19 Septiembre 2009 - El gobierno colombiano confirmó este viernes la transformación del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), acusado de espionaje a magistrados, políticos y periodistas de oposición, en una nueva agencia de inteligencia civil, que sólo conservará dos de las siete funciones actuales: inteligencia y contrainteligencia.

Felipe Muñoz, director del organismo, explicó que el DAS adoptará el nombre de Agencia de Inteligencia del Estado y producirá "la inteligencia y contrainteligencia que requiere el país (...) con el fin de garantizar la seguridad nacional y brindar absoluta confianza y transparencia a la ciudadanía y al mundo".

Ya el jueves pasado, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, había dicho que era partidario de eliminar la cuestionada institución. "Yo soy partidario de eliminar la institución, y de dejar una pequeña institución prestando unos servicios migratorios, y de inteligencia, que pueden ser manejados por la policía", dijo.

Muñoz adelantó que la próxima semana el Ejecutivo presentará ante el Congreso un proyecto de ley que le dará facultades extraordinarias a Uribe "para eliminar la actual estructura y crear la nueva Agencia de Inteligencia y otros aspectos generales".

Tras el escándalo de la intercepciones telefónicas y el espionaje, que en Colombia se conoce como "chuzadas", el DAS pasó a ser una organización dependiente directamente de la Presidencia colombiana, por ello es que Uribe es quien debe eliminarla.

Entre los cambios más importantes que sufrirá el DAS destaca que ya no manejará la oficina de la Policía Internacional (Interpol) en Colombia, que formará parte de la Policía Nacional y que los servicios de protección a las personalidades políticas serán ahora responsabilidad conjunta de la Policía y el Ministerio de Interior y Justicia.

El DAS enfrenta un proceso investigativo que lleva a cabo la Procuraduría de la nación por las denuncias de magistrados, periodistas y senadores que adversan el gobierno de Álvaro Uribe, quienes aseguran haber sido víctimas de interceptaciones telefónicas ilegales o espionaje, hecho conocido también como "las chuzadas del DAS" en Colombia.

La adhesión del presidente Uribe a eliminar el organismo se produjo a pocos días de efectuarse el primer pronunciamiento por parte del departamento de Estados Unidos (EE.UU.) contra las chuzadas.

"Los señalamientos contra el DAS por grabaciones ilegales son alarmantes e inaceptables. Es de resaltar la importancia que ha depositado la Procuraduría en investigar estos crímenes. Pero reportes de prensa y ONG indican que las actividades ilegales continúan, lo cual vuelve más vital que el Gobierno colombiano de pasos para asegurar que éste no sea el caso y la Procuraduría adelante una investigación rigurosa, exhaustiva, e independiente que determine el alcance de estos abusos y castigue a los responsables", sentenció el departamento de Estado mediante un comunicado

Anterior a ese comunicado de Estados Unidos EE.UU., el presidente Uribe no se había mostrado interesado en eliminar al servicio de inteligencia, sino en preservarlo.

"Ahora faltan muchas reformas, todos los días estamos empeñados en ellas. Ahora por ejemplo estamos de frente a ver cómo reformamos profundamente el DAS", así se expresaba el mandatario colombiano, antes de conocerse la postura estadounidense respecto a la institución.

Las denuncias sobre interceptaciones ilegales por parte del DAS, que vienen desde el año pasado, llevaron a la Fiscalía y a la Procuraduría (Ministerio Público) a abrir investigaciones contra cuatro ex directores del servicio de inteligencia.

El pasado 7 de septiembre, el ex funcionario de la Oficina de Informática del DAS, Rafael García, denunció que ese organismo, a través del Bloque Norte de las ultraconservadoras Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y junto al ministerio del Interior colombiano, participó en una conspiración impulsada por sectores de oposición venezolanos contra el gobierno del presidente Hugo Chávez.