(15.10.09) Cochabamba, Bolivia Los presidentes asistentes a la VII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA) concretarán en Cochabamba el tratado constitutivo del Sistema Unitario de Compensación Regional (Sucre).
"Es una repuesta desde el ALBA a la crisis, para desengancharnos del patrón dólar y comenzar a utilizar una moneda alternativa denominada Sucre en nuestras transacciones comerciales", declaró Amenhotep Zambrano, secretario general del ALBA.
Se trata de una moneda virtual que estará vigente desde el primero de enero de 2010, para las operaciones comerciales entre los países integrantes del ALBA.
La idea es que "empecemos a compensar y definitivamente bajemos la presión de demanda que tenemos sobre el dólar. Que empecemos a comerciar con nuestras monedas locales, en bolívares, en bolivianos, en pesos, eso es lo que se pretende con el Sucre".
Agregó que las reuniones van muy avanzadas, "ya hay respuestas del Consejo Monetario Regional, de la Unidad de Cuenta Común, y de la Cámara de Compensación Regional".
Se trata de una tarjeta de crédito
Pedro Páez, presidente de la Comisión Ecuatoriana para la Nueva Arquitectura Financiera Regional, explicó que el Sucre "sería como una tarjeta de crédito que se abren los bancos centrales para darnos créditos a nosotros mismos, para creer en nosotros mismos".
"Lo que estamos es creando nuevos medios de pago adicionales para incorporar a nuevos actores, incluyendo a los de la economía popular, a nuevos mercados y a nuevos productos, a nuevos flujos comerciales que no nacen de la espontaneidad de unos mercados controlados por los oligopolios, sino que tienen que nacer de una noción política de construir la Patria grande que soñaba Bolívar".
Recordó que esta es una propuesta ecuatoriana de noviembre del año 2008 "Ya tenemos el documento, hemos revisado el tema técnico, lo financiero, el tema legal y lo que estamos es puliendo los últimos detalles para ponerlo a disposición de los presidentes”.
Con ello "tendríamos las bases para realizar transacciones reales, pero más allá de que se firme el documento, los bancos centrales pueden empezar con arreglos bilaterales, empezar con las transacciones de prueba".
Pedro Páez indicó que este trabajo se está "desarrollando con mucho rigor técnico, con mucha responsabilidad científica; estos elementos nos van a permitir elementos concretos en situaciones concretas".
