Uribush,
conectando su pendrive y reproductor Mp3 mental en el CPU de la Casa Blanca,
pretende llenar de virus troyanos el sistema operativo de la terminal
de los pacíficos cibernautas latinoamericanos. Para lograr el hardware
y el software de sus deseos de sangre y fuego, creó un esquema de navegación
fundamentado en la manipulación y la tergiversación a través de un
webmaster diseñado por la unidad de control de los halcones virtuales
del Pentágono.
El
patrañero Uribush, en un lenguaje muy propio de los medios electrónicos,
nos presenta información digital en la que señala que la computadora
de Raúl Reyes, capturada en la masacre armada en la que fue asesinado
junto con otros 22 guerrilleros, contenía supuesta información de
que “tanto Ecuador como Venezuela están cooperando con las FARC”.
De tal nodo, el marrullero electrónico Uribush viene a formar parte
de la nueva generación Internet y demuestra que la red abre nuevas
formas de infección e indeseable contaminación política electrónica
made in USA.
Aunque
lo considere ajustable, el truhán Uribush sabe que la dificultad del
juego que trata de imponer desde su PC viruleado es muy elevada y tiene
un temerario costo político. Por lo tanto, intenta presentar al disco
duro de una supuesta computadora propiedad de Raúl Reyes como si fuese
la caja negra de un avión que posee valiosa información secreta
hecha a sus imagen y semejanza. Computadora que, según los agentes
de la CIA, el FBI, el DAS y cualquier boys scout que se le ocurra decirlo,
tiene una pila de 50 kilos de uranio recargable que soporta hasta 90
horas de reproducción. ¡Te pasaste Uribush! Si Uribush fuese Pinocho,
¿de qué tamaño tendría la nariz? ¿Acaso del Palacio de Nariño
a la Sala Oval de la Casa Blanca?
Desmontando
la base de datos presentada por los voceros del gobierno de Uribush,
el presidente de Ecuador, Rafael Correa, alegó que según inspecciones
realizada en el lugar por la Cancillería y militares ecuatorianos,
"no hubo ninguna persecución caliente'', sino que los 22 guerrilleros
fueron ‘‘bombardeados y masacrados mientras dormían, utilizando
tecnología de punta, seguramente con la colaboración de potencias
extranjeras''.
Como
se sabe, el Departamento de Estado de Estados Unidos ofrecía cinco
millones de dólares por la captura de Raúl Reyes. Además ha suministrado
a Colombia asistencia técnica, armamento, equipo de comunicaciones
e información satelital para luchar contra las FARC.
Por
lo visto, la novedosa experiencia de navegación esotérica inventada
por Uribush consiste en cambiar la cultura política de los comunicados,
discursos, arengas y proclamas en letra impresa por el email de documentos
privados presentados estratégicamente en la pantalla de un monitor
de alta resolución, como si fuera una ventana abierta al mundo por
la que se van lanzando acusaciones irresponsables y tendenciosas contra
los adversarios, como la amenaza de llevar al presidente Hugo Chávez
a la Corte Penal Internacional. O sea, Uribush bombardea un campamento
de las FARC y asesina a 22 guerrilleros, pero el que debe ir preso es
Chávez. No hay dudas de que Uribush vive en un mundo al revés, creado
de acuerdo a sus intereses y los de su jefe estadounidense.
De
acuerdo a la patraña digital montada por Uribush, el monitor de su
computadora de la guerra sucia está presentado en bases ergonómicas
con inclinación, elevación, rotación y ajuste de altura, para que
la pantalla pueda pasar de posición horizontal a vertical hasta adopta
el de la ultra derecha más recalcitrante. Es decir, la base de datos
del cerebro electrónico de Uribush se ajusta a los máximos ángulos
de visualización de la amplia gama de ataques que se emprenden a diario
contra los gobernantes de Ecuador y Venezuela desde el ciber situacional
encharcado que funciona en las alcantarillas pútridas del Palacio de
Nariño.
La
acción del videojuego guerrerista que Uribush nos ha puesto en la pantalla
de su monitor está animada por las voces de los asesores militares
estadounidenses y dobladas pésimamente al español por el ministro de Defensa,
Juan Manuel Santos, el director de la Policía,
general Óscar Naranjo, y el canciller colombiano, Fernando
Araújo, quienes asumen el papel
de personajes que se sumergen en una falsa historia llena de búsquedas
de secretos que deben descubrir en la laptop más resistente a bombas
y cañonazos que existe en el portafolio
mundial de notebooks. Es decir, una computadora en manos de Uribush
es la metralleta de Al Capone disparando contra sus traumas históricos.
Al
escuchar a estos
villanos que siembran el caos mediático en su propio beneficio, pareciera que Uribush trata de
convertir la lucha que, por más de seis décadas, libra las FARC en
un simple videojuego presentado en Playstation 2
distribuido por Disney para PC’s carentes de antivirus para detectar
el engaño, la estafa y la mentira.
Al
quedar al descubierto la jugabilidad del deplorable guión belicoso
escrito en la Sala Oval de la Casa Blanca, se comprueba que el contenido
principal de la presentación montada por Uribush en Power Point no
es lo suficientemente atractivo como para tenernos entretenidos un buen
rato delante de la pantalla de nuestros ordenadores.
Definitivamente, con su cruenta incursión armada en territorio ecuatoriano, nadie duda que Uribush está convertido en un endiablado mandatario pendenciero de élite que sigue el alambicado camino de la oscuridad para alcanzar el poder definitivo desde la pantalla de su PC ensangrentado, tramposo y mentiroso.
vchavezlopez@hotmail.com