Sin vacilaciones y sin timidez alguna la troika se impone, le cierra el paso a la coalición idealista del partido Siryza, teniendo como resultado una decisión poco aceptada por el pueblo griego, el primer ministro sucumbió a la enorme presión ejercida por las elites económicas de la eurozona liderada por Alemania, pero qué significa esto para el pueblo griego y su economía, qué significa esto para la izquierda que hizo su campaña con una bandera de anti- austeridad, por lo pronto tenemos una izquierda dividida desde donde se acusa al primer ministro de capitular frente al enemigo, una presidenta del parlamento griego que dice no a las medidas impuestas por la troika obedeciendo a la consulta popular, situación complicada y de difícil manejo para el primer ministro luego de haber tenido un respaldo de 61 % en un referéndum donde se dijo no a estas medida de austridad, Tsipras debió hacerse unas cuantas preguntas antes de tomar la decisión de aceptar el paquete vasallo que terminará de enterrar a los griegos en un endeudamiento mayor, y que seguramente agudizara las protestas que de algún modo quedan legitimadas por esta acción, acción que una vez más tendrá que pagar el pueblo griego.
Yanis Varoufakis, no dejo que sus creencias fueran permeadas por una situación de la cual estaba claro, Varoufakis entiende el concepto de dominación y el gran poder que logrará tener la troika, Alemania en particular, sobre la vida política y social de los griegos; el concepto neoliberal de la economía no deja espacios, y sus forma de ver el mercado es despiadada esto lo maneja bien Yanis Varoufakis quien optó por demitir a su puesto.
Las elites de poder establecidas en la Eurozona jamás aceptaran actitudes rebeles, y tal cual lo manifestó Varoufakis, Grecia ya estaba condenada a una negociación sin futuro, Grecia es el elemento disciplinado, espejo para quienes se atrevan a levantarse en la zona euro.
Tsipras tendrá un duro panorama político, con una austeridad mayor y un nuevo gabinete seguramente ajustado a los intereses de la troika, estas decisiones vienen acompañadas por un gran control político, donde los sectores privados intentaran establecer una hegemonía irreversible.
La liberación griega tendrá que esperar mucho luego de estos nuevos paquetes, un tercer endeudamiento que pone en jaque la soberanía territorial y política de Atenas, el margen de desigualdad social sufrirá una ampliación profundad que prácticamente arrojará nueva mano de obra barata y tercerizaciones a granel echado a tierra las esperan de quienes se mostraban optimistas .