“En la hora más bella y solemne de nuestra patria se alzó el decoro dormido en el pecho de los hombres”. José Martì
EL 20 de Octubre está institucionalmente constituido para los cubanos como el Día de la Cultura Cubana rememorando la lucha independentista llevada a cabo por patriotas bayameses en contra del yugo opresor de la colonia española, y en homenaje a la creación del Himno Nacional Cubano, que por primera vez se entonara un 20 de Octubre pero de 1868 animando la carga a machete que nos anunciara la hora de ser libres.
¡Del clarín escuchad el sonido!
El himno nacional cubano es una épica marcha patriótica, franca evocación a La Marsellesa, como símbolo universal de rebeldía, que ha estado acompañado durante ciento cuarenta años a todos los cubanos en sus guerras, sus triunfos, alegrías y tristezas, de todos los momentos memorables.
Fue compuesto por Don Pedro Figueredo Cisneros, -a petición de sus coterráneos- abogado de vasta cultura (poeta, músico, periodista, y aficionado a la literatura), quien a pesar de su clase social, supo vencer cualquier vacilación lógica y entregarse a la lucha contra el dominio de la colonia española.
¡A las armas valientes corred!
La madrugada del 14 de agosto de 1867, Don Pedro Figueredo nombrado cariñosamente por sus compañeros de lucha como Perucho pone su musa a funcionar y en su piano comienza a escribir las notas de lo que el tituló La Bayamesa y que con el tiempo devendría en el Himno Nacional Cubano.
El 10 de Octubre de 1868 se produjo la clarinada independentista, cuyo grito inicial lo dio Carlos Manuel de Céspedes en La Demajagua.
El 18 de Octubre Perucho combatió enérgicamente para liberar a Bayamo, correspondiéndole dirigir una de las tres columnas, y fue él quien con un grito exclamara a sus compatriotas: “¡Al cuartel, que ya es nuestro!”, exhortándolos valientemente avanzar contra la instalación, refugio de Udaeta y otros oficiales, quienes al ser sitiados procedieron a rendirse posteriormente.
En la madrugada del día 20 se rindieron los españoles, apareciendo abanderadas la hija y esposa de Figueredo. El pueblo entusiasmado tarareaba el Himno a Bayamo. La gente exaltada pedía a voces: ¡la letra!
Ante ese pueblo que clamorosamente exigía la letra de la conocida melodía Perucho sentado en su caballo procedió a escribir los versos, repartiendo la letra entre los congregados que con júbilo la cantaban a coro.
El valiente hombre de la aguerrida y patriótica frase: “Al combate corred bayameses” estará por siempre en el corazón de todos los cubanos, recordándonos que la patria os contempla orgullosa.
No temáis una muerte gloriosa
Don Perucho Figueredo fue condenado a muerte y fusilado el amanecer del 17 de agosto de 1870. Ese día la patria perdió físicamente un glamoroso hijo que enseñó a sus compatriotas a venerarla; el mismo que el 27 de de octubre de 1868 expresara en un emotivo discurso:
“Nuestra bandera, desplegada en Yara, ha de batirla los vientos de las demás provincias (…) moriremos como hombres libres en los campos de Cuba Libre o nos levantaremos como pueblo independiente, confundidos con todos los pueblos de la tierra.”
Así entregó su vida el hombre que un día, en encendidos versos, legó a los cubanos la convicción de “que morir por la patria es vivir” e instándonos a luchar por independizarla en cualquier campo de batalla.
Es por ello que en perenne recordación a tan trascendental acontecimiento desde 1867 cada 20 de Octubre se celebra en Cuba el Día de la Cultura Nacional.
*Periodista y escritora