con su magnífica pluma nos haga una síntesis de los hechos:“Desde 1948, los palestinos viven condenados a humillación perpetua. No pueden ni respirar sin permiso. Han perdido su patria, sus tierras, su agua, su libertad, su todo. Ni siquiera tienen derecho a elegir sus gobernantes. Cuando votan a quien no deben votar, son castigados. Gaza está siendo castigada. Se convirtió en una ratonera sin salida, desde que Hamas ganó limpiamente las elecciones en el año 2006. Algo parecido había ocurrido en 1932, cuando el Partido Comunista triunfó en las elecciones de El Salvador. Bañados en sangre, los salvadoreños expiaron su mala conducta y desde entonces vivieron sometidos a dictaduras militares. La democracia es un lujo que no todos merecen.”. (Gaza, artículo recién escrito.)

Y, cuáles son las causas de esta nueva agresión?

Las causas son múltiples y las hay internas y externas. El primer ministro Netanyahu y su gobierno vivían malos momentos, antes del operativo militar. El ministro de Asuntos Exteriores, Liebermann, -quien llegó a decir “que había que arrojar a los palestinos al Mar Muerto y utilizar la bomba atómica en Gaza”-, renunció el 6 de junio porque supuestamente Netanyahu le capitulaba a los palestinos y eso conllevó a que los sectores radicales sionista retiraran su apoyo al gobierno. Estas masacres sobre Gaza es una manera de demostrar de ser un duro y “halcón” de parte de Netanyahu y de evitar una mayor crisis y posible salida del gobierno. Y la causa externa es que Israel también quiere demostrar que es la “alteridad” y/o policía ante el enemigo “terrorista” iraní.

Y, no hay que olvidar que desde el 3 de julio de 2013, se produjo el golpe de estado en Egipto de Al Sisi, enemigo a muerte de los Hermanos Musulmanes y, entre sus primeras medidas tomadas fue cerrar el paso de Rafah, territorio de la franja de Gaza- de 40 kilómetros de largo por 9,5 de ancho, donde el 70% de la población es refugiada, hecho que está aprovechando en el campo militar los israelí ahora para facilitar su operación de exterminio del pueblo palestino.

Quedan otras causas imbricadas en lo interno y externo que pueden oscilar entre las especulaciones o las probabilidades. Se menciona como una posible causa de los actuales bombardeos, la intención inquebrantable de hacer desocupar esa zona, porque ya se ha confirmado la existencia de gas y petróleo en el entorno de Gaza. Se ha informado que el primer ministro palestino Mahmud Abbas y Putin han mantenido conversaciones al respecto, y ese hecho, ante lo que está pasando en Ucrania, mortifica a Israel.

Además surgen los comentarios de siempre en cada conflicto: que la industria de armamentos y seguridad a nivel mundial están interesadas en la ocupación y las masacres, y de que Gaza es también un “laboratorio” de pruebas de nuevas armas para la industria armamentista.

Y, está el papel del lobby pro-sionista en Estados Unidos. Lobby,- muy poderosos en el mundo-, que presionó en la época de Truman, en 1947, cuando se decidió la partición de Palestina y ha presionado desde entonces, hasta ahora.

Los gobiernos árabes abandonan la causa palestina

Antes de nada, es necesario señalar que, los árabes o musulmanes hacen suyas la causa palestina. Sin embargo, la mayoría de los gobiernos de la región no. Los pueblos son una cosa y los regímenes que los lideran otra cosa. Los países del Golfo son aliados de EEUU e Israel y del yihadismo internacional. Lo demuestran día a día en todos los conflictos regionales. El actual Egipto está en contra de los Hermanos Musulmanes y el Hamás. Las fronteras de Egipto y Palestina están cerradas. Jordania es un títere de EEUU, y mucho más lo es Turquía, la que es miembro de la OTAN. Ninguno de ellos enfrentará a Estados Unidos por la causa palestina.

El llamado eje de la resistencia lo conforman Siria, Irán, Irak, medio Líbano y no son consecuentes porque permanentemente quieren hacer acuerdos con los EEUU. Todos ellos enfrentan graves problemas de terrorismo o de carácter militar. La esperanza es que los pueblos árabes se levanten en contra de todos esos gobiernos. Solo así podrán defender la causa palestina, en encontrar su liberación y derrotar el sionismo de Israel.
Palestina seguirá resistiendo. Hamas no será derrotada

Esta ofensiva bélica de Israel contra Gaza y todos los argumentos que los sionistas dan son demostraciones de que las anteriores acciones militares contra Hamas y el pueblo palestino, no han podido ni podrán acabar con sus resistencias. Las aspiraciones y sueños de Israel, de destrozar a Hamas y derrotar al Pueblo palestino, se han hecho una pesadilla para el sionismo y el imperialismo yanqui. Netanyahu, no pudo demostrar que Hamas secuestró y asesinó a los tres adolescentes israelíes que el primer ministro israelí utilizó como pretexto para su actual arremetida contra la Franja de Gaza. Y esta operación militar contra Hamás, lo que ha hecho es impulsar aún más su popularidad y aumentar la moral a todos los palestinos, sea en Gaza, en Cisjordania, o en la diáspora por todo el mundo.

Ese desastroso error de cálculo de Israel tampoco implica que Hamas haya ganado hasta ahora la contienda. Hamas es un movimiento de resistencia islámico que surgió al calor de la primera Intifada (1987-1991). Uno de sus líderes principales es, Jaled Meshal. Tienen apoyo en Gaza, en Cisjordania y en centenares de palestinos de otros lugares. También es un movimiento de asistencia. En contextos coloniales, de ocupación militar y apartheid, tiene un papel relevante. Este grupo desarrolla aspectos sociales y asistenciales. En Gaza hay asimismo otras organizaciones políticas, islamistas y no islamistas.

Las Brigadas Ezzeddin al-Qassam,es el brazo militar de Hamas, y para este miércoles 23 de julio del 2014, habían informaciones en las redes sociales que con misiles tierra-aire habían derribado un caza F-16 del régimen israelí y destruido un tanque Merkava en el norte de Beit Hanoun. El número de israelíes que han perdido la vida durante la agresión se desconoce en su verdadera magnitud. El gobierno sionista informa de 32 muertos, 29 de ellos soldados. Según algunas fuentes, estas cifras tan bajas se deben en parte a que el régimen disminuye hasta en un 70% el número de sus bajas. Y, persona que muere en el hospital una hora después de la explosión de un cohete, ya no se considere baja de guerra si no muerte por accidente.

Un llamado a los revolucionarios del mundo a que emprendamos una fuerte campaña internacional, mucha más allá de los llamado humanitarios:

Exhortamos de abrir las fronteras de la Franja de Gaza;
De poner fin al bloqueo del enclave impuesto por Israel y Egipto;
Lo que necesita el pueblo palestino es armamentos, medicamentos y alimentos".

*Artículo escrito el día 26/07/2014 para el periódico Marea Socialista