Luego de más de un año de haber sido instalada este domingo la Asamblea Constituyente de Bolivia aprobó, en forma definitiva, la nueva Constitución Política del Estado. Los debates se reiniciaron en Oruro (suroeste) la noche del sábado.
Más de dos tercios de los parlamentarios presentes de la Asamblea Constituyente de Bolivia aprobó este domingo el texto de la nueva Constitución Política del Estado, luego de casi 15 horas de deliberaciones.
La recién aprobada Carta Magna, de 411 artículos, define a Bolivia como un Estado autónomo regional, departamental, municipal e indígena originario campesino cumpliendo el mandato del referéndum autonómico de 2006.
En cuanto a la organización territorial, el país suramericano quedó estructurado en departamentos, provincias y municipios indígenas.
Los asambleístas sesionaron desde la noche del sábado en la ciudad de Oruro (suroeste), a 230 kilómetros al sur de La Paz.
En esta sesión, se dio el visto bueno, artículo por artículo, al texto constitucional.
Ahora, lo que queda pendiente es la realización de una fase de revisión y concordancia de los articulados constitucionales que estará a cargo de una comisión interpartidaria, según explicó el asambleísta por el oficialista partido Movimiento al Socialismo (MAS), Carlos Romero.
El pasado 24 de noviembre, la norma había sido aprobada en primera discusión en un colegio militar donde los asambleístas tuvieron que refugiarse, debido a los violentos disturbios en Sucre (sede original) que se cobraron la vida de tres personas y dejaron 300 heridos.
La Asamblea tiene como fecha límite para entregar la constitución boliviana el próximo 14 de diciembre. Su primera instalación fue el 16 de agosto de 2006, en Sucre, capital oficial del país.
La selección de Oruro como sede final del cónclave, representó un cambio al anuncio que había hecho la semana pasada la directiva del foro, que situaba la sede de la Asamblea en la zona cocalera de Chapare, al centro del país suramericano.
Los continuos ataques por parte de grupos sucrenses afectos a la oposición, tanto a constituyentes como a la sede, obligaron a la directiva a suspender por casi tres meses los debates, debido a la falta de garantías.
Por lo tanto, el presidente del Comité Cívico Popular de Oruro, Santiago Sauciri, había afirmado el sábado que resguardarían a los constituyentes y el trabajo que realizan en la Asamblea Constituyente.
"Nosotros ya estamos organizados, están llegando los dirigentes de todo el país, con los que realizaremos una vigilia conjunta y permanente", señaló Sauciri.
El pasado 23 de noviembre, la Asamblea Constituyente decidió sesionar desde el Cuartel Militar Castillo de la Glorieta (a cinco kilómetros de Sucre), lo que despertó la ira de los manifestantes, que se oponen a que legisle la nueva Constitución si antes no incluye a Sucre como la capital plena de los poderes públicos.
Luego de ganar una guerra civil en 1899, La Paz alberga a los poderes Ejecutivo y Legislativo, mientras que Sucre sólo acoge al Judicial.
