El pasado 16 de Noviembre se realizó en Roma, Italia, una nueva Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria promovida por la Organización para la Agricultura y la Alimentación de las Naciones Unidas (FAO), cuyo director general es el senegalés Jacques Diouf.
Son realmente impactantes las cifras que maneja esta organización respecto al número de seres humanos que actualmente pasan hambre en el planeta: 1.020 millones de personas distribuidas de la siguiente forma; 642 millones en Asia y el Pacífico; 265 millones en África (Occidente, centro y el sur); 53 millones en América Latina y el Caribe; 42 millones en el Medio Oriente y el norte del África y, en los países capitalistas… ¿desarrollados?... del norte también tienen su cuota importante y lamentable de “hambrientos y hambrientas”, 15 millones.
Es no menos alarmante el significativo incremento en esas cifras en tan solo un año transcurrido desde el 2.008 a la fecha; De 850 millones de personas que sufren o padecen la escasez de alimentos, aumentó a 1.020 millones en 2.009, nada menos y nada mas que 170 millones de diferencia y esto debido, según la FAO, a la grave crisis económica capitalista.
Fíjense lo que manifestó, entre otras cosas, Jacques Diouf con ocasión de la cumbre: “… Ante la situación de hambre en el mundo los gobiernos deben ocuparse en vez de preocuparse…”; “… Necesitamos de los gobiernos unos 44 mil millones de dólares (29.500 millones de euros) anuales para eliminar el hambre en el tercer mundo…”; “… Sólo unos 60 presidentes y primeros ministros de los 190 esperados acudieron al encuentro, lo que redujo la discusión a un plano técnico…”; “… Para combatir el hambre en el mundo se necesita voluntad y determinación política…”
Para mayor sorpresa y hasta cierto punto ¡indignación!, la cumbre concluyó con un balance “negativo”. Diouf manifestó que la crisis alimentaria sólo se combatirá cuando a las palabras les sigan los hechos, así mismo dijo que se sentía pesimista ante la falta de resultados concretos. De igual forma, organizaciones de ayuda humanitaria, medios de comunicación y observadores calificaron la cumbre de “total fracaso”.
¿Por qué reseñar lo anterior?. Porque es preciso reflexionar responsable y definitivamente en términos de lo que significa el capitalismo y sus consecuencias negativas para la supervivencia de la especie humana. Se sostiene que esa crisis alimentaria quizás no tenga su origen en el déficit de la producción de alimentos, aunque debemos reconocer que producto de los graves cambios climáticos consecuencia también del desarrollismo capitalista, principalmente en los llamados países industrializados, que genera a su vez la no menos grave contaminación ambiental y que origina las prolongadas sequías por fenómenos meteorológicos, podemos admitir que se produce una afectación importante en la producción agrícola, sin embargo, esa crisis alimentaria se debe principalmente, en nuestro criterio, a la práctica capitalista de convertir los alimentos en “mercancía” y, por supuesto, las grandes masas de población de los países pobres no tienen suficientes recursos para adquirirlos.
Ahora, fíjense bien lo siguiente:
Para el año 2.006 las partidas presupuestarias de los países del mundo dedicadas a las compras de armas para la guerra, claro está, aumentaron un 6% con respecto al año anterior, hasta alcanzar… lean bien por favor… unos 1.399 billones de dólares, según cifras del Instituto para la Paz de Estocolmo (Sipri). Desde 1.998, los países del mundo destinan un 45% más de dinero a la adquisición de armas. Las naciones de la Europa del este fueron quienes en la última década tuvieron mayor presupuesto para el gasto militar, seguido del medio oriente.
¿Saben quien es el mayor comprador de armas en el mundo actualmente?. Los Estados Unidos a quienes el Sipri les atribuye el 45% del gasto internacional. Desde el 2.001 la partida militar de ese país ha aumentado en un 59%, siguiendo en la lista el Reino Unido, China y Francia, aunque en estos últimos países el gasto es tan solo una décima parte del de los EE.UU. Así también el mayor exportador de armas en el mundo son los Estados Unidos quienes abarcan el 31% del mercado.
Y en el año 2.008… ¿saben qué país encabezó la lista del gasto mundial en armamentos?... Volvieron a acertar, los mismísimos “Yunai Estéis”. ¿Saben también a cuanto llegó el monto correspondiente al gasto mundial ese año?. La “bagatela” de 1,46 billones de dólares, un aumento en el orden del 21%, equivalente al 2,4% del PIB mundial. Para que tengan una idea le corresponderían 217 dólares a cada habitante del planeta, repito, cifras del Instituto para la Paz de Estocolmo (Sipri). De esa “bagatela”, los EE.UU., gasta 600 mil millones de dólares… ¡Que tal!
Creo que con lo señalado antes bastaría para una buena reflexión… ¿no lo creen?
Bueno, como muy bien han afirmado algunos autores, escritores o intelectuales del mundo respecto al dilema existente entre el capitalismo y el socialismo. Por solo citar a dos de ellos:
Rosa Luxemburgo, “Socialismo o Barbarie” (1.916)
Noam Chomsky, “Hegemonía o Supervivencia” (2.004)
¡Es vital decidir…!
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