Para muchos será difícil o no conveniente entender que el golpe de la derecha contra Evo Morales resulto al final en un beneficio para Venezuela, en tanto que el triunfo de Luis Arce y el MAS abre las posibilidades de un acercamiento y retomar los caminos de unidad latinoamericana que el proyecto bolivariano insiste en plantear como única salida a la dominación y al atraso sistemático en que vivimos o al que somos sometidos en América Latina y de lo cual Bolivia es uno de los mejores ejemplos históricos.
Pero los últimos dos años del gobierno de Evo Morales en Bolivia fueron nefastos para Venezuela en tanto que durante ese tiempo se tuvo que enfrentar la arremetida norteamericana contra el gobierno de Nicolás Maduro, que como es de todos conocido ha tenido las más diversas manifestaciones de violencia, tantas que es difícil reseñarlas todas y ante las cuales Evo Morales no tuvo una palabra de apoyo, declaraciones contundentes para oponerse a las tropelías, en fin cualquier declaración que indicara una posición de solidaridad, sino que por el contrario guardo un silencio elocuente.
Este silencio de Evo Morales no fue casual ya que mientras Venezuela se defendía trinchera por trinchera de los ataques de Estados Unidos y la derecha nacional , Morales tenía un acercamiento fraternal con los principales representantes de la derecha latinoamericana que son los grandes impulsores y agentes de la política imperialista norteamericana como Luis Almagro, que haciéndole honor a su vil apellido organiza desde la OEA todos los planes imperialistas contra Venezuela y Mauricio Macri que desde Argentina motorizaba estos mismos planes. A ambos Evo Morales, el antiguo seguidor de Hugo Chávez y Fidel Castro, ahora llama hermanos.
Por lo tanto cuando la derecha boliviana en una clara confusión política, le da un golpe a Evo Morales, organizado por cierto por su "hermano Almagro," esta dándose un golpe a sí misma. Podríamos decir que la derecha le dio un golpe a la derecha. Después de reunirse con Almagro y Macri, ¿qué le quedaba en agenda a Morales?: algo así como reunirse con el Presidente de los Estados Unidos, estrecharle la mano a Donald Trump. Eso no pudo hacerlo y con el golpe de estado tuvo que abandonar el país.
Cuando Evo Morales sale de Bolivia ya era un político rendido ante la omnipotencia imperialista; poco quedaba del Evo Morales chavista y admirado por los pueblos, pues derivaba cada vez más a la derecha y por lo tanto otro gobierno suyo no representaba para Venezuela ningún acompañamiento en sus políticas nacionales e internacionales, por el contrario podía esperar críticas y cuestionamientos a su estilo de gobernar. Pero la llegada del nuevo gobierno de Luis Arce en ese país además de ser un alivio al sufrimiento del pueblo boliviano ya ha significado un espaldarazo para Venezuela, su gobierno y al presidente Nicolás Maduro, lo cual creemos continuará y permitirá reparar los lazos de unidad y trabajo que deben existir entre nuestros países y una superación de la incertidumbre y quiebre que traería un gobierno de Morales. Por eso creo que hemos ganado algo.
Y ¿que significará para Bolivia la presencia del ex presidente en su escenario político? No lo sabemos pero puede querer vestirse con un traje popular y reivindicador "de los pueblos originarios" que ya no le cuadra pero que le permitiría volver posiblemente en unos años. Por esto los bolivianos deben tener mucha precaución no sea que ya le tengan cortado un nuevo traje en Washington.
Oscar Rodríguez E. Caracas, 8 de noviembre de 2020
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